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memomes
Novat@
Sin verificar
Saludos, mi nombre es Guillermo y he estado en el foro desde hace unos años, pero mi participación ha sido prácticamente nula.
He aprendido muchas cosas con ustedes, he disfrutado viendo algunas de las piezas que suben y quería comentarles una situación personal sobre como he vivido y vivo actualmente mi gusto por los relojes, quizá algunos se identifiquen conmigo o bien pueden decir que soy muy tarugo, en fin ahí les voy.
Desde pequeño me gustan los relojes, vamos, tuve uno que otro casio típico para niño de la década de los 80, como el de calculadora y otro por ahí que era de carreras, con un par de botones, eso derivó de que mi padre tenía algunas piezas verdaderamente buenas, sin embargo por cuestiones financieras tuvo que deshacerse de la mayoría, al final dejó en un cajón un trío de relojes "sencillos" que eventualmente uso, un Omega, un Baume & Mercier y un Tissot.
En mis años de adolescencia no era mucho mi gusto por la relojería, tuve un Swatch que me robó una empleada doméstica y de cuando en cuando usaba mis viejos casio. Entre los 20 y los 30, prácticamente tampoco le puse mucha atención, casi toda la década usé un Citizen Eco-Drive con calendario perpetuo que me regalé un día que lo vi de oferta, debo decir que es un reloj maravilloso porque después de estar cerca de 4 años en un cajón, lo saqué al sol un par de minutos y empezó a funcionar.
Hasta los 35 tampoco me interesaba mucho esta cuestión de la relojería, pero, fue ahí cuando me regalé un Tag Carrera 5 en acero, lo vi en el aparador, consulté con mi cartera y me dije, "regálatelo, cumples 35". Lo empecé a usar sólo en fechas especiales, hasta que se convirtió en un reloj de diario, mi cartera aún no se imaginaba los embates que se venían.
Comencé a hacerme de algunos relojes de manera eventual, marcas de boutique como CK, Gucci, Fossil, Boss, nada extravagante.
En junio de este año cumplí 40 y decidí regalarme un grande, un Submariner que vi en el aparador de un distribuidor, apreté un poco aquí y allá para completarme y no puedo describir como me gusta ese reloj, es decir, aún no tengo 2 meses con él y mi muñeca está enamorada.
El problema es que ahora sólo pienso en la próxima pieza, cuando tengo tiempo me doy una sumergida en chrono24 y veo precios, ando haciéndome ilusiones con piezas que francamente para mi y mi cartera son muy difíciles de alcanzar como un Calatrava, un Royal Oak, o un Louis Cartier, ya hasta mi novia se hizo de las enojadas conmigo en una ocasión por andar viendo y viendo piezas a la venta.
En fin quería compartir con ustedes esto, no sé si hay alguien por ahí con un problema similar al mío o son más prudentes, les mando un saludo.
He aprendido muchas cosas con ustedes, he disfrutado viendo algunas de las piezas que suben y quería comentarles una situación personal sobre como he vivido y vivo actualmente mi gusto por los relojes, quizá algunos se identifiquen conmigo o bien pueden decir que soy muy tarugo, en fin ahí les voy.
Desde pequeño me gustan los relojes, vamos, tuve uno que otro casio típico para niño de la década de los 80, como el de calculadora y otro por ahí que era de carreras, con un par de botones, eso derivó de que mi padre tenía algunas piezas verdaderamente buenas, sin embargo por cuestiones financieras tuvo que deshacerse de la mayoría, al final dejó en un cajón un trío de relojes "sencillos" que eventualmente uso, un Omega, un Baume & Mercier y un Tissot.
En mis años de adolescencia no era mucho mi gusto por la relojería, tuve un Swatch que me robó una empleada doméstica y de cuando en cuando usaba mis viejos casio. Entre los 20 y los 30, prácticamente tampoco le puse mucha atención, casi toda la década usé un Citizen Eco-Drive con calendario perpetuo que me regalé un día que lo vi de oferta, debo decir que es un reloj maravilloso porque después de estar cerca de 4 años en un cajón, lo saqué al sol un par de minutos y empezó a funcionar.
Hasta los 35 tampoco me interesaba mucho esta cuestión de la relojería, pero, fue ahí cuando me regalé un Tag Carrera 5 en acero, lo vi en el aparador, consulté con mi cartera y me dije, "regálatelo, cumples 35". Lo empecé a usar sólo en fechas especiales, hasta que se convirtió en un reloj de diario, mi cartera aún no se imaginaba los embates que se venían.
Comencé a hacerme de algunos relojes de manera eventual, marcas de boutique como CK, Gucci, Fossil, Boss, nada extravagante.
En junio de este año cumplí 40 y decidí regalarme un grande, un Submariner que vi en el aparador de un distribuidor, apreté un poco aquí y allá para completarme y no puedo describir como me gusta ese reloj, es decir, aún no tengo 2 meses con él y mi muñeca está enamorada.
El problema es que ahora sólo pienso en la próxima pieza, cuando tengo tiempo me doy una sumergida en chrono24 y veo precios, ando haciéndome ilusiones con piezas que francamente para mi y mi cartera son muy difíciles de alcanzar como un Calatrava, un Royal Oak, o un Louis Cartier, ya hasta mi novia se hizo de las enojadas conmigo en una ocasión por andar viendo y viendo piezas a la venta.
En fin quería compartir con ustedes esto, no sé si hay alguien por ahí con un problema similar al mío o son más prudentes, les mando un saludo.