A lo mejor se acababa antes con una discusión semejante, siempre acreedora de hilos largos y prolijos, si se supiera exactamente cuál es la intención de la pregunta cuando se compara Seiko con las de siempre. Algún día veremos alguna innovación en la pregunta y se incluirá a Panerai, para variar. Aunque sólo sea por el morbo.
Resulta curioso apreciar que muchas veces se hacen referencia a estas marcas como si fueran entes de carne y hueso que “compiten” en un evento deportivo a ver quién es el más fuerte, el más resistente, el más guapo o el más seductor.
Antes al contrario, son empresas cuya única intención es vender. Cuanto más, mejor. Y cuánto mayor sea el margen de beneficio, muchísimo mejor.
Se habla de “innovaciones tecnológicas” inter-marcas, cuando la tecnología usada para los grandes buques insignia de cada marca es totalmente obsoleta y, lo que es más, limitada por el medio; lo mismo que da exactamente igual ir al espacio y gritar a pleno pulmón o hacerlo con un equipo HiFi de 1.000 W RMS, porque no se va a oír nada, las supuestas “innovaciones” que se “crean” en la relojería mecánica no son tales, sino interpretaciones diferentes de un mismo principio, a veces más sofisticado, a veces más simple, pero completamente limitados por el medio utilizado y con problemas muy similares a la hora de rendir su función básica, que es dar la hora. Lo que ocurre es que a esa “función básica” se unen otras, no tan básicas, que tienen una relevancia mucho mayor y que justifican la existencia de marcas como Rolex, Omega, Panerai u otras. Pero NO justifican la existencia de Seiko, de Citizen y no digamos de Casio. Estas últimas marcas son resultado de entramados industriales de última generación, cuya base de facturación procede de la venta (dentro de sus divisiones, cuando existen en una matriz mayor) de relojes que utilizan tecnologías más sencillas, menos costosas y de PVP sensiblemente inferior de cara al público, independientemente de que en sus políticas de marketing prueben que son capaces de elaborar productos tan sofisticados como el que más, incluyendo lógicamente a los suizos.
Los “entendidos”, los “aficionados”, los “expertos” NO son la base de clientela de ninguna marca. Ni suiza, ni japonesa ni nada. Lo son personas cuya compra está influida por factores que nada tienen que ver ni con la “tecnología” del reloj mecánico, ni por supuesto con el conocimiento de sus maquinarias de forma comparativa con otros relojes. Rolex sigue tan a gusto vendiendo su 3135 porque es un calibre fiable que le ofrece pocos problemas, y no tiene muchos clientes aporreando sus puertas pidiendo un nuevo calibre, ya que el, digamos, 95% de sus compradores no sabe ni qué es eso. Y si Seiko pudiera usar de forma licenciada un calibre 3135 en sus relojes, NO vendería más haciendo referencia a tal cosa, SALVO que dijera que es un “calibre Rolex”.
Como decía, la misión de estas empresas es VENDER todo lo posible y rendir dividendos a sus accionistas, no satisfacer debates intelectuales sobre alturas tecnológicas. Y para vender mucho hay que hacerse con un mercado. Seiko, por mucho Ananta y GS que haga, no compite con Rolex, Omega o Panerai. Lo que hace es marketing con esos modelos. La razón es muy simple:
- ¿Oye, te has gastado 9.000,00 Euros en un reloj?
- Sí
-¿Estás fumado tío?
- No, es un Rolex (No, es un Omega, No, es un Panerai)
- Ah!!! Una joyita eh?... me han dicho que la gente “guay” mola de eso y se cotizan alto en el mercado porque hay mucha demanda.
- ¿Oye, te has gastado 9.000,00 Euros en un reloj?
- Si
- ¿Estás fumado, tío?
- No, es un Seiko.
- Espera, que llamo a una ambulancia.
Nada de lo que se debata aquí, mayoritariamente personas con mucho recorrido relojero, experiencia y conocimientos, va a cambiar esto. Porque nadie, discutiendo todo lo que se quiera sobre las alturas de cada marca, es capaz de modificar las sensaciones del mercado.
