Legary
Novat@
Sin verificar
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Muchas gracias Don Luis por sus comentarios que son auténticas clases de relojeria, dejo un antiguo post del foro general dónde se habla de ello https://relojes-especiales.com/threads/dar-cuerda-al-reloj.60834/
Muchas gracias, saludos cordiales
Hola Abel : Un gusto saludarte ( y lo hago extensivo a todos mis cuates de RE)
que buena anécdota ! y que buena combinación ! un CONTADOR compulsivo !
Si requieres ayuda profesional estamos para servirte en mi institución
http://www.inprf.org.mx/
(una broma por supuesto)
Por cierto ¿te puedo contactar por privado ?, pues tengo un par de preguntas sobre tu Longines monopussoir y algunos Rolex que he adquirido que me gustaría me dieras tu docta opinión.
Un saludo del King azteca
Hola amigo Mazel! Hola amigos!
¡Cuantas cosas se aprenden en este Foro!.
Ya van a hacer dos años desde que ingresé aquí, y creo poder afirmar que no hubo un solo dia de los que entré aunque sea a mirar lo que sucedía, en el que no haya aprendido algo.
A veces es un pequeño detalle, casi sin importancia, pero interesante, a veces son clases magistrales, consejos, puntos de vista, experiencias, etc.
Es increible la riqueza de conocimientos que hay aqui! ¡Y cuánta experiencia reunida en este lugar!
Bueno, en este hilo se habla de este tema, de dar cuerda... "qué tontería habla esta gente" podrá pensar alguno, ante algo que parece un asunto superfluo, pero que encierra una enorme cantidad de explicaciones, detalles mecánicos o técnicos y experiencias como las que nos aporta Don Luis como sabe hacerlo habitualmente.
Como mis conocimientos son restringidos, mi aporte se remite a mis anécdotas, que un poco en broma y un poco en serio, intentan también aportar algo, como en la que relaté más arriba, referente a mi costumbre de contar vueltas de la corona.
Ahora voy a relatar otra experiencia, referida a lo que comenta el amigo Mazel, sobre si se debe dar para un lado y para otro, o un solo lado, o si se debe "aliviar la cuerda"
Como es sabido, la cuerda solo carga hacia un lado, pues para el otro existe el "trinquete" que impide el giro del tren de engranajes para el lado contrario al de carga, de manera que cargamos cuerda hacia un lado solamente.
El movimiento de vaiven hacia un lado y otro, viene de la conveniencia de hacerlo para reposicionar los dedos y volver a cargar siempre hacia el mismo lado, pero más comodamente.
Con ello habría posiblemente (don Luis puede decirlo mejor) un mayor desgaste de las piezas, pues hacemos trabajar hacia un lado sin obtener carga de la cuerda.
Sin embargo, podemos dar cuerda girando la corona solamente hacia un lado, pero esto es más lento y algo menos còmodo, al menos para mi.
Y ahora viene la anécdota:
Sabemos que cuando llegamos al tope de la cuerda (ese momento tan temido por mí, que me lleva a contar las vueltas de la corona, para detenerme una vuelta antes del máximo, o para llegar lentamente al final!! ja ja ja) se ha llegado al maximo y no debemos seguir insistiendo.
Al llegar al tope, es imposible "aliviar la cuerda", pues si giramos la corona hacia el lado contrario a la carga, no sucede nada, mas que el cri cri cri del mecanismo al actuar el trinquete. O sea, llegamos al tope y nos detenemos, y punto. Darle para el otro lado, es una pérdida total de tiempo, al menos de eso estoy convencido yo, salvo que don Luis o alguno de los amigos de mayor conocimentos tecnicos, me de una explicacion contraria
Hace seis años, adquiri un Panerai 111 (movimiento de carga manual) en una coqueta tienda de Paris (concesionaria de la marca), y al terminar "la ceremonia" de la compra, llenado de papeles, garantias, empaquetado, colgado de moños y cintas, y todo el etcétera que este tipo de tiendas suelen hacer para transformar una simple venta, en una verdadera ceremonia, la vendedora, que había comentado que hacía muchos años que estaba en el negocio de los relojes, y que supuestamente reciben periódicos trainings por parte de la tienda y las firmas que representan, me preguntó si sabía yo darle cuerda a mi nuevo Panerai.
