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El foro de relojes de habla hispana con más tráfico de la Red, donde un reloj es algo más que un objeto que da la hora. Relojes Especiales es el punto de referencia para hablar de relojes de todas las marcas, desde Rolex hasta Seiko, alta relojería, relojes de pulsera y de bolsillo, relojería gruesa y vintages, pero también de estilográficas. Además, disponemos de un foro de compraventa donde podrás encontrar el reloj que buscas al mejor precio. Para poder participar tendrás que registrarte.
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- Estado
Indy1961
De la casa
Sin verificar
Hasta ahora no se me habia ocurrido pero la palabra Longines me sugiere ALARGAMIENTO del tiempo claro.
Akthara
De la casa
Verificad@ con 2FA
A mi es que me gustan los relojes más que a un tonto un lápiz, es la explicación más lógica que puedo dar.
La complicación y miniaturización de los mecánicos, un muelle que mueve un puñado de piezas y engranajes que me dan la hora, una parte de nostalgia, en otros un poquito de historia, otras cosas que me dan los cuarzos como medir la temperatura, brújula, cuenta regresiva, etc...
La complicación y miniaturización de los mecánicos, un muelle que mueve un puñado de piezas y engranajes que me dan la hora, una parte de nostalgia, en otros un poquito de historia, otras cosas que me dan los cuarzos como medir la temperatura, brújula, cuenta regresiva, etc...
Alfredo BRB
Habitual
Verificad@ con 2FA
Creo que lo mio tiene un término en psicología y este es "sobrecompensación". Hay gente que pasó hambre y que ahora es incapaz de perder peso, o quien fue pobre
y al tener oportunidad dedica toda su vida a lucrarse.
Desde pequeño tuve que ser muy responsable. Mi vida ahora sería un caso de explotación infantil, pues desde los 10 años trabajaba y estudiaba. Por tanto era algo
fundamental para mí controlar el tiempo sin depender de la televisión o de hacer una llamada por teléfono para saber la hora (¿lo recordaís?).
Total que me regalaron un Timex mecánico, no automático. Aún no existian los cuarzos.
Aquel reloj fue un gran salto en mi vida, pero pronto noté sus carencias, como su poca exactitud y el que tuviera que darle cuerda. Tal dependencia
de mi memoria lo hacía poco fiable. Me obligaba a ajustarlo frecuentemente con la televisión y a recordar cada día que debía darle a la ruedecita, cosa que
alguna vez olvidé.
Tanta atención necesitaba aquel reloj que, aunque han pasado por mis manos muchos relojes, nunca compré un mecánico de cuerda.
Gracias a la revolución del cuarzo, pronto pude tener un reloj fiable en mi muñeca, a pesar de que cada cierto tiempo había que cambiar la pila
(no duraban tanto como ahora, al menos hasta la aparición de los CASIO). Aquello fue como una liberación y los relojes comenzaron a apasionarme,
quizás influido también por la publicidad en los semanales de los periódicos.
Lo que no sé exactamente es el motivo de que tenga esa afición a los relojes y las cámaras de fotos, pero no a los coches, cuando
antes me gustaban y el primero que tuve era de risa (tenía que sujetar la puerta para que esta no se cayese al suelo).
Al menos con la marca Timex, he hecho las paces. Obviamente no con un mécanico. Ojalá hubiera tenido algo como este
(en menor diámetro) siendo un niño, hubiera flipado
.
Quizá sea mejor así, pues mi hijo tiene más de media docena de piezas y no siente ni de lejos la pasión que yo he vivido desde pequeño
con los relojes.
y al tener oportunidad dedica toda su vida a lucrarse.
Desde pequeño tuve que ser muy responsable. Mi vida ahora sería un caso de explotación infantil, pues desde los 10 años trabajaba y estudiaba. Por tanto era algo
fundamental para mí controlar el tiempo sin depender de la televisión o de hacer una llamada por teléfono para saber la hora (¿lo recordaís?).
Total que me regalaron un Timex mecánico, no automático. Aún no existian los cuarzos.
Aquel reloj fue un gran salto en mi vida, pero pronto noté sus carencias, como su poca exactitud y el que tuviera que darle cuerda. Tal dependencia
de mi memoria lo hacía poco fiable. Me obligaba a ajustarlo frecuentemente con la televisión y a recordar cada día que debía darle a la ruedecita, cosa que
alguna vez olvidé.
