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Parar o no parar, he ahí el dilema.

  • Iniciador del hilo RUALINCE
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Hilo cerrado
  • #26
Sres: en menos de un mes, y llevado por la fiebre compradora, me he hecho con un par de waterman y dos Lamy Safari para mis hijas, he hecho "compra de hormigas" como lo llamais (la perform 1745 me ha salido de pena, pero la que imita a la Dolce vita va bien) una Sailor Sapporo (M) y una Pelikan 1000 (F, pero que no he probado aún) que se añaden a mi MB 146. Acabo de recibir una Inoxcrom Sirocco (punto M) que escribe de maravilla.

Pero he de parar, os leo y me dan ganas de comprar una Delta dolce vita de verdad, una comway, una montegrppa nero, etc. etc. y eso que ya he decidido que la MB 149 tiene que caer. Pero esto es una locura, creo que necesito aprender más y seleccionar mejor. ¿Alguna idea que me oriente en este camino de los que ya habeis pasado por esto...?

Muchas gracias.:hmm:

Hay plumas que hay que dejar para cuando no hay nada especial a la vista. Me explico: da igual comprarse hoy una mb 146 que dentro de 6 meses, o 6 años. Lo mismo con la dolce vitta o una conway churchill. Sin embargo, a veces aparecen ocasiones con ediciones limitadas o plumas que ya no se venden pero encuentras nos...o yayas a los que les gusten, y en esos casos si hay que actuar. Pero sin obsesionarse.
 
  • #27
5º Cada vez que se consigue una de las plumas de la lista, la elimino y añado otro objetivo a la misma.

A ver Amador, el punto 5º no me ha quedado muy claro. ¿Cuando consigues una pluma, añades otra a la lista, además de las que ya tienes anotadas?

Un saludo.

Efectivamente José Antonio.

Me explico: imagina que, por ejemplo, una de las plumas de la lista (de las 10 o 12 plumas que he mencionado) es la MB149 en punto OBB. Cuando la consiguiera, la eliminaría de la lista y pensaría qué otra pluma me gustaría añadir a la lista; por ejemplo: una Montblanc Agatha Christie en punto B o superior ;-) :whist::.

De esta manera siempre tengo a mano una lista reducida (de 10 o 12 piezas) que realmente quiero tener y utilizar. Esto evita el riesgo de dispersarse uno y ayuda a "centrar el objetivo".

Espero haber aclarado tu duda :innocent:.

Un abrazo :friends:
 
  • #28
Me encantan estos hilos de autoayuda :D

Todo el que coleccione algo pasa por las etapas de fiebre... que pueden ser ridiculas para quien coleccione otra cosa: al que colecciona tapas de botella le parece absurdo que alguien busque plumas o sellos o monedas o calcetines anteriores a la segunda guerra en estado NOS.

Una buena cosa es mirarlo desde fuera: evitar lo que los psicos llaman "visión de tunel": pensar de vez en cuando en lo infantil que es comprar plumas...

Otra buena cosa es fijarte un límite: por ejemplo, el 5% (por decir algo) de tus ingresos. Creo que eso está bien para aprender a refrenarte, porque si juntas lo de cinco o seis mesadas a lo mejor te compras una pluma que te gusta más que si te lo fundes en una cada mes. Claro, si tras tu nick está Amancio Ortega, pues te puedes gastar cómodamente unos cuantos miles al mes. Pero si eres una persona normalita como nosotros, ahorrarás, te lo digo por experiencia.

Otra cosa importante es recordar que internet engaña: cuidado, muchas veces uno compra FOTOS no plumas... y eso es muy arriesgado; algunos de mis griales se desvanecieron en un momento cuando los pude ver en vivo y tocar. Si compras sin saber... cajón casi seguro .

Eso te puede decir un adicto en vias de recuperación.

Y si ya somos adictos ¿cuál es nuestra metadona? ¿Un pack de bolis BIC dos veces al día? :laughing1:

LC
 
  • #29
...
4º Cada año comprar sólo 1 ó 2 plumas de esa lista. Preferentemente siguiendo el orden de prelación, pero no pasa nada en romper el orden si se pone a tiro otra pieza de la lista a buen precio.

...


