A
Azhyel
Novat@
Sin verificar
Tenia yo unos 10 años, cuando mi abuelo solo de bueno que siempre fue conmigo, me regalo antes de tiempo su reloj de bolsillo, uno que segun el compro en su juventud para darmelo cuando cumpliese yo 18 años y la mayoria de edad.
Paso que cada vez que el abria su ropero, siempre me interesaban dos cosas, con mis 10 años me fascinaba su juego de domino de marfil, y su reloj de bolsillo.
Tanto insisti que termino dandomelo a los 10 años (como lo lamento) en vez a los 18.
Se trataba de algo misterioso para mi.
Un reloj de bolsillo dorado (habra sido de bronce, ya que oro no era y nunca perdio en dorado) el cuadrante era de nacar brillante, cortado en forma horizontal a las 6 permitiendo ver el movimiento del volante. Mostraba hora minutos y segundos (estos en una peña esfera).
( ocho dias de cuerda tenia)
Dentro de mi inocencia y curiosidad decidi desarmarlo, al liberar el engrane con la cuerda todo salto y no logre volverlo a armar.
Decidi guardar en una caja todas las piezas, pensando solo con 10 años que algun dia, de mayor, tendria el conocimiento para volver a armarlo.
Pasaron los años, hoy mi abuelo ya no esta, y lamento tener que contarles que cuando a los 18 años fui a buscar la caja con las piezas sueltas para armarlo, no la encontre.
En algun momento de esos 8 años, mi padre o no se quien, creyendo que era basura simple y tristemente lo tiro.
Talvez no me crean, pero mi abuelo murio en el 98 y yo ya tengo 34 años, y no puedo evitar llorar mientras les cuento esta historia, llorar de bronca por haberlo desarmado, llorar de impotencia porque lo tiraron como basura.
Y llorar porque mi abuelo no esta.
Tal vez sea esto por lo que me atraen tanto los relojes.
No recuerdo la marca de aquel reloj, pero ojala ustedes puedan publicarme paginas web o fotos para ver si alguno es igual a aquel de mi abuelo.
Los relojes no son simples maquinas, son historias de vida, algunas alegres y otras como esta.
Gracias por permitirme contarles esta historia.
Paso que cada vez que el abria su ropero, siempre me interesaban dos cosas, con mis 10 años me fascinaba su juego de domino de marfil, y su reloj de bolsillo.
Tanto insisti que termino dandomelo a los 10 años (como lo lamento) en vez a los 18.
Se trataba de algo misterioso para mi.
Un reloj de bolsillo dorado (habra sido de bronce, ya que oro no era y nunca perdio en dorado) el cuadrante era de nacar brillante, cortado en forma horizontal a las 6 permitiendo ver el movimiento del volante. Mostraba hora minutos y segundos (estos en una peña esfera).
( ocho dias de cuerda tenia)
Dentro de mi inocencia y curiosidad decidi desarmarlo, al liberar el engrane con la cuerda todo salto y no logre volverlo a armar.
Decidi guardar en una caja todas las piezas, pensando solo con 10 años que algun dia, de mayor, tendria el conocimiento para volver a armarlo.
Pasaron los años, hoy mi abuelo ya no esta, y lamento tener que contarles que cuando a los 18 años fui a buscar la caja con las piezas sueltas para armarlo, no la encontre.
En algun momento de esos 8 años, mi padre o no se quien, creyendo que era basura simple y tristemente lo tiro.
Talvez no me crean, pero mi abuelo murio en el 98 y yo ya tengo 34 años, y no puedo evitar llorar mientras les cuento esta historia, llorar de bronca por haberlo desarmado, llorar de impotencia porque lo tiraron como basura.
Y llorar porque mi abuelo no esta.
Tal vez sea esto por lo que me atraen tanto los relojes.
No recuerdo la marca de aquel reloj, pero ojala ustedes puedan publicarme paginas web o fotos para ver si alguno es igual a aquel de mi abuelo.
Los relojes no son simples maquinas, son historias de vida, algunas alegres y otras como esta.
Gracias por permitirme contarles esta historia.