Pues es increible, no habia oido nunca que criaran vacas unica y exclusivamente para obtener la piel para hacer los asientos.
Enpemo... Hola...
A riesgo de que Rabioso me cascotee por "offtopiquear", creo que Rolex y Rolls Royce tienen parecidas filosofías.
En una empresa integrada los más verticalmente que se pueda (dentro de las complejidades de la globalización y como las dos mencionadas) sus directivos pueden controlar mejor la calidad de los materiales de sus productos desde que comienzan siendo un material en bruto hasta que, una vez terminada su elaboración, se entregan al cliente como un conjunto de piezas de excepcional nivel.
No sé si Rolex tendrá una siderurgia propia, donde fundir con complicados procedimientos los aceros de sus cajas que son de aleaciones especiales.
Pero, si no es así, es seguro que, al adquirir un lingote de acero en bruto directamente a la acería, podrá controlar la calidad del proceso en la empresa proveedora y posteriormente hacer más controles en los talleres de Rolex y rechazar aquellas partidas que no cumplan con los estándares de Rolex.
Tampoco sé si Rolex tiene minas y moliendas propias de donde obtener los materiales en bruto de sus biseles cerámicos, pero sí estoy seguro de que al adquirir productos a su proveedor de materia prima para los biseles, podrá hacer un control estricto de las partidas que se le entregan para que cumpla con los estándares de Rolex y rechazar aquellas partidas en las que la mezcla de materias primas no satisfagan la calidad Rolex.
Y así con todo lo que produce Rolex, que ha ido gradualmente dejando de fabricar sus relojes con piezas de terceros, para hacerlo todo “fatto in casa”.
Por supuesto, el gran público (yo por lo menos) no conoce con exactitud el grado de esa integración vertical, porque una integración vertical absoluta es materialmente imposible pero, a mayor integración vertical, mejor control de la calidad de la producción.
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En el caso de "las vacas de la Rolls Royce" (que podría perfectamente ser una leyenda urbana aunque no me consta que lo sea) la razones de ello es que la inmensa mayoría del ganado sufre lesiones en el cuero durante su desarrollo (desde que es cordero hasta llegar a vaca lista para el sacrificio) con pequeños cortes que cicatrizan posteriormente y que, en la mayoría de las empresas tapiceras, se arreglan disimuladamente con pegamentos modernos o se esconden en lugares poco visibles del tapizado.
Sin embargo, la tradicional calidad de Rolls Royce impide esta práctica y sólo usa cueros impecables y sin la más mínima huella de una lesión previa.
Como eso es prácticamente imposible, Rolls Royce descarta todas aquellas partes cortadas de un cuero original que tengan algún defecto, por pequeño que sea.
Pero como es necesario que las texturas sean iguales (bueh, lo más iguales posible) y que una vez teñidas también sean iguales, es que no considero descabellado que para tapizar un Rolls Royce se necesite el cuero de muchas vacas hasta llegar a un producto que, por su textura y color, sea uniforme.
Por ello no sería imposible que Rolls Royce tuviera un campo para la cría de ganado donde no hubiera alambrados de púas ni árboles o paredes ásperas (contra los que las vacas y caballos suelen rascarse
, deteriorando su piel).
Hecha esta aclaración y aparte del “patatús” que puedo provocar a Neurona
(Mr. Jones dixit) con esta explicación y con las palabras que siguen (no es mi propósito atentar contra la integridad física ni espiritual del citado preclaro forero) creo que tanto Rolex como Rolls Royce están (si se me permite una palabra muy dura) “degenerando”
lentamente en su evolución darwinista.
Los nuevos Rolls Royce están perdiendo el tradicional espíritu de la marca para acomodarse a la moda imperante en el diseño de vehículos (me refiero exclusivamente a su aspecto exterior, ya que no estoy en condiciones de juzgar su mecánica o sus motorizaciones).
De la misma manera opino que Rolex hace lo propio con las nuevas hornadas de diseños en los que, por ejemplo, sus delicadas asas del pasado se han convertido casi en “hombreras” bastante desagradables.
