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Creo que no se puede comparar el oro ( por ejemplo comprar lingotes ) en los relojes por muy buenos que estos sean.Muchos Daytona , Aquanut o Nautilus terminan almacenados en cajas fuertes. Tengo un buen amigo que invierte así parte de sus beneficios. Es como comprar oro.
No lo comparto. Pero lo respeto.
La parte buena para todos los demás, es que si quieres comprar un reloj a esa persona, siempre será reloj impoluto.
Saludos.
Enviado desde mi SM-G975F mediante Tapatalk
Muchos Daytona , Aquanut o Nautilus terminan almacenados en cajas fuertes. Tengo un buen amigo que invierte así parte de sus beneficios. Es como comprar oro.
Supongo que eso será para el que los colecciona en el sentido que pueda tener una colección de billetes, monedas, sellos. En este sentido el buen estado de la pieza aumenta su valor.
Entonces tiene lógica comprar un reloj y no usarlo. Incluso creo haber visto alguno envasado al vacío.
Coleccionar relojes, o cualquier cosa y darles uso va en contra del coleccionismo entendido como tal.
Un saludo.
Y mira de que les sirve.Los hay que hacen lo mismo con el dinero...
O por droga.A mí me parece perfecto que guardes un reloj con mimo para que al día siguente de que la palmes tu hijo lo cambie por una moto.
sé feliz a tu manera.
Estoy totalmente de acuerdo en que cada uno con su vida hace lo que le da la gana, y que lo mejor es vivir y dejar vivir.Yo, personalmente, los uso todos. Eso si, controlo el número de los relojes que tengo para no agobiarme. Me refiero que si no los uso me siento mal.
Ahora bien, conocí hace unos años un forero que compraba Rolex y demás relojes del mismo calado (o más), y los tenia guardados en su caja fuerte. Le gustaba pasearse por casa con el reloj y luego volverlo a guardar. La verdad, no creo que los comprara por ningún tipo de especulación, entre otras cosas porque por su profesión y por el nivel de vida que intuí no le hacia falta. Se ganaba bien la vida con su trabajo.
Con esto quiero decir que a veces la gente tiene unos fetichismos que para el resto son incomprensibles, pero ahí están y cada uno disfruta esto como quiere o puede.
Los enamorados de los relojes queremos usarlos, vivirlos, respirarlos, tocarlos, darles cuerda y cambiarles los pantalones tantas veces como nos apetezca.
Yo soy un enamorado de los relojes.