alano
Habitual
Sin verificar
Hace ya un tiempo que disfruto en mi muñeca de este fantástico reloj, si bien no he tenido tiempo de daros mis impresiones y realizar unas fotos hasta ahora, liado como estoy mirando coches.
Antes de adquirirlo me informé sobre el modelo en cuestión leyendo aquí en el foro y tengo que decir que no me he encontrado (al menos por el momento) los problemas que se le achacan, esto es que el bisel se mueve al parecer, y que yo no he apreciado salvo que haya que darle fuertes golpes (que en caso de ser así nos preocuparía menos que se mueva el bisel como que se pueda dañar el movimiento) o que la correa es mala y se desgasta y descose, algo que me extrañaba en Longines que siempre los he visto dotados de buenas correas y este no es una excepción, se trata de una correa moderna pero a la vez con cierto aire vintage, típicamente náutica y que sugiere enseguida darse un chapuzón, excelentemente realizada con un reverso en símil terciopelo precioso y enormemente cómodo, fácil de limpiar y dotada de un bellísimo cierre de ardillón más trabajado de lo habitual, y eso que suelo preferir siempre los desplegables tipo mariposa.
Tampoco he visto que los índices del bisel giratorio no coincidan con los de la esfera, la esfera está muy bien resuelta, es unicamente un problema de las fotos que sufren de las distorsiones que introduce la presencia del grueso cristal.
Como no es mi intención realizar una review sobre el modelo en cuestión (para eso ya está la excelente y con preciosas fotografías de nuestro compañero Javier Franco), sino simplemente compartir con vosotros mi opinión sobre lo positivo y negativo de este reloj, no voy a entrar en la historia del modelo u otros factores, baste decir que creo que Longines ha hecho un trabajo sensacional en esta reedición mejorando únicamente lo que había que mejorar como es la utilización de cristal de zafiro, respetando la esfera original incluso con una pintura de índices similar al ser en tonos carne y aplicando únicamente la superluminova para la visión nocturna en índices y agujas
En las fotos observareis la belleza de la caja en acero pulido de 42mm (igual que el original, ya que los supercompresores se fabricaban en tamaños de 36 o 42mm) que destaca por la anchura de sus garras (usa correas de 22mm) y por las dos enormes coronas que son el símbolo distintivo de este reloj, máxime en la actualidad donde en los 80, 90 y también en lo mucho que llevamos de la década de 2000 ha imperado demasiado el bisel giratorio dentado tipo Rolex Sub, y ahora Longines cuenta con un modelo como los muy habituales en los 60 “viejos supercompresores”, un modelo que hoy en cierta medida es exótico pues junto con el Aquatimer, Polaris o algunos Sawc, pocos más ejemplos encontraremos. Son unas coronas preciosas con relieve cuadriculado más bonito que los habituales logos de marca, generosas y fáciles de usar, la inferior para dar cuerda (muy buena sensación me da este 2824 frente a otros que he probado) y parar el movimiento y ajustar la hora, la superior para mover el bisel (con la ventaja de hacerlo en ambas direcciones ya que al ser a rosca y ser el bisel interior no existe la posibilidad de moverlo accidentalmente o con un golpe).
El fondo es también muy bello con la figura de un submarinista armado con un arpón (nuevamente como en el original), aunque para mi gusto debería ser un poco más plano, ya que sobresale bastante, efecto que se acusa más dado que la tapa no llega a los bordes de la caja como en otros relojes, pero que no molesta en la muñeca en absoluto pues la garras de la caja son bastante inclinadas.
Ya he comentado que la esfera me gusta, no se puede decir que sea limpia pues cuenta con muchos índices pero al menos la literatura habitual está muy reducida (la marca arriba y abajo una referencia a que es un reloj automático, de nuevo igual que en el original de los 60), además en el modelo sin fecha es aun más sencilla, y aquí de nuevo alabo a Longines porque ha mantenido 2 líneas de producción de este reloj: el de los “puristas” sin fecha y el más práctico con el día del mes, los 2 me parecen muy bonitos y únicamente el mantenerse más fiel al original podría justificar comprarlo sin fecha pues como digo estéticamente están ambos bien resueltos.
Hasta ahora os he comentado lo positivo, ahora toca hablar de los aspectos que menos me han gustado del reloj, que también los tiene como todo, si bien creo que son poco importantes.
