A ver, amigos, esto es como tantas cosas.
Yo entiendo que te guste un Ferrari. Y que te lo compres. Y que lo disfrutes. Y que lo conserves; y tanto y tanto que lo conserves y que lo cuides que pasen treinta años y siga fetén. Y la consecuencia es que tras todo ese tiempo (pagando mantenimientos, neumáticos, piezas desgastadas, reparación de otras) un día viene en el periódico que te lo compran por lo que te costó o algo más.
¿Eso es una inversión?
Bueno, pues no exactamente. Si capitalizas garaje (aunque sea tuyo, o precisamente por serlo), impuestos de circulación, itv, y todo lo dicho, una de cada 300.000 compras puede resultar rentable y salir en el "tbo" como quien encuentra un Stradivarius en el altillo de su casa.
Y ahora nos vamos al reloj.
¿Invertir?
Si fuera un cuadro de un artista novel, que tiene posibilidades, y que hoy le ayuda a pagar el alquiler, y vas comprando obras, sobre todo porque te gustan, las tienes y te complace verlas colgadas en tu casa; y un día cuando despegue, tengas unas de su primera época que adquieran mucho más valor... Pues aceptado. Especialmente aceptado, porque un cuadro está, y queda quieto, y económicamente para la Ag. Tributaria no tiene presencia que exija pagar por tenerlo. (Pagar, aunque se pague poco, siempre es caro).
En ese caso te diría, "adelante, compra cuadros así".
Y en relojes, yo diría que todo negocio es aproximadamente ruinoso. Si bien alguno hay -y los hay- que nada más comprarlo puedes venderlo por más porque hay lista de espera, la cosa está en que cuando lo usas, lo llevas a reparar, a revisar, y tal, el valor potencial se merma por los gastos inherentes al funcionamiento.
Y no olvides que la tienda compra los productos a un precio muy distinto al que lo vende. Ese margen no es valor esencial nunca.
Y por tanto si piensas en disfrutar, perfecto. Ferrari, reloj, cuadros, ir al teatro, y cenar con la pareja o con la que queres que lo sea. Todo es disfrutar.
Pero si con mentalidad económica crees que los bitcoins y el reloj son inversiones rentables (yo me fío menos de los bitcoins que de un banquero judío del siglo XVI contando mi dinero), algo me dice que siendo el valor esencial menor, lo demás es especulativo.
Tu mismo. Yo soy de los que tengo y disfruto, sin pensar en qué voy a sacar. (Por eso no vendo nada; y tampoco soy ejemplo de negociador en mis aficiones). Pero siempre puedes salir en el periódico como el que le vendió el otro reloj a Cristiano Ronaldo. (Uno ya sabemos que lo tiene). Je.
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