Pues, yo siempre llevo diver con chaqueta, con camisa de puño al puño, y ya está. El reloj asoma, o lo asomo, o queda oculto, según la posición. Conduciendo se ve, en la mesa, asoma, y con brazos caídos, no.
La cuestión es que te sea cómodo.
En cuanto a las mangas de las camisas, yo tengo un problema que los camiseros, los vendedores de camisas, y el público en general ni atisba (o sí, pero se callan los ladinos de ellos), y es este:
Yo, antes de todo esto, me lavaba las manos igual 10 veces al día o más. Y lavarse las manos cuando llevas la camisa con el puño colgante hasta los nudillos o casi (a media mano) es imposible.
Por ello me compro las camisas "justas" (me dicen que me vienen pequeñas) porque intento que la manga se queda algo más arriba que media mano. Y además, para lavarme, me encorvo por atrás, y las mangas se retraen al estirar las manos. Cuando la camisa es "de mi talla" (a decir del sastre o del vendedor) las mangas no se retiran con ese movimiento.
Por ello (Ya digo, que probablemente sea yo el rarillo) intento usar mangas menos salientes (a veces incluso no se ven, cosa que la elegancia con chaqueta repugna) para mi higiene maniática previa, ahora tan justificada. Y ahorro: quitarme la chaqueta, desabrochar el puño, arremangar, y lo contrario. Eso en el baño de un bar no se puede hacer y allí -si hay jabón- también me lavo.
El reloj, pues está ahí, y aparece o se cubre según. Ni me preocupa más que para medir tiempos con el bisel o mirar la hora o la fecha.