AbderramanII
Reina Mora
Sin verificar
Aparte de para desahogarme (ahora mismo tengo un cabreo del 15), os cuento esto por si pudiera servir a otras personas mayores o simplemente confiadas y de buena voluntad de vuestro entorno.
Resulta que ayer mi padre (setenta y pocos años y un estado físico envidiable) decidió pararse en la calle con una mujer que le pedía ayuda y darle algo de dinero. Era después de comer y no había apenas nadie en las calles. Pues bien, la mujer se mostró enormemente agradecida y en un arranque de efusividad se lanzó hacia mi padre (supongo que agarrándolo por los antebrazos o muñecas) para agradecer su gesto con un beso. Mi padre se apartó y se zafó como pudo de la mujer y al llegar a casa descubrió que había desaparecido su reloj de boda, un precioso y sesentero Omega de oro con una maravillosa milanesa también de oro.
Dentro de lo que cabe, ha habido suerte de que no se lo sustrajeran con violencia, pero no obstante tengo un disgusto impresionante porque ese reloj es el que yo recuerdo siempre en la muñeca de mi padre cuando era pequeña y me llevaba de la mano. Tiene y ha tenido otros, pero ese era el "reloj de mi padre" y yo esperaba conservarlo siempre
En fin, he querido compartir la historia para que lo contéis en vuestro entorno y entre todos tratemos de evitar que las buenas personas que todavía quedan en este mundo salgan perjudicadas por sus buenos actos.
Resulta que ayer mi padre (setenta y pocos años y un estado físico envidiable) decidió pararse en la calle con una mujer que le pedía ayuda y darle algo de dinero. Era después de comer y no había apenas nadie en las calles. Pues bien, la mujer se mostró enormemente agradecida y en un arranque de efusividad se lanzó hacia mi padre (supongo que agarrándolo por los antebrazos o muñecas) para agradecer su gesto con un beso. Mi padre se apartó y se zafó como pudo de la mujer y al llegar a casa descubrió que había desaparecido su reloj de boda, un precioso y sesentero Omega de oro con una maravillosa milanesa también de oro.
Dentro de lo que cabe, ha habido suerte de que no se lo sustrajeran con violencia, pero no obstante tengo un disgusto impresionante porque ese reloj es el que yo recuerdo siempre en la muñeca de mi padre cuando era pequeña y me llevaba de la mano. Tiene y ha tenido otros, pero ese era el "reloj de mi padre" y yo esperaba conservarlo siempre
En fin, he querido compartir la historia para que lo contéis en vuestro entorno y entre todos tratemos de evitar que las buenas personas que todavía quedan en este mundo salgan perjudicadas por sus buenos actos.
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