Sorprendido por la pregunta tan obvia, dije que sí, pero ella sin aparentemente escuchar mi respuesta, me dio una clase magistral de "dar-la-cuerda-a-un-reloj-manual" digna de un relato de Cortazar.
Al concluir, dijo:
"...y entonces, cuando llega usted al tope de la cuerda, como ahora (y me mostró que estaba ya "durita" y que no podìa seguir dándole más) usted no fuerce mas, por favor". "Lo que usted debe hacer al llegar a este punto, es darle a la corona unas vueltitas para el lado contrario, y asi aliviará la cuerda".
Confieso que mi mandíbula cayó al piso como el personaje de "La Máscara", al escuchar la aseveración de la experta de la tienda.
Bueno, la señorita me preguntó si habìa comprendido, y yo me limitè a asentir con la cabeza, porque no me atreví a discutir con ella este tema, de que por mas que diera a la corona "pa´l lado contrario" no sucedería absolutamente nada.
Para completar esto de mis anécdotas, baste decir que hace un mes, en ocasión de visitar a unos familiares mios en Milano, mi sobrino, que es un fan de los relojes, y que sabe de mi "pequeña afición" a los relojes, me llevó a visitar la recientemente inaugurada Boutique de Jaeguer Le Coultre de Milano, donde tiene unos amigos alli.
Gracias a mi sobrino y sus amistades, me di una panzada de mirar y probarme, algunos relojes que jamás podré adquirir, pero siendo este un "detalle menor" que no me impide disfrutar una rara ocasión como esta de probarme, preguntar precios, y mirar como si fuera yo un jeque arabe, los relojes mas exquisitos que pueda imaginarse.
Mi sobrino hacía lo propio, y me guiñaba un ojo mientras me mostraba sus brazos en alto, luciendo dos relojes en cada brazo, haciendo que sus miembros superiores valiesen en conjunto, unos 600 mil euros cada uno.
En el curso de este deleite relojeril, y conversando sobre el movimiento del nuevo modelo Grande Reverso 1931 dial rosso, de movimiento manual (calibre 822 de JLC), de reciente lanzamiento, el experto vendedor a cargo de la Boutique me lanzó "la pregunta fatal" en un pulido italiano: "¿Usted sabe cómo se le da cuerda a un reloj mecánico?"
Tuve un deja-vu, que me remontó a mi experiencia en la tienda Panerai de hace 6 años, pero inmediatamente regresé a la realidad, porque el italiano había comenzado a enseñarme cómo dar cuerda al Reverso manual, haciendo alarde de su sabidurìa adquirida en numerosos cursos de entrenamiento dados por "La Manufactura".
Al finalizar, pronunció idénticas palabras que la vendedora de Panerai, hace seis años: "cuando llega al tope, y siente que está durita, no insista, ha llegado al tope. Ahora solo debe darle dos o tres vueltas en sentido contrario, para aliviar la cuerda".
Mi mandíbula volvió a caer al piso, y no supe que decir.
Alcancé a darle las gracias al atento señor de JLC, por la clase magistral sobre cuerda de relojes, y la panzada de prueba de relojes JLC de la que habia disftrutado hasta ese instante, y decirle a mi sobrino que ponía fin a mi visita a la Boutique JLC.
Argumenté que tanta variedad y espectacularidad de relojes en la hora que habíamos pasado alli, me había provocado una especie de "empacho relojeril", como cuando uno visita el "Palacio del Jamón" en Madrid, y comienza a probar las delicias que ofrecen y uno se pasa de la raya.
Me alejé con mi "nepote" (sobrino) caminando por la Via Montenapoleone. El estaba mas contento que perrito con dos colas, despues de la gozada de relojes que nos habiamos dado, y hablaba hasta por los codos, de la experiencia que habiamos tenido.
Yo caminaba mudo, sin poder decir palabras, pues sentía que algo me había perdido en tantos años de andar con mis relojes.
Muchas gracias por vuestra paciencia por haber llegado hasta aqui, y les envio mi afectuoso saludo, Tonin.
