Hablo de catolicismo como raíz cultural. Me da igual si la gente va a misa o no. Se celebra la navidad y semana santa? Se asocia lo bueno y lo malo con lo coincidente con los mandamientos? Cuánta gente no está bautizada? A quién le extraña ver a una monja o cura? Pero nada, alguno se empeña en patinar cuesta arriba. Me da igual si las monjas son españolas. Sabes qué se sorprendería de ver la gente? A monjes budistas. Porque es una figura ajena a nuestra cultura.
Esas lógicas equidistantes serán cool, supertolerantes y multiculturales, pero son irreales. Y peligrosas, porque solo en estas latitudes se dan, como una especie de declive. El resto está bien seguro de lo que es y no es, y no solo eso, sino que no se avergüenza de sus orígenes. Y eso hace que seamos débiles propensos a ser colonizados culturalmente (con todo el bagaje religioso que se le incluye a TODA cultura).
Hablando claro: tú, sabiendo que es falso, puedes tratar de explicar que España, o Europa, no es cristiana. Pero tranquilo, que cualquier musulmán, aprovechará tu empanada para intentar convertirla en musulmana. Si no ya me cuentas qué bien os va adaptándolos por Francia (que, sin duda, es más laica que España, aún así, pero me parece que si le hubieran dejado menos huecos a la cultura musulmana y más a la cristiana, mejor iría).
Obcecarse en negar nuestras raíces culturales es tan peligroso como la no separación de iglesia y estado: es la desaparición, igualmente, del sentido común.