Y esas sensaciones dicen que las marcas suizas mencionadas son de objetos-relojes de lujo cuya misión es “algo más” que dar la hora. Y ese algo más lo llamamos “X” en la ecuación, y que cada cual lo etiquete como quiera.
La sensación en el mercado de Seiko no es esa. Es “qué guapo, el Kinetic”, “qué robusto ese cuarzo”, “qué útil, con tantas funciones incorporadas”. A ver cuántos encontramos que hagan referencia a los GS y Anantas fuera del circuito reducido de los muy afcionados.
Y eso, por supuesto, lo saben las empresas que aquí se mencionan, y cada una va a lo suyo, que es vender relojes a quien está dispuesto a comprarlos.
Por eso es importante saber cuál es la intención del que hace la pregunta sobre los Seiko/Omega/Rolex. ¿Qué es exactamente lo que quiere saber? ¿Si Seiko puede reproducir un Rolex Submariner? Pues CLARO que sí. Puede reproducirlo y mejorarlo. ¿Lo hace? Pues CLARO que no. ¿Para qué? Por mucho que se empeñe en hacer un SuperSeikoSUB, NO SERÁ un Rolex. O no será un PO.
Y la marca lo es TODO. En este negocio del lujo, lo es todo. Marca prestigiada enfocada al lujo, marca que se vende. Marca cualificada para multi-gama, multi-terreno, marca que se vende.
¿Y por qué Seiko no se convierte en una marca de lujo como Rolex, Omega o Panerai y renuncia a vender relojes a 200 Euros?
Sencillo, primero porque a los accionistas les daría un ataque. Segundo, porque tal estrategia es un riesgo inasumible para una marca que ya arrastra el lastre de vender relojes a 200 Euros y, tercero y más importante, porque convertiría a Seiko en una empresa vulnerable. Rolex, Omega y Panerai son empresas vulnerables dentro de un entorno que demanda lujo …. Pero en el que el lujo cada vez es más criticado, más denostado y más estigmatizado. No se sabe muy bien qué pasará en el futuro y cuánta gente “normal” se arriesgará a salir de su casa con un Rolex puesto, con el temor de que los estigmaticen o marginen como alguien que se gasta mucho dinero (que otros muchos no tienen) en un artículo inútil.
En consecuencia, no es sólo que sean marcas diferentes, es que son EMPRESAS distintas, con diferentes intereses, diferentes mercados y diferentes riesgos asumidos.
Yo, respetuosamente, muchas veces interpreto este tipo de debates en los foros como el interés de alguien en oír de los “expertos” una frase convincente que asegure que se puede tener un Seiko de 500,00 Euros tan bueno o mejor que un Rolex de 5.000,00 Euros, y poseer este argumento para repetirlo ante otros: “Mira, mi Seiko es mejor que esos Rolex de por ahí, más guapo, mejor acabado y más funcional. Y encima no me gasto esos dinerales. Soy persona inteligente, cauta y racional”.
Pues sí, qué duda cabe. El Rolex de 5.000,00 es mejor, pero no por su tecnología, sino porque se asemeja más a una joya. Pero no es 4.500,00 Euros mejor. Pero ¿quién se compra el Rolex por eso? ¿O el Panerai?
Finalmente, lo que diga yo no es más que una opinión. No tan versada en relojes como en otras cosas. Pero estas fotos que pongo son de la revista National Geographic de Enero 2014.
Publicidad a doble página de Rolex. Sólo hay una leyenda del modelo y la foto con la marca. No hay discurso. No hay explicación. No hay nada más.
Publicidad a página simple de Seiko. Foto, marca y discurso sobre las bondades del reloj, explicando lo novedoso de su sistema.
Ninguna marca de lujo explica NUNCA por qué "las particularidades tecnológicas o de funcionamiento" de su producto son una maravilla. Lo que hace es soltar un discurso sobre quién lo lleva, en qué ocasiones ha sido y, como mucho, alusiones a su diseño. Nunca hablan de algo que no haga referencia a su exclusividad.
Así que…. ¿para qué intentar comparar lo que es diferente?. No se trata de ser mejor o peor. Son, simplemente, empresas diferentes, con objetivos diferentes y estrategias diferentes.
Enviado desde la nave espacial Nostromo con Tapatalk HD