Yo no creo que, por el momento, se vaya a producir una bajada entre las marcas establecidas. Es más, probablemente, tratarán de proseguir con el modelo actual, y aprovecharán la coyuntura para subir los precios todo lo que puedan (hay que tener en cuenta que al canal de distribución se le paga en euros o en dólares, y lo mismo pasa con la mayor parte del aprovisionamiento); si el mercado al que se dirigen se lo permite, tontos serían si no lo hiciesen.
Ahora bien, también creo que cada vez se acercan más al punto de saturación en el que algunos de sus clientes nos vamos a hartar de que los intangibles supongan una parte abrumadora del coste del reloj, y vamos a dejar de estar por la labor de pagar cajas de unobtanium (que luego se rompen) y movimientos de aetereum que requieren mantenimiento a razón de 500 mortadelos cada tres o cinco años.
Si al final resulta que piezas fabricadas por marcas de segundo orden, como Omega (y no digamos nada, Tissot), fabricadas en una época en la que la tecnología dejaba mucho que desear, como los setenta, después de cuarenta años de mantenimiento más bien descuidado, siguen funcionado como campeonas (y mi extensa colección de vintages da fe de que eso es así), hay margen para fabricar buenos relojes, que duren cuarenta años y que se puedan hacer a una fracción del coste actual que tienen las piezas del sector de lujo (y no digamos de alta gama) actual.
Puede que a no mucho tardar, alguien se decida a fabricar relojes aprovechando las instalaciones infrautilizadas de marcas punteras que no son pueden aprovechar toda su capacidad de producción, prescindiendo de canales de distribución que cada vez son más residuales, por lo menos para un segmento importante de los compradores, y centrándose en mejorar la relación calidad-precio, en vez de en potenciar unos intangibles que, tal vez, a buena parte de los compradores, empiezan a estorbarles.
Y ese día, que creo que cada vez está más cercano, como algunos relojes de foro o de pequeñas marcas pueden atestiguar, algunos modelos de negocio tendrán que cambiar para siempre.