¿Cuál es la causa de la parte subrayada en negrita? Nos encontramos que no solo la información es de fácil acceso... sino que los propios vendedores no tienen ni idea de lo que venden. Antiguamente la palabra del vendedor era poco menos que sagrada... de todas todas no tenías forma de comprobar si tenía o no tenía razón sin perder una cantidad insufrible de tiempo. Ahora basta una búsqueda muy rápida en internet para ver de qué palo va. Si es que la cosa ha llegado hasta el absurdo de que mi padre, a sus casi 60 años, prefiere comprar los electrodomésticos por internet que acercarse a la tienda de la equina. ¿Por qué? "Para que me traten como a un gilipollas y encima tengan 2 modelos a elegir y ningunas ganas de vender, lo compro por internet... que encima me ahorro dinero".
Porque esa es la realidad. El comercio tradicional está muriendo... pero la causa no es internet, sino la poca profesionalidad de los comerciantes. Yo estoy dispuesto a pagar un poco más por comprárselo al tendero de la esquina. Pero puesto que pago más... me tienen que dar un servicio mejor del que obtengo por internet.
Respecto a la parte no subrayada... estoy de acuerdo. El comercio tradicional debe entender dónde reside su ventaja competitiva y esforzarse para que el cliente lo note y lo entienda. Un servicio excelente hace que los clientes vuelvan. Y da igual el precio que tengas. Claro que si eres caro y encima de carácter agrio como un limón... la culpa es de internet. Ya, claro.
Aquí no estoy nada de acuerdo.
La reputación es muchísimo más importante en la red que en el comercio tradicional. Por la velocidad con la que la información se transmite. Si la joyería XYZ de la ciudad W te trata como a un perro, ¿sobre cuánta gente podrás influir para que dejen de ir? Un grupo muy reducido. Sobre todo si, como suele ocurrir, esa joyería es la única que tienes a mano. En cambio, ¿qué es lo que ocurre si un mercante de este foro mete la pata una o dos veces? Todo el foro lo sabría en cuestión de días. Las pérdidas serían muy grandes, y el daño muy costoso (en tiempo) de reparar.
Precisamente porque por internet no hay trato humano... somos menos tolerantes con las excusas y los cuentos chinos.
Hola:
Muchas gracias por sus opiniones, las cuales me permiten aclarar algunos aspectos quizá poco nítidos.
Cuando me refiero a poder recurrir a un profesional que sabe lo que vende, me refiero justo a eso. No me valen como ejemplos los abundantes casos de personas contratadas por tiempo limitadísimo para vender tal o cual clase de productos en una tienda cualquiera, normalmente, perteneciente a una cadena o similar. Un pobre muchacho que ahora intenta vender electrodomésticos como usted menciona, y que antes quizá preparaba pizzas o iba de puerta en puerta intentando cambiar al descuido de contrato de compañia de electricidad a los incautos propietarios, poco nos va a poder ayudar, si no confundir definitivamente, si acudimos a él para pedir consejo. Yo me refiero, y por centrarnos en nuestro mundillo y se puedan mencionar casos conocidos (casi circunscritos a Madrid, que es mi área de residencia), a poder acudir a Sacristan en la calle Mayor, Carranza en la calle Carranza, Rey en Ciudad de Barcelona, Sancer en Moncloa y poder preguntar a por tal o cual modelo o problema y poder recibir una respuesta de calidad. Poder preguntar a esa institución que es Julia Gusano (que por cierto cumple 30 años al frente de su negocio en estos días) sobre un problema de funcionamiento de aquel raro modelo de Wahl que tiene uno por casa. O hablar en persona con Joseph Pareja en cualquier penshow para que nos explique cómo modificar ligeramente el flujo de aquella estilográfica que parece un grifo de sifón cada vez que la abrimos. Nada de esto se puede hacer con, por ejemplo, alguno de esos muchos traficantes de plumas chinas que tan barato venden en la bahía, o sin ir más lejos, esa web italomarciana que tantos modelos de pluma nos ha vendido con el nombre de aquel famoso rey prusiano.
En cuanto a lo segundo que se subraya, claramente no me he expresado completamente. Me refiero al prestigio y reputación que deben mantener las tiendas y comercios tradicionales muy por encima de los sitios web. Si una tienda física, la que sea, maltrata a sus clientes, como la que da origen a este hilo, está claro que tendrá que acabar cerrando más bien antes que después. No tienen sitio donde huir una vez empieza a correrse la voz de sus incorrecciones. Si además practica el engaño en cualquiera de sus variantes, su vida será efímera.
En la red esto no ocurre. No creo que nadie ignore que, por citar un lugar común, en la bahía los vendedores tramposos son díficiles de seguir, pues cuando acumulan un par de referencias negativas, desaparecen y nada se vuelve a saber de ellos. Pero no seamos tan simples de creer que se han arrepentido de sus malos actos y presos de la culpa ingresan en el monasterio más cercano. Sencillamente dan de alta otra cuenta (u otra web, dado el caso) y reemprenden sus líneas de trabajo. Nadie les ve la cara, pocos o ninguno conocen su nombre y esta forma de comercio les facilita actuar con plena impunidad. No sólo son esos casos, quizá los más graves. Todos sabemos que la mayoría de los comerciantes que se dedican en serio a ello en dicha plataforma, actuan con varias cuentas, se autopujan, se votan y valoran, tergiversando de manera notable lo que debería ser un sistema de establemiento de confianza. A eso me refiero cuando hablo de la necesidad de mantener un prestigio. A cara vista, hay que trabajarlo y mantenerlo o pagar las consecuencias inmediatas. En la red, cuando les pillan tan solo hay que levantar la manta y ponerla un par de baldosas más allá. Al final nunca sabes si estás comprando a un sinvergüenza o a un buen señor que trabaja honestamente.
No obstante, tampoco quiero llevar el tema a los extremos, no ganamos nada con ello. Dije y repito, que lo que podemos hacer es aprender de todo ello, quedarnos con lo que más nos guste y convenga y adaptarnos a los nuevos tiempos y sistemas que estamos ayudando a crear e impulsar con nuestras acciones. Asumir también nuestra responsabilidad en estos cambios, pues si alguna vez hemos actuado haciendo lo que criticamos de ir a toquetear y probar para luego comprar en internet, no podemos extrañarnos que eso destruya el comercio tradicional con todo lo que significa. Y eso, aunque a algunos les parezca nimio o incluso deseable, es una gran pérdida de conocimientos y de opciones entre las que poder escoger, amén de puestos de trabajo y generación de recursos económicos y sociales.
Como se ha dicho, este tema es muy complejo y me parece genial que cada uno aportemos algo al respecto pues la masa de conocimientos y experiencias que sumamos entre todos los foreros es inmensa y más de alguna entidad de análisis de mercado o similar, pagaría por disponer de ellos para un estudio de estos asuntos.
Saludos.