La primera ves que escucho algo así ni tampoco le encuentro sentido alguno viéndolo del punto de vista como relojero, si alguno sabe la respuesta me interesaría leerla por que yo también quede con la boca abierta.
Saludos
¡Madre mía!¡La cosa se complica! ¡Ahora resulta que hay que dar cuerda a tope y finalmente en "contramarcha" un par de vueltas! Se me escapa totalmente la utilidad que puede tener la operación de dar cuerda en vacío. ¿Aliviar? ¿Aliviar el qué?
Aún así, dudo mucho que el exquisito personal de las excelsas marcas recomienden hacer algo completamente inútil... o incluso dañino para los relojes que venden.
Hola amigo Mazel! Hola amigos!
¡Cuantas cosas se aprenden en este Foro!.
Ya van a hacer dos años desde que ingresé aquí, y creo poder afirmar que no hubo un solo dia de los que entré aunque sea a mirar lo que sucedía, en el que no haya aprendido algo.
A veces es un pequeño detalle, casi sin importancia, pero interesante, a veces son clases magistrales, consejos, puntos de vista, experiencias, etc.
Es increible la riqueza de conocimientos que hay aqui! ¡Y cuánta experiencia reunida en este lugar!
Bueno, en este hilo se habla de este tema, de dar cuerda... "qué tontería habla esta gente" podrá pensar alguno, ante algo que parece un asunto superfluo, pero que encierra una enorme cantidad de explicaciones, detalles mecánicos o técnicos y experiencias como las que nos aporta Don Luis como sabe hacerlo habitualmente.
Como mis conocimientos son restringidos, mi aporte se remite a mis anécdotas, que un poco en broma y un poco en serio, intentan también aportar algo, como en la que relaté más arriba, referente a mi costumbre de contar vueltas de la corona.
Ahora voy a relatar otra experiencia, referida a lo que comenta el amigo Mazel, sobre si se debe dar para un lado y para otro, o un solo lado, o si se debe "aliviar la cuerda"
Como es sabido, la cuerda solo carga hacia un lado, pues para el otro existe el "trinquete" que impide el giro del tren de engranajes para el lado contrario al de carga, de manera que cargamos cuerda hacia un lado solamente.
El movimiento de vaiven hacia un lado y otro, viene de la conveniencia de hacerlo para reposicionar los dedos y volver a cargar siempre hacia el mismo lado, pero más comodamente.
Con ello habría posiblemente (don Luis puede decirlo mejor) un mayor desgaste de las piezas, pues hacemos trabajar hacia un lado sin obtener carga de la cuerda.
Sin embargo, podemos dar cuerda girando la corona solamente hacia un lado, pero esto es más lento y algo menos còmodo, al menos para mi.
Y ahora viene la anécdota:
Sabemos que cuando llegamos al tope de la cuerda (ese momento tan temido por mí, que me lleva a contar las vueltas de la corona, para detenerme una vuelta antes del máximo, o para llegar lentamente al final!! ja ja ja) se ha llegado al maximo y no debemos seguir insistiendo.
Al llegar al tope, es imposible "aliviar la cuerda", pues si giramos la corona hacia el lado contrario a la carga, no sucede nada, mas que el cri cri cri del mecanismo al actuar el trinquete. O sea, llegamos al tope y nos detenemos, y punto. Darle para el otro lado, es una pérdida total de tiempo, al menos de eso estoy convencido yo, salvo que don Luis o alguno de los amigos de mayor conocimentos tecnicos, me de una explicacion contraria
Hace seis años, adquiri un Panerai 111 (movimiento de carga manual) en una coqueta tienda de Paris (concesionaria de la marca), y al terminar "la ceremonia" de la compra, llenado de papeles, garantias, empaquetado, colgado de moños y cintas, y todo el etcétera que este tipo de tiendas suelen hacer para transformar una simple venta, en una verdadera ceremonia, la vendedora, que había comentado que hacía muchos años que estaba en el negocio de los relojes, y que supuestamente reciben periódicos trainings por parte de la tienda y las firmas que representan, me preguntó si sabía yo darle cuerda a mi nuevo Panerai.
