jaimes
Habitual
Sin verificar
Cuando éramos pequeños no teníamos prácticamente de nada (tengo casi 40 tacos), y cualquier cosa que nos regalaban venía acompañada por una ilusión trementa. Hoy en día hay prácticamente de todo en muchas casas (al menos hasta la crisis), y nuestros hijos crecen con tantas cosas que no aprecian nada al final. O lo aprecian durante un rato y se acabó. Es una lástima. Hay que intentar recuperar esa ilusión, ese no tener y aún así vivir y disfrutar, volver a apreciar todas las pequeñas cosas. Nuestra sociedad se ha transformado en deseo puro, y cuando conseguimos algo, como lo que nos motiva es ese deseo insano, pues miramos el reloj del de al lado o uno más caro. No nos conformamos con nada. Me da hasta mal rollo reflexionar sobre ello, porque tengo una cría de tres años y veo su futuro por ahí... en fín, gracias por este foro que me ha hecho pensar y espero que aprender.
Un saludo
Un saludo