El primero es el embalaje en una caja que aunque de gran calidad, es excesivamente grande, exagerada, y el que incluya un libro conmemorativo con los modelos que han hecho historia en la marca ( por algo los mismos que están reeditando) no es justificación para semejante paquete, muy al contrario hubiera sido mejor y serviría igualmente para enfatizar el carácter especial que tiene este reloj para Longines si hubieran hecho la caja más pequeña pero contando en su interior con una segunda correa (de caucho, piel o lo que sea) mejor aun un brazalete de acero tipo milanesa y una herramienta para el cambio, el libro bien podría entregarse separado del embalaje en el punto de venta o sencillamente solicitarlo por email a Longines como ocurre con los catálogos, pues en el fondo tiene más de catálogo que de libro en si. Os dejo una foto para que podais comparar con la caja del Omega Seamaster 300M de siempre.
El segundo aspecto negativo es el precio, como no jejeje, quizá estoy influido por la excelente relación calidad precio de los modelos Hydroconquest, (incluso también la de los cronógrafos de la serie Grande Vitesse o como se escriba ), pero más de 1400 euros para este reloj me parece caro, el precio y el embalaje (además de tratarse de una reedición) tratan de marcar el carácter especial del reloj, pero como digo al no incluir un set especial con correas, etc, al tratarse del mismo calibre 2824 del resto de la gama Longines (salvo los equipados con 2892), caja en acero 316 sin pavonado sin metales nobles, etc, ….y montar en lugar de un brazalete de acero una correa que ni siquiera es de cocodrilo, lo hacen en mi opinión un modelo caro, y cuyo precio hace plantearse el comprar un Hydroconquest cronógrafo automático con el excelente calibre 7750 o pasar a un nivel superior, también en precios pero no mucho, como puede ser un Breitling Colt que con correa de caucho se queda por los 1800, para gustos….. . Cierto es que a cambio Longines ofrece una reproducción muy fiel al modelo original respetando gran parte de sus elementos distintivos (creo que solo las coronas son ligeramente diferentes, aparte del efecto diferente del zafiro o la superluminova), salvo el calibre 290, ya sería pedir mucho jeje.
Pues nada, resumiendo el rollo, que es un reloj recomendado.
Además de recomendaros la review del modelo hecha por Javier os dejo unos links del modelo original:
https://www.watchprosite.com/?page=wf.forumpost&q=&fi=&ti=444771&pi=
https://www.mwrforum.net/forums/showthread.php?t=14000
Y si estais interesados en los supercompresores os recomiendo (aunque seguro que ya lo conoceis) este magnífico post del maestro Vegaban:
https://www.hablemosderelojes.com/?bb=1
Antes de adquirirlo me informé sobre el modelo en cuestión leyendo aquí en el foro y tengo que decir que no me he encontrado (al menos por el momento) los problemas que se le achacan, esto es que el bisel se mueve al parecer, y que yo no he apreciado salvo que haya que darle fuertes golpes (que en caso de ser así nos preocuparía menos que se mueva el bisel como que se pueda dañar el movimiento) o que la correa es mala y se desgasta y descose, algo que me extrañaba en Longines que siempre los he visto dotados de buenas correas y este no es una excepción, se trata de una correa moderna pero a la vez con cierto aire vintage, típicamente náutica y que sugiere enseguida darse un chapuzón, excelentemente realizada con un reverso en símil terciopelo precioso y enormemente cómodo, fácil de limpiar y dotada de un bellísimo cierre de ardillón más trabajado de lo habitual, y eso que suelo preferir siempre los desplegables tipo mariposa.
Tampoco he visto que los índices del bisel giratorio no coincidan con los de la esfera, la esfera está muy bien resuelta, es unicamente un problema de las fotos que sufren de las distorsiones que introduce la presencia del grueso cristal.
Como no es mi intención realizar una review sobre el modelo en cuestión (para eso ya está la excelente y con preciosas fotografías de nuestro compañero Javier Franco), sino simplemente compartir con vosotros mi opinión sobre lo positivo y negativo de este reloj, no voy a entrar en la historia del modelo u otros factores, baste decir que creo que Longines ha hecho un trabajo sensacional en esta reedición mejorando únicamente lo que había que mejorar como es la utilización de cristal de zafiro, respetando la esfera original incluso con una pintura de índices similar al ser en tonos carne y aplicando únicamente la superluminova para la visión nocturna en índices y agujas
En las fotos observareis la belleza de la caja en acero pulido de 42mm (igual que el original, ya que los supercompresores se fabricaban en tamaños de 36 o 42mm) que destaca por la anchura de sus garras (usa correas de 22mm) y por las dos enormes coronas que son el símbolo distintivo de este reloj, máxime en la actualidad donde en los 80, 90 y también en lo mucho que llevamos de la década de 2000 ha imperado demasiado el bisel giratorio dentado tipo Rolex Sub, y ahora Longines cuenta con un modelo como los muy habituales en los 60 “viejos supercompresores”, un modelo que hoy en cierta medida es exótico pues junto con el Aquatimer, Polaris o algunos Sawc, pocos más ejemplos encontraremos. Son unas coronas preciosas con relieve cuadriculado más bonito que los habituales logos de marca, generosas y fáciles de usar, la inferior para dar cuerda (muy buena sensación me da este 2824 frente a otros que he probado) y parar el movimiento y ajustar la hora, la superior para mover el bisel (con la ventaja de hacerlo en ambas direcciones ya que al ser a rosca y ser el bisel interior no existe la posibilidad de moverlo accidentalmente o con un golpe).
