Paso
Forer@ Senior
Sin verificar
Pues...
La estética externa provoca un grato (o ingrato, según los casos) placer visual de inspiración y regocijo constante, ya que está a la vista, marcando el estilo y personalidad del reloj. Supone su cara más conocida, su expresión más directa hacia nosotros, su mirada en definitiva. Y si todo ello no nos resulta seductor...
En cambio, el calibre es, por lo general, algo de conocimiento intelectual por nuestra parte y que puede provocarnos una satisfacción íntima...
A cada cual le "pone" lo que le "pone", pero creo que es difícil generalizar y dependerá de cada caso o reloj. En cualquier caso pienso que es bueno tener en cuenta ambas cuestiones a la hora de adquirir un reloj y dar preponderancia a un aspecto o a otro de la cuestión, dependiendo de la naturaleza del reloj y la ocasión y motivo de su adquisición.
En cualquier caso, en lo que a mí respecta en cuanto a mi experiencia personal, cuando me he cansado de una determinada estética, he comprobado que empiezo a no usar el reloj en cuestión y al final, mal que me pese, me resulta casi indiferente el calibre que lleve.
En cuanto a cuánto durará la moda de los "relojes grandes", pues confío en que los mismos 80 años aproximadamente que duró la de los "relojes pequeños" En todo caso llevamos ya más de 10 años con los grandes y éstos siguen creciendo y creciendo, en tamaño, modelos y marcas de lo más variopinto, así que considero que nos hallamos en plena curva ascendente y por tanto, la pregunta del momento no es cuánto durará, sino hasta dónde llegará, porque la respuesta al "cuánto", quizás competa a la próxima generación. Piensa en que hubo un tiempo en que la moda de los relojes pequeños sobrevino a la de los relojes grandes, creándose así una moda, también pasajera, que no sólo duró muchos años, sino que impuso y generalizó lo que, en su día, a mi me dió por bautizar como "relojes chincheta" o "chinchetilla" como apostillan algunos.
¡Saludos!
Prefiero la máquina, la estética es pasajera.
Esto no quiere decir que me ponga cualquiera.
Ahora se llevan enormes.Cuanto durará la moda?
La estética externa provoca un grato (o ingrato, según los casos) placer visual de inspiración y regocijo constante, ya que está a la vista, marcando el estilo y personalidad del reloj. Supone su cara más conocida, su expresión más directa hacia nosotros, su mirada en definitiva. Y si todo ello no nos resulta seductor...
En cambio, el calibre es, por lo general, algo de conocimiento intelectual por nuestra parte y que puede provocarnos una satisfacción íntima...
A cada cual le "pone" lo que le "pone", pero creo que es difícil generalizar y dependerá de cada caso o reloj. En cualquier caso pienso que es bueno tener en cuenta ambas cuestiones a la hora de adquirir un reloj y dar preponderancia a un aspecto o a otro de la cuestión, dependiendo de la naturaleza del reloj y la ocasión y motivo de su adquisición.
En cualquier caso, en lo que a mí respecta en cuanto a mi experiencia personal, cuando me he cansado de una determinada estética, he comprobado que empiezo a no usar el reloj en cuestión y al final, mal que me pese, me resulta casi indiferente el calibre que lleve.
En cuanto a cuánto durará la moda de los "relojes grandes", pues confío en que los mismos 80 años aproximadamente que duró la de los "relojes pequeños" En todo caso llevamos ya más de 10 años con los grandes y éstos siguen creciendo y creciendo, en tamaño, modelos y marcas de lo más variopinto, así que considero que nos hallamos en plena curva ascendente y por tanto, la pregunta del momento no es cuánto durará, sino hasta dónde llegará, porque la respuesta al "cuánto", quizás competa a la próxima generación. Piensa en que hubo un tiempo en que la moda de los relojes pequeños sobrevino a la de los relojes grandes, creándose así una moda, también pasajera, que no sólo duró muchos años, sino que impuso y generalizó lo que, en su día, a mi me dió por bautizar como "relojes chincheta" o "chinchetilla" como apostillan algunos.
¡Saludos!