Yo estoy en plena gripe
lostimage.jpg
, y se me antoja difícil seguir esa lista, espero algún día poder llegar a hacerlo, aunque me compre las dos plumas en un intervalo de poco más de diez minutos :laughing1: ¡Un método a seguir! :ok::
 
  • #30
Y si ya somos adictos ¿cuál es nuestra metadona? ¿Un pack de bolis BIC dos veces al día? :laughing1:

LC

Es que lo bueno de esta adicción es que te puedes meter de nuevo lo que ya tienes... rotar, reciclar, enviarte a ti mismo por correo las plumas de tu propia colección, vendértelas a ti mismo y con eso comprar otras nuevas, todo género de negocios sucios :laughing1:
 
  • #31
Yo lo que he hecho es ponerme una lista, y vamos a ver si cae una de estas por año:

- waterman edson: 2013
- conway stewart churchill 2014
- Delta dolce vita: 2015
- Montegrappa Extra: 2016
- Montblanc 146: 2017

Y luego, alguna cosilla suelta cada año, para no esperar mucho entre una y otra...pero ya he decidido que no más de dos o tres al año, de hecho, este año me he comprado sólo dos.
 
  • #32
Me explico: imagina que, por ejemplo, una de las plumas de la lista (de las 10 o 12 plumas que he mencionado) es la MB149 en punto OBB. Cuando la consiguiera, la eliminaría de la lista y pensaría qué otra pluma me gustaría añadir a la lista; por ejemplo: una Montblanc Agatha Christie en punto B o superior ;-) :whist::.

Hombre, si te pones objetivos de este calibre seguro que compras poco: es más, podrías hasta dejar de comprar. ¿Sabes cuántas Agathas en punto B he visto en mi ya no tan corta existencia?
 
  • #33
Yo estoy en plena gripe
lostimage.jpg
, y se me antoja difícil seguir esa lista, espero algún día poder llegar a hacerlo, aunque me compre las dos plumas en un intervalo de poco más de diez minutos :laughing1: ¡Un método a seguir! :ok::

Iñaqui, lo importante no es el intervalo de tiempo en el que se consiguen los objetivos :innocent:. Lo importante es conseguir tus objetivos :D.

Fíjate en Félix Baumgartner, unos añitos de preparación para "tan sólo" unos minutos de caída 8o.

Un abrazo y toma el "Inistón":friends:
 
  • #34
La pega que tiene coleccionar (o acaparar) plumas es que las piezas son accesibles para casi todos. Por mucho que te guste y desees poseer algún objeto no accesible (o accesible a unos pocos) no causa stress ni ansiedad. Así, por mucho que me guste Ferrari, Lamborghini, Porsche etc, mi cerebro sabe que no voy a poder coleccionarlos y no me provoca desazón. Con las estilográficas pasa que, incluso las relativamente caras (sobre 1000€) con un poco de sacrificio y algo de tiempo las podemos poseer. Creo que ese es el principal problema para poder parar. Otra forma de parar sería ir a terapia y que nos dejasen de gustar las plumas.

Como se ha comentado anteriormente, lo ideal sería comprar una, o a lo sumo, dos piezas que nos gustasen, disfrutarlas hasta el aburrimiento y entonces plantearse la siguiente adquisición. Podemos plantear un escenario ficticio: Poseemos todo el capital que hemos gastado en estilográficas en los últimos 4 años, sin tener ninguna de las plumas que habíamos comprado. ¿Qué haríamos? (solo podemos comprar plumas).

Para los que somos adictos a las compras, hay una manera de satisfacer la ansiedad sin perjudicar el bolsillo: el intercambio de piezas. Por lo que he comprobado funciona bastante bien.


Un saludo
 
  • #35
Hola

Yo lo que veo importante es saber diferenciar bien el placer de "comprar" al de "tener".

El acto de comprar una nueva pieza, en este caso estilográficas, pero se puede aplicar a cualquier otro objeto de deseo, es por si sólo muy placentero. La emoción de encontrarla, el impulso a que pase a ser nuestra, el aprovechar oportunidades que nos autoconvecemos de que serán irrepetibles, y ya no digamos si encima se junta el hecho de ganar una subasta, una especie de competición por la compra que tiene doble premio si el precio final nos convence. Todo ello nos resulta tan emocionante y agradable que puede resultarnos casi adictivo y perdemos de vista el objetivo. "Comprarla" es casi tan importante como "tenerla". Según mi opinión esta es la causa de que pasado un tiempo esas adquisiciones pierdan encanto: Ya son todas nuestras, ya no valoramos tanto si la compramos bien de precio y además nos damos cuenta de que no cumplen del todo con nuestras preferencias a la hora de usarlas.

