Santi, he leido en el post en el que Ovoci os comunicó la fatal noticia a
tod@s, que quedasteis una vez los 3. Así que le conociste.... Fabuloso verdad?. Cuentame algo de esa quedada si no es molestia.. y si no es indiscrección claro..
Gracias de nuevo por tus palabras.
Saludos.
Hace ya algún tiempo puse a la venta un reloj de tipo OPS ( Fuerzas Especiales) y tu tío se intereso vivamente por el.
Quedamos en una conocida calle de Madrid y aprovechamos el tiempo entrando en la boutique de Omega ya que tu tío Jose Maria estaba buscando un reloj muy especial y dificil de encontrar, tardaron bastante en atendernos, pero para tres personas que viven la pasión de los relojes, es materialmente imposible que se aburran en una boutique de Omega.
Nos sentamos en unos agradable butacones y estuvimos un rato charlando un poco de todo y un mucho de nada, pero la personalidad de tu tío era realmente magnética.
Era un curiosa mezcla de dulzura, sensibilidad, dolor físico contenido y la mirada de quien ha visto mas cosas que el resto de los mortales.
Después de confirmar el encargo del Omega, Javier (Ovoci) nos llevo a la Plaza de Mariano de Cavia y en una terraza estuvimos tomando unas cervezas y charlando de la vida.
Tu tío siempre atento, sagaz y muy rápido captando las ideas me llamó poderosamente la atención, solo me preocupaba ese sustrato de tristeza que el ocultaba con gran meticulosidad, pero que para mi nivel de empatia era tan evidente como el miedo al olfato de un cánido.
No podía ubicar la razón de esa zona oscura, pero el tiempo me ha demostrado que lo que el presentía era su muerte.
Perdona que sea tan directo, pero el sabia que eso iba a suceder y lo aceptaba con un estoicismo espartano, sin inmutarse lo mas mínimo.
Era ciertamente un hombre valeroso que no conformista, había energía en su voz y brillo en su mirada, mucha, muchísima energía y una gran bondad.
Desgraciadamente tuve que irme y deje a Javier y a Jose Maria en la terraza para que siguiesen charlando de sus cosas.
Tengo la certeza que la esencia de Jose Maria no solo perdura en nosotros, sino en el mas allá, lo que yo afectuosamente siempre llamo “la otra zona”, estoy seguro que ahora mismo es feliz y por fin su alma esta liberada del dolor físico.
Un beso y disculpa el ladrillo.
PD: Una cita de Lord Byron "Luchar contra nuestro destino sería un combate como el del manojo de espigas que quisiera resistirse a la hoz."