Tanta atención necesitaba aquel reloj que, aunque han pasado por mis manos muchos relojes, nunca compré un mecánico de cuerda.
Gracias a la revolución del cuarzo, pronto pude tener un reloj fiable en mi muñeca, a pesar de que cada cierto tiempo había que cambiar la pila
(no duraban tanto como ahora, al menos hasta la aparición de los CASIO). Aquello fue como una liberación y los relojes comenzaron a apasionarme,
quizás influido también por la publicidad en los semanales de los periódicos.
Lo que no sé exactamente es el motivo de que tenga esa afición a los relojes y las cámaras de fotos, pero no a los coches, cuando
antes me gustaban y el primero que tuve era de risa (tenía que sujetar la puerta para que esta no se cayese al suelo).
Al menos con la marca Timex, he hecho las paces. Obviamente no con un mécanico. Ojalá hubiera tenido algo como este
(en menor diámetro) siendo un niño, hubiera flipado
. Quizá sea mejor así, pues mi hijo tiene más de media docena de piezas y no siente ni de lejos la pasión que yo he vivido desde pequeño
con los relojes.
Tempus Edax Rerum
Milpostista
Verificad@ con 2FA
Bueno, de hecho el nombre viene del lugar donde estaba la fábrica en Saint-Imier llamado Es Longines "largos prados", de "long" y a su vez del latín "longus, a, um", largo
edge8
Forer@ Senior
Sin verificar
Gracias por la aportación...
Draghan
Forer@ Senior
Verificad@ con 2FA
Der13
Milpostista
Sin verificar
Grande Clint! En Movistar dan cada dia una peli del maestro, canal TCM a las 22:00 horas. A los que les guste el buen ci e.El tuyo tampoco está nada mal
Enviat des del meu SM-G975F usant Tapatalk
A
Aravismo
Milpostista
Sin verificar
Que los tengo todos!!!! . Viajar, Fotografía, Deportes, Tecnología, Cultura, etc
En cuanto a los relojes creo que es la suma de todos los intereses no “físicos”. Son tecnología, iconos culturales en un sector en muchos casos, no hay limite económico por arriba o por abajo. Muchos tienen historia, algunos son “antigüedades”.....
Aunque por encima de todo ello Y sin buscar explicaciones, me gustan
En cuanto a los relojes creo que es la suma de todos los intereses no “físicos”. Son tecnología, iconos culturales en un sector en muchos casos, no hay limite económico por arriba o por abajo. Muchos tienen historia, algunos son “antigüedades”.....
Aunque por encima de todo ello Y sin buscar explicaciones, me gustan
RelojdeCUCO
Milpostista
Sin verificar
De pequeño me fascinaba mirar un precioso Roskopf de bolsillo, uno de los pocos, o el único, que había en el pueblo. Era de un de un vecino pudiente, que no rico.
Cuando fui creciendo y mis ansias de volar eran más fuertes que el apego al terruño comencé a pensar que sin un reloj en la muñeca, se tenía que ver, en el bolsillo no me valía, no se me vería como persona mayor. Cosas de uno. Hay tantas...
Pasados los años, volado bastante, tanto que acumulaba alguna tarascada que otra, y habiendo cumplido mi deseo con el reloj, lo de mayor, pobrecillo aquel chaval, no tanto por tenerlo sino por el paso de los años, comencé a darme cuenta de que un reloj no era solo para llevarlo en la muñeca sino para disfrutar de él aunque solo fuera para mirarlo y acariciarlo.
Y ahí comenzó toda la segunda parte hasta hoy y que espero dure hasta que me pongan por ultima vez, inerte ya y sin echar de menos su tic-tac, un viejo y achacoso reloj pero dulce y manso como un gatito de peluche, al que he realizado varías cirugías de aprendiz con resultados un poco a lo Frankenstein. Suerte que se deja que si no... Vendrá conmigo a donde vaya, que vaya usté saber, y tardará más en desaparecer para que quede constancia de mi pobre miseria, porque su pequeña y sencilla historia, de contarla, nadie la creería. - Ah...¿pero tú eres un reloj...? Nunca dejaré que difamen así a un sufrido y flel compañero que me ha visto sudar la gota gorda peleándome con ruedecitas, tornillos que parecen piojillos y mil cosas más que suele llevar en su fría panza, sin rechistar, ni decir mu.