Y vamos al segundo punto, el "tener" cada vez más estilográficas, esa incluso a veces obsesión por acumular, por poseer, si al final todos escribimos con una sola mano. Es la base de toda colección, tener, juntar, recopilar... Otra característica de los que, criados en una época capitalista y que además tenemos la suerte pasar (o haber pasado, tal y como estan las cosas) por esta época especialmente consumista y de bonanza económica, pues hemos aprendido todos involuntariamente y que pocos se salvan de sufrirla: sólo aquellos que son suficientemente fuertes para saber renunciar a todo o los que por ir a contracorriente se autoclasifican de minimalistas.

Bueno, tras este rollo filosófico, creo que hay que despenderse totalmente del primer factor, el del placer de comprar, y aprender a disfrutar del segundo, el tener, buscándole un sentido (como bien alguien ha dicho, dar orientación a la colección, etc) y una total coherencia con nuestras preferencias de uso. De ahí que funcione hacer listas cuando la cabeza está serena y que no tenga mucha garantía de éxito el ir al Pen Show con una visa cargadita y sin ningún objetivo marcado.

Sobre las compras hormiga, si son hormiga de verdad (muy baratitas) tienen cierto sentido, ya que nos dan ambos placeres y aunque muy probablemente sean muy cortos y efímeros, su relación coste-placer puede ser perfectamente asumible (como ir al cine, por ejemplo).

Hay muchos más factores, nuestra situación económica, el cambio de gustos que sufrimos con la edad, el que te guste ahora más la novia del vecino que la tuya, etc, etc pero eso ya... hay que vivir con ello.

Perdonad el tocho, tengo un dia algo reflexivo

Un saludo

Rubèn
 
  • #36
, hay una manera de satisfacer la ansiedad sin perjudicar el bolsillo: el intercambio de piezas. Por lo que he comprobado funciona bastante bien.


Un saludo

Hola

Antes no he comentado nada sobre este punto y es algo que yo también he empezado a practicar hace poco y me parece algo genial, totalmente recomendable, de verdad.

Un saludo

Rubèn
 
  • #37
Hola

Yo lo que veo importante es saber diferenciar bien el placer de "comprar" al de "tener".

El acto de comprar una nueva pieza, en este caso estilográficas, pero se puede aplicar a cualquier otro objeto de deseo, es por si sólo muy placentero. La emoción de encontrarla, el impulso a que pase a ser nuestra, el aprovechar oportunidades que nos autoconvecemos de que serán irrepetibles, y ya no digamos si encima se junta el hecho de ganar una subasta, una especie de competición por la compra que tiene doble premio si el precio final nos convence. Todo ello nos resulta tan emocionante y agradable que puede resultarnos casi adictivo y perdemos de vista el objetivo. "Comprarla" es casi tan importante como "tenerla". Según mi opinión esta es la causa de que pasado un tiempo esas adquisiciones pierdan encanto: Ya son todas nuestras, ya no valoramos tanto si la compramos bien de precio y además nos damos cuenta de que no cumplen del todo con nuestras preferencias a la hora de usarlas.

Y vamos al segundo punto, el "tener" cada vez más estilográficas, esa incluso a veces obsesión por acumular, por poseer, si al final todos escribimos con una sola mano. Es la base de toda colección, tener, juntar, recopilar... Otra característica de los que, criados en una época capitalista y que además tenemos la suerte pasar (o haber pasado, tal y como estan las cosas) por esta época especialmente consumista y de bonanza económica, pues hemos aprendido todos involuntariamente y que pocos se salvan de sufrirla: sólo aquellos que son suficientemente fuertes para saber renunciar a todo o los que por ir a contracorriente se autoclasifican de minimalistas.

Bueno, tras este rollo filosófico, creo que hay que despenderse totalmente del primer factor, el del placer de comprar, y aprender a disfrutar del segundo, el tener, buscándole un sentido (como bien alguien ha dicho, dar orientación a la colección, etc) y una total coherencia con nuestras preferencias de uso. De ahí que funcione hacer listas cuando la cabeza está serena y que no tenga mucha garantía de éxito el ir al Pen Show con una visa cargadita y sin ningún objetivo marcado.

