Amigo....
¡¡eres un crack!!
Procedo a responder
:
Yo por mi ciudad no suelo ir así, ahora, cuando vamos a la playa, no tengo ninguna verguenza y llevo lo que haya que llevar: pantalón pirata, camiseta sin mangas, gafas de sol de espejo de "poli duro", gorra de beisbol o de los Boston Celtics....
Alguna vez he llegado a llevar unas sandalias playeras con los colores de la bandera de jamaica. Aquel verano que fue el primero en el que nos fuimos de vacaciones, la tuve a mi mujer partiéndose de risa a costa de las mismas todos los días. De hecho todavía se acuerda de ellas.
Mi mujer aquí en Logroño se pone en veranito esos pantalones pirata vaqueros que tan bien le sientan. Parece mentira, le quedan exactamente igual de bien que hace tres o cuatro años.
Haciendo un inciso, no puedo resistir a contar una anécdota que me pasó hace tres años en La Pineda:
Fuimos al chiringuito a tomar una cocacola y yo al ir fui con las chancletas. El caso es que al volver a la toalla, se me quedaron en la arena justo debajo de la mesa donde nos habíamos estado tomando el refresco.
Pasadas un par de horas recogimos para marcharnos y...., claro
no encontraba las chanclas...
Y yo pensaba..., no puede ser
no creo que nadie haya sido capaz de levantármelas estando aquí en la toalla. Se las tienen que haber llevado por error...
Claro, el caso es que era un pequeño contratiempo el tener que volver al apartamento descalzo...
Pues nada, hicimos un barrido por toda la zona de la playa hasta que acabé en el chiringuito de nuevo.
Lo cierto es que yo soy superdespistado, y ni me acordaba como eran las chanclas.
Estando ahí en las tarimas del chiringuito..., me fijo en un guiri inglés de unos 50 años con su mujer la típica british mayor con la piel de leche y sombrero...
Y de repente...
Le digo a mi mujer: "Oye, juraría que mis chancletas son como las que lleva ese tío..."
Mi mujer contesta: "pero hombre, cómo van a ser esas las tuyas..."
Yo, que no me acordaba muy bien, pues tenía mis dudas y tal, pues ahí que estuvimos cinco minutos de pie delante de la pareja.
El british me echó un par de miradas de reojo, pero vamos, yo las interpreté como que había advertido que le estábamos mirando de vez en cuando los pies...
¿cómo acabó la cosa?:
Pues el tío a los diez minutos se acabó la cerveza... ¡¡Y SE DESCALZÓ LAS CHANCLETAS DEJANDOLAS EN LA ARENA marchándose a continuación con su mujer!!!!
¡¡IMPRESIONANTE!! Fue una de las anécdotas de aquel año.
La otra fue cuando la nena y yo nos confundimos de hamaca. La teníamos alquilada y nos confundimos de entrada a la playa. Al ver a un encargado nuevo, pensamos que el habitual había cogido fiesta.
Mientras mi mujer y mis suegros nos estaban buscando por media playa. Casi casi estuvieron a punto de dar aviso por megafonía, y nosotros apunto de entrar en discusión con una pareja que decía que la tumbona era suya y no nuestra...
En fín.
saludos amigos