Para mi el reloj es un entretenimiento del que no puedo permitirme el lujo de olvidarlo, abandonarlo. Eso de tener en las manos un semicatalino y darle cuerda con un cuidado exquisito, escuchando cómo desgrana los dientes su débil y pequeña cadeneta, no tiene precio. Y es que si lo tuviera tampoco podría pagarlo, esa valoración es tan subjetiva que se elevaría a una cifra con muchos ceros. Vaya, fuera de mi afición que no por serla implica desembolsos importantes. Al contrario, menos coste, mayor alegría.
Cuánta letra para decir que me gustan todos los relojes..!!!!!!!!!! Iba a poner, hasta los más feos. Qué mentira, no hay ni un solo reloj feo. Todos son bellos, cada uno a su manera.
Saludos. Esto de estar encerrado me va a dejar alguna neurona que otra lisiada, ya ves la parrafada para tan poca cosa.
Cuidados, que no sé qué habremos hecho para merecer esto...
Cuando fui creciendo y mis ansias de volar eran más fuertes que el apego al terruño comencé a pensar que sin un reloj en la muñeca, se tenía que ver, en el bolsillo no me valía, no se me vería como persona mayor. Cosas de uno. Hay tantas...
Pasados los años, volado bastante, tanto que acumulaba alguna tarascada que otra, y habiendo cumplido mi deseo con el reloj, lo de mayor, pobrecillo aquel chaval, no tanto por tenerlo sino por el paso de los años, comencé a darme cuenta de que un reloj no era solo para llevarlo en la muñeca sino para disfrutar de él aunque solo fuera para mirarlo y acariciarlo.
Y ahí comenzó toda la segunda parte hasta hoy y que espero dure hasta que me pongan por ultima vez, inerte ya y sin echar de menos su tic-tac, un viejo y achacoso reloj pero dulce y manso como un gatito de peluche, al que he realizado varías cirugías de aprendiz con resultados un poco a lo Frankenstein. Suerte que se deja que si no... Vendrá conmigo a donde vaya, que vaya usté saber, y tardará más en desaparecer para que quede constancia de mi pobre miseria, porque su pequeña y sencilla historia, de contarla, nadie la creería. - Ah...¿pero tú eres un reloj...? Nunca dejaré que difamen así a un sufrido y flel compañero que me ha visto sudar la gota gorda peleándome con ruedecitas, tornillos que parecen piojillos y mil cosas más que suele llevar en su fría panza, sin rechistar, ni decir mu.
Para mi el reloj es un entretenimiento del que no puedo permitirme el lujo de olvidarlo, abandonarlo. Eso de tener en las manos un semicatalino y darle cuerda con un cuidado exquisito, escuchando cómo desgrana los dientes su débil y pequeña cadeneta, no tiene precio. Y es que si lo tuviera tampoco podría pagarlo, esa valoración es tan subjetiva que se elevaría a una cifra con muchos ceros. Vaya, fuera de mi afición que no por serla implica desembolsos importantes. Al contrario, menos coste, mayor alegría.
Cuánta letra para decir que me gustan todos los relojes..!!!!!!!!!! Iba a poner, hasta los más feos. Qué mentira, no hay ni un solo reloj feo. Todos son bellos, cada uno a su manera.
Saludos. Esto de estar encerrado me va a dejar alguna neurona que otra lisiada, ya ves la parrafada para tan poca cosa.
Cuidados, que no sé qué habremos hecho para merecer esto...
Última edición:
Doncainastyle
Weiser Uhrmacher
Sin verificar
Draghan
Forer@ Senior
Verificad@ con 2FA
De pequeño me fascinaba mirar un precioso Roskopf de bolsillo, uno de los pocos, o el único, que había en el pueblo. Era de un de un vecino pudiente, que no rico.
Cuando fui creciendo y mis ansias de volar eran más fuertes que el apego al terruño comencé a pensar que sin un reloj en la muñeca, se tenía que ver, en el bolsillo no me valía, no se me vería como persona mayor. Cosas de uno. Hay tantas...
Pasados los años, volado bastante, tanto que acumulaba alguna tarascada que otra, y habiendo cumplido mi deseo con el reloj, lo de mayor, pobrecillo aquel chaval, no tanto por tenerlo sino por el paso de los años, comencé a darme cuenta de que un reloj no era solo para llevarlo en la muñeca sino para disfrutar de él aunque solo fuera para mirarlo y acariciarlo.