Sobre las compras hormiga, si son hormiga de verdad (muy baratitas) tienen cierto sentido, ya que nos dan ambos placeres y aunque muy probablemente sean muy cortos y efímeros, su relación coste-placer puede ser perfectamente asumible (como ir al cine, por ejemplo).

Hay muchos más factores, nuestra situación económica, el cambio de gustos que sufrimos con la edad, el que te guste ahora más la novia del vecino que la tuya, etc, etc pero eso ya... hay que vivir con ello.

Perdonad el tocho, tengo un dia algo reflexivo

Un saludo

Rubèn

+1

Sólo te falto mencionar eso de "Siempre se quiere lo que no se tiene".

PD: aunque en el mundo de la pluma, quizás sea más apropiado el de "Siempre hay un pez más grande..." (aunque en este caso para pescar xD)
 
Última edición:
  • #38
Yo estoy en plena gripe
lostimage.jpg
, y se me antoja difícil seguir esa lista, espero algún día poder llegar a hacerlo, aunque me compre las dos plumas en un intervalo de poco más de diez minutos :laughing1: ¡Un método a seguir! :ok::

Bueno ¿Qué pasa con los de Bilbao? Primero Txema y ahora tú. Yo os hacía un poco más recios, pero va y os caen cuatro gotitas de lluvia de na en Madrid :umbrella: y ¡Ale! ya estáis todos para el arrastre ::bxd:: :nea:

Venga ¡Cuidaros que ya queda poco para el próximo Penshow 2013! :laughing1::laughing1::laughing1:
 
  • #43
Me contaron (Yo no estaba y no la vi) que sobre 1200 €.

Efectivamente Carlos. El precio de partida estaba en 1400 € (que era "negociable").

Una pena que ya me había pasado del presupuesto ::cry::
 
  • #44
GRACIAS A TODOS, por compartir vuestras experiencias, veo que esta travesía la han hecho muchos otros antes qeu yo. Me parece muy interesante la disyuntiva "placer de comprar" y "placer de tener" que tan filosóficamente y con tanta perspicacia ha expuesto el forero RMP, así como varias de las ideas que he leído sobre el hecho de que es una afición en la que se pueden conseguir la mayoría de los objetivos, cosa que no ocurre con los coches o los relojes (tengo alguno que está considerado "barato" que valen más que una Dolce Vita) y eso tiene unas repercusioens difernetes sobre nuestra psique. También la idea de fijar objetivos claros (con lista incluso) a base de aprender y, por supuesto, huir de EBAY, dodne he realizado varias compras últimamente.
Otra idea es la de entrar en el mundo tintas y papel, dodne ya he hecho alguna "descubierta" y me he encontrado con verjurados, diamines J,herbin, etc.

Mi problema es que todo me parece apasionante, y claro, caes en la tentación.

En fin, es un verdadero placer compartir esta parte del foro, a la que reconozco una particularidad cualitativamente distinta a la parte relojera. Un saludo y muchas gracias.
 
  • #45
Bueno ¿Qué pasa con los de Bilbao? Primero Txema y ahora tú. Yo os hacía un poco más recios, pero va y os caen cuatro gotitas de lluvia de na en Madrid :umbrella: y ¡Ale! ya estáis todos para el arrastre ::bxd:: :nea:

Venga ¡Cuidaros que ya queda poco para el próximo Penshow 2013! :laughing1::laughing1::laughing1:
Debe de ser la lluvia radioactiva aivalaos....
 
  • #46
Hola

Yo lo que veo importante es saber diferenciar bien el placer de "comprar" al de "tener".

El acto de comprar una nueva pieza, en este caso estilográficas, pero se puede aplicar a cualquier otro objeto de deseo, es por si sólo muy placentero. La emoción de encontrarla, el impulso a que pase a ser nuestra, el aprovechar oportunidades que nos autoconvecemos de que serán irrepetibles, y ya no digamos si encima se junta el hecho de ganar una subasta, una especie de competición por la compra que tiene doble premio si el precio final nos convence. Todo ello nos resulta tan emocionante y agradable que puede resultarnos casi adictivo y perdemos de vista el objetivo. "Comprarla" es casi tan importante como "tenerla". Según mi opinión esta es la causa de que pasado un tiempo esas adquisiciones pierdan encanto: Ya son todas nuestras, ya no valoramos tanto si la compramos bien de precio y además nos damos cuenta de que no cumplen del todo con nuestras preferencias a la hora de usarlas.

