U
uripm
Habitual
Sin verificar
En general, tu planteamiento con el armys es el que me ocurre a mi con los relojes. Después de meditarlo he llegado a la siguiente conclusión:
El vendedor es libre de poner el precio que quiera ( sea justo o no) y yo soy quien decido cual es mi zona de confort. Defino zona de confort aquella donde yo me siento cómodo pagando el precio por la satisfacción que me pueda reportar la compra en sí. Entran muchos temas en juego en mi caso, el esfuerzo en conseguir el dinero, el valorar si esa pasta puede ir a algo que sea más necesario a mi familia que a mi, ...
El vendedor es libre de poner el precio que quiera ( sea justo o no) y yo soy quien decido cual es mi zona de confort. Defino zona de confort aquella donde yo me siento cómodo pagando el precio por la satisfacción que me pueda reportar la compra en sí. Entran muchos temas en juego en mi caso, el esfuerzo en conseguir el dinero, el valorar si esa pasta puede ir a algo que sea más necesario a mi familia que a mi, ...