Y ahí comenzó toda la segunda parte hasta hoy y que espero dure hasta que me pongan por ultima vez, inerte ya y sin echar de menos su tic-tac, un viejo y achacoso reloj pero dulce y manso como un gatito de peluche, al que he realizado varías cirugías de aprendiz con resultados un poco a lo Frankenstein. Suerte que se deja que si no... Vendrá conmigo a donde vaya, que vaya usté saber, y tardará más en desaparecer para que quede constancia de mi pobre miseria, porque su pequeña y sencilla historia, de contarla, nadie la creería. - Ah...¿pero tú eres un reloj...? Nunca dejaré que difamen así a un sufrido y flel compañero que me ha visto sudar la gota gorda peleándome con ruedecitas, tornillos que parecen piojillos y mil cosas más que suele llevar en su fría panza, sin rechistar, ni decir mu.
Para mi el reloj es un entretenimiento del que no puedo permitirme el lujo de olvidarlo, abandonarlo. Eso de tener en las manos un semicatalino y darle cuerda con un cuidado exquisito, escuchando cómo desgrana los dientes su débil y pequeña cadeneta, no tiene precio. Y es que si lo tuviera tampoco podría pagarlo, esa valoración es tan subjetiva que se elevaría a una cifra con muchos ceros. Vaya, fuera de mi afición que no por serla implica desembolsos importantes. Al contrario, menos coste, mayor alegría.
Cuánta letra para decir que me gustan todos los relojes..!!!!!!!!!! Iba a poner, hasta los más feos. Qué mentira, no hay ni un solo reloj feo. Todos son bellos, cada uno a su manera.
Saludos. Esto de estar encerrado me va a dejar alguna neurona que otra lisiada, ya ves la parrafada para tan poca cosa.
Cuidados, que no sé qué habremos hecho para merecer esto...
No puedo estar más de acuerdo en lo que te pongo en negrita.
Saludos, compañero.
English87
The Beater Man
Verificad@ con 2FA
Compañero, Draghan, me ha gustado mucho el hilo. Es de esos que generan buenos comentarios y reflexiones, por lo que gracias por tener la brillante idea. Es difícil aportar algo nuevo después de las acertadas opiniones y comentarios de los participantes, por lo que intentaré aportar mi granito de arena.
El tiempo en sí es algo invisible que mueve nuestras vidas desde que tenemos memoria. Si antiguamente se contaba con el sol y las estrellas y las rutinas diarias se organizaban en torno a la luz del día, tras la aparición del reloj la vida de los seres humanos mejoró ya que había una mayor claridad para saber el tiempo que se podía emplear en realizar cada tarea.
Es por ello, que un objeto tan útil y precioso para el hombre había que cuidarlo, valorarlo y respetarlo, por lo que poco a poco quedaría impregnado en nuestra imprenta social y de costumbres. Tener un reloj te daba importancia, te convertía en hombre y te distinguía de los demás. El arte se unió a la mera complejidad mecánica y contribuyó a diseños y materiales que mejoraran los relojes.
Y así nació, en mi humilde opinión, esta afición que cabalga a medias entre la veneración a la complejidad del mecanismo, la utilidad intrínseca y la belleza del diseño. Todo ello aderezado con el símbolo de poder y posición que ciertas piezas conllevan por su exclusividad.
En mi caso, mi gusto por los relojes comenzó con la primera comunión, fecha en la que tuve mi primer reloj de cadete. Desde entonces no he dejado de llevar en mi muñeca diferentes piezas, que han ido cambiando a medida que la sociedad, mi propia edad, mi capacidad económica o mis gustos evolucionaban. Recuerdo con mucho cariño un reloj de bolsillo que llevé en mi época progre, entre los 17 y los 19 años, o mi primer reloj de calidad comprado en 2004 y que nunca saldrá de mi caja.
Definir lo que siento por los relojes es complicado y sencillo a la vez. Podría decir simplemente que me gustan y cerrar mi comentario. Pero es mucho más complejo que eso.
