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Qué pensáis respecto de este tema?
Asumiendo que estamos en un entorno informal, qué reglas habría que seguir? en qué tipo de situaciones estaría permitido?
A mi mdd le gusta que la lleve por fuera (la camisa), pero cuando vamos a entrar en un rte. o a casa de sus padres, en general a un lugar donde según mi parecer se exige un poco de formalidad, meto por dentro del pantalón la camisa. Es cuestión de gustos. Esta tarde tengo una charla en público, ahora llevo la camisa por fuera, seguro que a las 20:00 ya no.
Saludos.
En cuanto que salgo del trabajo mi aspecto es muy similar al de esta foto que adjunto, (fines de semana, paseos, ir a la compra, visitar relojerías y prácticamente cualquier cosa que no requiera un atuendo mas formal) cuando apriete más el color, lo mismo pero con camisa de manga corta.
Con pantalón largo, la camisa siempre por dentro.
Pues eso, alucinaoMi atuendo de diario, para ir a trabajar es vaqueros, camiseta de manga corta y por encima una camisa por fuera. Cuando empieza a hacer calor en la oficina, a media mañana, me quito la camisa y me quedo en niqui. Y trabajo en los servicios centrales de un banco, pero tal como conté en este mismo subforo la peña va hasta con chandal.....
En mi caso la camisa siempre por fuera en situaciones informales, que son las que vivo el 99% de mi vida....
Pues eso, alucinao
Trabajo en los servicios centrales de un banco, en un edificio con unas mil personas. El personal es sobre todo administrativo con lo que los empleados que pueden permitirse gastar seiscientos o mil euros en un traje son una pequeña minoría. Además no trabajamos cara al público.
El caso es que hasta hace unos diez o doce años había un código de vestimenta simple pero estricto. Todo Dios con corbata -lo siento por vosotros, pero la chaqueta nadie la lleva puesta una vez sentado a la mesa. Si uno un viernes osaba acudir con un polo, o un cuello vuelto se ganaba una bronca.
Pero todo cambió. Nuestro banco comenzó a despuntar como "el banco de internet", dinámico, joven e innovador. Nuestros ejecutivos comenzaron a confraternizar con la gente de Patagon , Yahoo... y se les pegó su dinámica y joven informalidad. Consejeros y directores generales comenzaron a aparecer en día laborable vestidos de Dockers y camisas de cuadros , con cuello abotonado,claro- y el personal a imitarles. Una cosa lleva a otra....convocatorias a reuniones en las que se aconseja ropa informal,etc....y se desató el apocalipsis.
El problema está en que quien más ,quien menos, por poco gusto y/o presupuesto que tenga se pone una camisa,corbata y pantalón de vestir y queda apañao, más si lleva toda la vida haciéndolo junto a otros mil tíos, pero cuando te dan rienda suelta para vestir como quieras.......hay cada espanto
Particularmente llevo más de diez años sin ponerme un traje aunque procuro vestir con una cierta decencia, pero os aseguro que el tema hace años se nos fué de las manos -compañeros con camisetas de equipos de fútbol, chandal, piratas y chanclas....
Pues eso, para que veáis cómo vestimos en el trabajo algunos bancarios ,que no todo lo que cuentan las revistas es cierto
El chandal ... ni para hacer deporte.. Y trabajo en los servicios centrales de un banco, pero tal como conté en este mismo subforo la peña va hasta con chandal.....
¿Camisa de manga corta?
¿Bermudas?
De verdad, no os entiendo.
La camisa, al igual que el pantalón, es lo que viste al hombre, lo dignifica, lo hace varonil, lo que le diferencia del niño .
Recuerdo con cierto desgarro mi niñez y aquellas tardes estivales en las que mi madre me vestía con esos pantalones cortos y camisa de m/c para salir a la calle. Nunca pude entender el porqué de aquél empeño maternal de que su retoño mostrase al mundo las tres cuartas partes de su inmaculado cuerpo al desnudo.
Recuerdo con añoranza las tardes de septiembre en las que me regocijaba cuando una tormentilla refrescaba el ambiente y ya, más avanzado el mes, se iban acortando los días y en los que yo aprovechaba para, insistentemente, reclamar otro atuendo mucho más acorde y pudoroso que el indecoroso y mutilado pantalón.
Conforme fui asesando me fui reafirmando en mis convicciones y hoy, en mis mediados cuarenta, sigo pasando por el calvario de ver cómo mis congéneres, a nada que asoma el estío, se empeñan en mostrar pies, piernas, brazos, codos, durezas, callos, con total impunidad.
O tempora, o mores!