Sorprendido por la pregunta tan obvia, dije que sí, pero ella sin aparentemente escuchar mi respuesta, me dio una clase magistral de "dar-la-cuerda-a-un-reloj-manual" digna de un relato de Cortazar.
Al concluir, dijo:
"...y entonces, cuando llega usted al tope de la cuerda, como ahora (y me mostró que estaba ya "durita" y que no podìa seguir dándole más) usted no fuerce mas, por favor". "Lo que usted debe hacer al llegar a este punto, es darle a la corona unas vueltitas para el lado contrario, y asi aliviará la cuerda".
Confieso que mi mandíbula cayó al piso como el personaje de "La Máscara", al escuchar la aseveración de la experta de la tienda.
Bueno, la señorita me preguntó si habìa comprendido, y yo me limitè a asentir con la cabeza, porque no me atreví a discutir con ella este tema, de que por mas que diera a la corona "pa´l lado contrario" no sucedería absolutamente nada.
Para completar esto de mis anécdotas, baste decir que hace un mes, en ocasión de visitar a unos familiares mios en Milano, mi sobrino, que es un fan de los relojes, y que sabe de mi "pequeña afición" a los relojes, me llevó a visitar la recientemente inaugurada Boutique de Jaeguer Le Coultre de Milano, donde tiene unos amigos alli.
Gracias a mi sobrino y sus amistades, me di una panzada de mirar y probarme, algunos relojes que jamás podré adquirir, pero siendo este un "detalle menor" que no me impide disfrutar una rara ocasión como esta de probarme, preguntar precios, y mirar como si fuera yo un jeque arabe, los relojes mas exquisitos que pueda imaginarse.
Mi sobrino hacía lo propio, y me guiñaba un ojo mientras me mostraba sus brazos en alto, luciendo dos relojes en cada brazo, haciendo que sus miembros superiores valiesen en conjunto, unos 600 mil euros cada uno.
En el curso de este deleite relojeril, y conversando sobre el movimiento del nuevo modelo Grande Reverso 1931 dial rosso, de movimiento manual (calibre 822 de JLC), de reciente lanzamiento, el experto vendedor a cargo de la Boutique me lanzó "la pregunta fatal" en un pulido italiano: "¿Usted sabe cómo se le da cuerda a un reloj mecánico?"
Tuve un deja-vu, que me remontó a mi experiencia en la tienda Panerai de hace 6 años, pero inmediatamente regresé a la realidad, porque el italiano había comenzado a enseñarme cómo dar cuerda al Reverso manual, haciendo alarde de su sabidurìa adquirida en numerosos cursos de entrenamiento dados por "La Manufactura".
Al finalizar, pronunció idénticas palabras que la vendedora de Panerai, hace seis años: "cuando llega al tope, y siente que está durita, no insista, ha llegado al tope. Ahora solo debe darle dos o tres vueltas en sentido contrario, para aliviar la cuerda".
Mi mandíbula volvió a caer al piso, y no supe que decir.
Alcancé a darle las gracias al atento señor de JLC, por la clase magistral sobre cuerda de relojes, y la panzada de prueba de relojes JLC de la que habia disftrutado hasta ese instante, y decirle a mi sobrino que ponía fin a mi visita a la Boutique JLC.
Argumenté que tanta variedad y espectacularidad de relojes en la hora que habíamos pasado alli, me había provocado una especie de "empacho relojeril", como cuando uno visita el "Palacio del Jamón" en Madrid, y comienza a probar las delicias que ofrecen y uno se pasa de la raya.
Me alejé con mi "nepote" (sobrino) caminando por la Via Montenapoleone. El estaba mas contento que perrito con dos colas, despues de la gozada de relojes que nos habiamos dado, y hablaba hasta por los codos, de la experiencia que habiamos tenido.
Yo caminaba mudo, sin poder decir palabras, pues sentía que algo me había perdido en tantos años de andar con mis relojes.
Muchas gracias por vuestra paciencia por haber llegado hasta aqui, y les envio mi afectuoso saludo, Tonin.
Estimado amigo Abel , con tu escrito he viajado a París y a Milano , he histo las boutiques Panerai y JLC, y hasta he hablado con las bellas señoritas.
Muchas gracias por brindarnos tu escritos.
Un abrazo
Miquel