Un reloj es un amigo que va conmigo a diario, me reconforta cuando lo miro, me da seguridad cuando lo sopeso en la muñeca, me organiza la vida con su medida del tiempo y sobretodo me embelesa cuando me hipnotizo con el segundero avanzando inexorable, como la vida misma. No puedo pensar en mejor regalo para mi próximo cumpleaños que un reloj, y ya me he encargado de ello. Lo tengo esperando en mi armario hasta el día 18 de este mes para abrirlo y disfrutar de él.
Tened por seguro que os lo presentaré.
El tiempo en sí es algo invisible que mueve nuestras vidas desde que tenemos memoria. Si antiguamente se contaba con el sol y las estrellas y las rutinas diarias se organizaban en torno a la luz del día, tras la aparición del reloj la vida de los seres humanos mejoró ya que había una mayor claridad para saber el tiempo que se podía emplear en realizar cada tarea.
Es por ello, que un objeto tan útil y precioso para el hombre había que cuidarlo, valorarlo y respetarlo, por lo que poco a poco quedaría impregnado en nuestra imprenta social y de costumbres. Tener un reloj te daba importancia, te convertía en hombre y te distinguía de los demás. El arte se unió a la mera complejidad mecánica y contribuyó a diseños y materiales que mejoraran los relojes.
Y así nació, en mi humilde opinión, esta afición que cabalga a medias entre la veneración a la complejidad del mecanismo, la utilidad intrínseca y la belleza del diseño. Todo ello aderezado con el símbolo de poder y posición que ciertas piezas conllevan por su exclusividad.
En mi caso, mi gusto por los relojes comenzó con la primera comunión, fecha en la que tuve mi primer reloj de cadete. Desde entonces no he dejado de llevar en mi muñeca diferentes piezas, que han ido cambiando a medida que la sociedad, mi propia edad, mi capacidad económica o mis gustos evolucionaban. Recuerdo con mucho cariño un reloj de bolsillo que llevé en mi época progre, entre los 17 y los 19 años, o mi primer reloj de calidad comprado en 2004 y que nunca saldrá de mi caja.
Definir lo que siento por los relojes es complicado y sencillo a la vez. Podría decir simplemente que me gustan y cerrar mi comentario. Pero es mucho más complejo que eso.
Un reloj es un amigo que va conmigo a diario, me reconforta cuando lo miro, me da seguridad cuando lo sopeso en la muñeca, me organiza la vida con su medida del tiempo y sobretodo me embelesa cuando me hipnotizo con el segundero avanzando inexorable, como la vida misma. No puedo pensar en mejor regalo para mi próximo cumpleaños que un reloj, y ya me he encargado de ello. Lo tengo esperando en mi armario hasta el día 18 de este mes para abrirlo y disfrutar de él.
Tened por seguro que os lo presentaré.
Draghan
Forer@ Senior
Verificad@ con 2FA
Yo cumplo dos días antes que tú y también me he dado el mismo regalito
La verdad es que como instrumento de medición de nuestras vidas y poner orden en el caos del Universo en el que vivimos es intentar dar un poco de organización a nuestra existencia...
RelojdeCUCO
Milpostista
Sin verificar
RelojdeCUCO
Milpostista
Sin verificar
Seguro que coincidimos la mayoría de los que "andamos" por aquí. Locos de atar pero con el reloj puesto.
Saludos, amigo.
Draghan
Forer@ Senior
Verificad@ con 2FA
Aprovecho, que en los tiempos que corren vaya usté a saber, para felicitaros por adelantado en vuestro casi inmediato cumpleaños. Disfrutad de los relojes y de la vida.
Saludos
¡Muchas gracias, amigo!
R
Ricardo90
Forer@ Senior
Sin verificar
Buenos dias. Lo mio se remonta a cuando mi hermano comulgo y su cauny, (el me lleva 2 años) Se lo cogia y me lo ponía cuando no estaba. Quedaba hipnotizado y paseaba con mi madre que me dejaba cogerselo......y no dejaba de mirar la esfera, la hora y ese segundero a las 6. Luego vas creciendo y vinieron Seiko y Orient. De destriparlos y admirar la maquina a llegar a entenderla y estudiarla pasada la selectividad. Y así hasta ahora...........culo veo culo quiero...........pero la razón filosófica (mía). Siempre supe que el reloj es algo con corazón que tiene el descaro de decirte continuamente como se te escapan segundos, minutos,horas,dias...........y los años y aun así lo tratas con cariño y miras con ternura. Un saludo Cuídense.
- Estado
