Hace muuuuchos años, 40 más o menos, un compañero de facultad usaba un Speedmaster. Yo tenía un Constellation en aquella época, aunque siempre quise usar un cronógrafo pero por una u otra razón, no lo compraba. Al preguntarle qué tal le iba el reloj, le puso medio verde en cuanto a su precisión de marcha. Expresé mi sorpresa animándole a llevarlo yo al SAT para que lo ajustaran. Me dijo que ya lo había hecho y que no había forma de mejorar su funcionamiento. Le pedí que me lo dejara y se lo gestionaría personalmente: de paso disfrutaría usándolo unos días.
Tras una semana comprobé que efectivamente marchaba bastante peor que mi Constellation. Lo llevé al SAT donde yo era cliente conocido, Omesita creo recordar, en Princesa junto a Plaza de España. Cuando pasó la revisión y ajuste, el reloj siguió marchando igual que siempre. Se lo devolví a mi amigo y su comentario amargo fue "Tenía que haberme comprado un Daytona, pero era más caro". Fue la primera vez que oí mencionar a Rolex como marca con mejores y más caros relojes que Omega. Los precios, según modelos, podían llegar a ser el doble o triple de caros en Rolex que en Omega.
Debo mencionar que he tenido varios Omegas, con suerte diversa: desde impecable funcionamiento y marcha, hasta devolverlos al CO por problemas inauditos e irme a otra marca. He devuelto hasta una pieza de colección (Apolo 11 de la serie Speedmaster Missions, uno de 150 piezas, por no poder ser corregido: se detenía el movimiento del reloj al lanzar el cronómetro y sucedía una de cada tres, cuanto o cinco veces que se lanzaba el cronómetro. Cuatro veces fue al SAT, y no se consiguió solucionar. Tan triste como cierto. Otro caso: un Speedmaster HB-SIA, de los primeros en venderse en Madrid, retraso del tiempo cronometrado: si lanzabas el cronógrafo, por ejemplo, a las 12 en punto del mediodía y comprobabas, por ejemplo, a las 23:30 qué marcaban los indicadores del cronógrafo (deberían marcar 11h y 30 minutos) te encontrabas con que indicaban que habían transcurrido solo un desfase de dos horas y pocos minutos. Lo nunca visto. Tras comentarlo al CO y éste comprobar asombrado lo que sucedía, me lo cambiaron por otro. A este nuevo le pasaba que al tratar de sacar la corona un clic o dos, o bien no salía por poca fuerza o bien salía del todo, deteniendo el movimiento del reloj por exceso de fuerza. Imposible moverlo una o dos posiciones solo. Devuelto al CO directamente y a por otro modelo de otra marca.
Con algún que otro Rolex, problemas o cero o cercanos a cero (en 30 años un par de leves incidencias en su SAT, solucionadas perfectamente tras volver a llevarlo en ambos casos)
Así han ido pasando los años. Pero la posición entre ambas marcas ha ido cambiando.
- Se ha movido Omega: precios subidos, no uno sino varios niveles; resultados en muñeca impredecibles (puede que perfecto, puede que pequeños defectos, puede que defectos inasumibles); SAT impredecible (puede que bien a la primera, puede que a la segunda, puede que a la tercera). Eso sí, técnicamente incorporan de todo. Pero eso es inútil si los resultados en cuanto a funcionamiento son tan dispares como impredecibles.
- Rolex por su parte sigue igual: tan caro como siempre (con algunos Omegas ya cercanos en precio, insisto); calidad y fiabilidad extremas; SAT cuasi impecable.
En pocas palabras: si no te la quieres jugar con tu nuevo reloj y no te gustan las sorpresas desagradables, toma nota.
Saludos cordiales