El fondo es también muy bello con la figura de un submarinista armado con un arpón (nuevamente como en el original), aunque para mi gusto debería ser un poco más plano, ya que sobresale bastante, efecto que se acusa más dado que la tapa no llega a los bordes de la caja como en otros relojes, pero que no molesta en la muñeca en absoluto pues la garras de la caja son bastante inclinadas.
Ya he comentado que la esfera me gusta, no se puede decir que sea limpia pues cuenta con muchos índices pero al menos la literatura habitual está muy reducida (la marca arriba y abajo una referencia a que es un reloj automático, de nuevo igual que en el original de los 60), además en el modelo sin fecha es aun más sencilla, y aquí de nuevo alabo a Longines porque ha mantenido 2 líneas de producción de este reloj: el de los “puristas” sin fecha y el más práctico con el día del mes, los 2 me parecen muy bonitos y únicamente el mantenerse más fiel al original podría justificar comprarlo sin fecha pues como digo estéticamente están ambos bien resueltos.
Hasta ahora os he comentado lo positivo, ahora toca hablar de los aspectos que menos me han gustado del reloj, que también los tiene como todo, si bien creo que son poco importantes.
El primero es el embalaje en una caja que aunque de gran calidad, es excesivamente grande, exagerada, y el que incluya un libro conmemorativo con los modelos que han hecho historia en la marca ( por algo los mismos que están reeditando) no es justificación para semejante paquete, muy al contrario hubiera sido mejor y serviría igualmente para enfatizar el carácter especial que tiene este reloj para Longines si hubieran hecho la caja más pequeña pero contando en su interior con una segunda correa (de caucho, piel o lo que sea) mejor aun un brazalete de acero tipo milanesa y una herramienta para el cambio, el libro bien podría entregarse separado del embalaje en el punto de venta o sencillamente solicitarlo por email a Longines como ocurre con los catálogos, pues en el fondo tiene más de catálogo que de libro en si. Os dejo una foto para que podais comparar con la caja del Omega Seamaster 300M de siempre.
El segundo aspecto negativo es el precio, como no jejeje, quizá estoy influido por la excelente relación calidad precio de los modelos Hydroconquest, (incluso también la de los cronógrafos de la serie Grande Vitesse o como se escriba ), pero más de 1400 euros para este reloj me parece caro, el precio y el embalaje (además de tratarse de una reedición) tratan de marcar el carácter especial del reloj, pero como digo al no incluir un set especial con correas, etc, al tratarse del mismo calibre 2824 del resto de la gama Longines (salvo los equipados con 2892), caja en acero 316 sin pavonado sin metales nobles, etc, ….y montar en lugar de un brazalete de acero una correa que ni siquiera es de cocodrilo, lo hacen en mi opinión un modelo caro, y cuyo precio hace plantearse el comprar un Hydroconquest cronógrafo automático con el excelente calibre 7750 o pasar a un nivel superior, también en precios pero no mucho, como puede ser un Breitling Colt que con correa de caucho se queda por los 1800, para gustos….. . Cierto es que a cambio Longines ofrece una reproducción muy fiel al modelo original respetando gran parte de sus elementos distintivos (creo que solo las coronas son ligeramente diferentes, aparte del efecto diferente del zafiro o la superluminova), salvo el calibre 290, ya sería pedir mucho jeje.
Pues nada, resumiendo el rollo, que es un reloj recomendado.
Además de recomendaros la review del modelo hecha por Javier os dejo unos links del modelo original:
https://www.watchprosite.com/?page=wf.forumpost&q=&fi=&ti=444771&pi=
https://www.mwrforum.net/forums/showthread.php?t=14000
Y si estais interesados en los supercompresores os recomiendo (aunque seguro que ya lo conoceis) este magnífico post del maestro Vegaban:
https://www.hablemosderelojes.com/?bb=1