El mal trato abunda, lo que uno tiene que hacer, es poner al individuo en su lugar, mi esposa y yo (adultos contemporaneos) osea cuarentones, entramos a un distribuidor Rolex aqui en Venezuela con la intencion de colocarle un eslabon a su reloj, nos atiende una señorita en el mostrador, le explicamos lo que necesitamos, ella llama al dueño que estaba en una oficina, nada mas salir el señor por la puerta y sin intercambiar ni una sola palabra con nosotros, nos dice a todo pulmon, no prestamos servicio a relojes falsos, jajajajaja, yo quede helado, pero mi esposa ni corta ni perezosa le dijo, mire señor, si el reloj fuera falso, no lo traeriamos aqui, lo llevariamos a un Kiosko en una plaza, ¿que se ha creido? y con mucha elegancia saco su reloj original de su cartera, el lo observo por un minuto, lo llevo a una oficina y le coloco el eslabon, pero no salio mas, nos lo entrego la señorita, le preguntamos cuanto era, nos dijo que nada y nos pidio disculpas por el comentario del señor. Me imagino que no salio de la verguenza, la proxima vez podra advertirle al cliente que no prestan servico a falsificaciones, pero lo hara con mas tacto.
Saludos.