Jajaja, bueno el día que vayas a comprarlo no llevarás el dinero en efectivo, entre otras cosas porque no se puede pagar en efectivo esa cantidad. Seguramente lo pagarás con la misma tarjeta que el otro día llevabas en el bolsillo. Pero es que a veces la psique es complicada y nos juega malas pasadas. Estoy seguro de que, si hace tiempo que vas detrás de la pieza, has tenido oportunidad de verla más veces tras el escaparate. Teniendo en cuenta que el reloj no habla (siguiendo tu símil, no es la "maciza" del instituto que cuando abre la boca te cae el alma a los pies), se me hace difícil comprender qué tipo de defectos se le pueden ver en la mano que no se hayan visto en un escaparate.
Es una gran verdad que muchos relojes "raros" o "infrecuentes", que sólo los ves en foto, luego decepcionan en la mano. A mí me pasó con el Oris Chronoris que pongo en foto y que sólo había visto en la web: cuando lo trajeron en la relojería, me pareció mucho más pequeño e ilegible de lo que yo me lo había podido imaginar.
La cuestión es que el Speedmaster no hace falta imaginárselo, porque lo habrás visto muchas veces: habrás visto a otras personas que lo llevan y lo habrás visto en muchas tiendas.
También puede ser que, puestos a tener una pieza "Premium", precisamente esta no te llene: y ahí vuelve tu mecanismo de autoprotección, haciéndote creer que el reloj decepciona cuando en el fondo es que... no estás enamorado de él. Tratándose de un matrimonio monogámico, te tiene que convencer TOTALMENTE. Si dudas, déjalo correr.