Al igual que los nuevos armis macizos (supuestamente imprescindibles para asegurar una más larga sobre-vida), que han degenerado (perdón por la crudeza de la palabra) en armatostes más pesados y probablemente innecesarios, además de menos estéticos (EMMO).
De la misma manera, aunque el cristal de zafiro sea “inrayable” es, indudablemente, más frágil (frente a un bruto golpe) que el antiguo plexi que soportaba cualquier cosa.
De tal manera, si en una hipotética ascensión al Éverest
(y en una caída) golpeo de plano un Rolex moderno (con zafiro) contra una piedra, lo más probable es que el descenso del pico más alto del mundo tenga que hacerlo con el Rolex en la mochila
, cosa virtualmente imposible de suceder con un Rolex antiguo con plexi que (aunque lastimada su superficie por la piedra y con la lupita ilegible si era un Date con “cyclops”) volvería de la aventura en mi muñeca y los más campante
.
Aclaro que lo de golpear mi Rolex contra una piedra en el Éverest es algo que ya no me podrá suceder por mi edad
, pero hace muchos años y en alguna excursión de pesca, más de una vez me resbalé en las piedras con moho de un río con truchas y al tratar de amortiguar la caída, manoteando en el aire, rayé el plexi de mi Submariner.
Sin embargo, luego, en las noches y frente al fuego, con la pasta dentífrica y una punta de mi pañuelo volvía a poner legible el dial del reloj sin necesidad de llevarlo al SAT.
Es decir que
“la evolución” no necesariamente conlleva una "superación", ya que una de las mejores características (EMMO) de los viejos relojes Rolex (los de batalla, por supuesto) era que
“no te dejaban nunca en la estacada”, (y, si alguna vez lo hacían, era en las contadísimas excepciones que confirmaban la regla).
En cambio, con los modernos y evolucionados Rolex, sí se corre un riesgo mayor de que
“te dejen en la estacada”.
Hecha toda esta aclaración referente a las dos marcas que empiezan con “R”, diré que mis razones técnicas para comprar un Rolex son:
1) No te dejan nunca en la estacada. (bueh… casi nunca)
2) Soportan un maltrato que difícilmente soportaría la mayoría de los relojes.
3) Su diseño, en el caso del Submariner viejo, es (a partir de ¿1959? y hasta ¿1979?) un compendio de aciertos que le dan una solidez incomparable.
4) Aún perdiendo su precisión, siguen funcionando con una desviación aceptable (como el mío) después de 30 años de maltrato y pese a que por la última crisis económica de la Argentina, no pude llevarlo a un SAT por un período de más de 10 años.
5) Cuando la lubricación del sistema de carga automática envejece, va advirtiendo al propietario de esa anormalidad, porque disminuye gradualmente su reserva de marcha, lo que es la manera en que el "puricito"
pide a gritos que lo lleven al SAT.
6) Cuando el rotor de carga automática deja de cargar la “cuerda” de manera definitiva (por tener el muelle real la lubricación envejecida), su función principal (dar la hora) sigue funcionando bien si se le da carga de forma manual (cosa, por cierto, no recomendable en un reloj con una estanqueidad dudosa después de 10 años sin controles, si se lo quiere seguir "mojando").
Así, al poco tiempo de estar dándole carga de forma manual y “ablandando” de tal manera la lubricación del muelle real, el “selwinding” vuelve a funcionar normalmente.
Comenté esto a la gente del SAT Rolex en Buenos Aires, y me dijeron que, por las crisis que había vivido la Argentina, muchos poseedores de Rolex no habían llevado su reloj a una revisión periódica y que muchos habían “descubierto” lo mismo que yo. Es decir que el resto del reloj seguía funcionando aceptablemente bien, pese al involuntariamente inevitable descuido.
7) Como diría un conocido forero
“Es un cacho jierro”
Un saludo
Jorge Aldao