Y vamos al segundo punto, el "tener" cada vez más estilográficas, esa incluso a veces obsesión por acumular, por poseer, si al final todos escribimos con una sola mano. Es la base de toda colección, tener, juntar, recopilar... Otra característica de los que, criados en una época capitalista y que además tenemos la suerte pasar (o haber pasado, tal y como estan las cosas) por esta época especialmente consumista y de bonanza económica, pues hemos aprendido todos involuntariamente y que pocos se salvan de sufrirla: sólo aquellos que son suficientemente fuertes para saber renunciar a todo o los que por ir a contracorriente se autoclasifican de minimalistas.

Bueno, tras este rollo filosófico, creo que hay que despenderse totalmente del primer factor, el del placer de comprar, y aprender a disfrutar del segundo, el tener, buscándole un sentido (como bien alguien ha dicho, dar orientación a la colección, etc) y una total coherencia con nuestras preferencias de uso. De ahí que funcione hacer listas cuando la cabeza está serena y que no tenga mucha garantía de éxito el ir al Pen Show con una visa cargadita y sin ningún objetivo marcado.

Sobre las compras hormiga, si son hormiga de verdad (muy baratitas) tienen cierto sentido, ya que nos dan ambos placeres y aunque muy probablemente sean muy cortos y efímeros, su relación coste-placer puede ser perfectamente asumible (como ir al cine, por ejemplo).

Hay muchos más factores, nuestra situación económica, el cambio de gustos que sufrimos con la edad, el que te guste ahora más la novia del vecino que la tuya, etc, etc pero eso ya... hay que vivir con ello.

Perdonad el tocho, tengo un dia algo reflexivo

Un saludo

Rubèn

Me parece una forma acertadísima de explicarlo... Yo hago mucho eso de transformar el precio de una cosa en coste de otras en el sentido, por ejemplo: una pluma de 40 euros sería como una tarde de cine y cena y los cortados de quince días. Pues puedo vivir sin ello, prefiero la pluma. Y hago el "canje" y tan feliz :)
Suelo hacer eso con casi todo, salvo compras impulsivas, que no hago demasiadas. Por ilusión que ponga en algo, siempre lo hago con el dinero "que sobra", entendiendo por ésto el que no está reservado a gastos obligatorios o posibles imprevistos y, por supuesto, sin que repercuta en los que dependen de mí...
 
  • #48
Bueno ¿Qué pasa con los de Bilbao? Primero Txema y ahora tú. Yo os hacía un poco más recios, pero va y os caen cuatro gotitas de lluvia de na en Madrid :umbrella: y ¡Ale! ya estáis todos para el arrastre ::bxd:: :nea:

Venga ¡Cuidaros que ya queda poco para el próximo Penshow 2013! :laughing1::laughing1::laughing1:


No, no... :laughing1: me refiero a la gripe que cita rmrelojes en este hilo. ¡Que no se diga!
https://relojes-especiales.com/threads/replanteamiento-del-tema-plumeril.254421/

"esto de coleccionar plumas es como una gripe: Tienes que pasar los primeros síntomas, donde compras de todo, cualquier cosa, y luego te curas y ya te haces selectivo"... o algo así era. El caso es que es verdad.
 
Última edición:
  • #49
Comparto muchas de las opiniones manifestadas en el hilo. Pienso que un punto importante de nuestra afición es el disfrutar de las plumas que ya has adquirido y esto puede frenar en cierto grado esa obsesión por estar constantemente comprando. La idea de entrar en el juego de tintas y papeles es muy buena, yo ya la he puesto en prática, pero cuidado que también se puede volver compulsiva.

En cualquier caso, ¡¡que bien se lo pasa uno en este mundillo!! :).

Saludos.
 
  • #50
De todos modos, no tenemos que obsesionarnos. Yo no sólo tengo de capricho las plumas...me encantan las bicis, y eso si que es un desfase...ahí me corto un poco más porque los precios son otro mundo y encima hay que llevar material acorde a tu nivel para no hacer el ridículo...si aquí te martirizarías por comprar 20 plumas de 200 euros cada una en un año...¿Qué haces cuando en unas llantas de bici te gastas 3000 euros? O cuando compras una chupilla suiza para el frio de 500 euros...por no hablar de sillines de 400 euros o cuadros de 6000...y donde una buena yaya de mtb te puede costar 3000 euros...No nos flagelemos que los plumíferos somos de lo más inofensivo monetariamente hablando.
 
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