Joe Satriani de heavy no tiene nada de nada. Y eso que me gusta pero tampoco me fascina.
Andy Timmons sí que es el rey.
Joe Satriani, noche 'heavy' en el Palau
- • El guitarrista exhibió virtuosismo y rapidez dactilar en el bautismo metálico de la sala modernista
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</dt><dd> Joe Satriani.</dd></dl>
JORDI BIANCIOTTO
BARCELONA
Las musas del Palau, desde su altura centenaria, creían que lo habían visto todo, ¿verdad? Pues no. Les faltaba un rito metálico que pusiera a prueba esa delicada caja de vidrio. De acuerdo, Joe Satriani no es Napalm Death, pero su guitarra fue, el martes por la noche, lo más
heavy nunca oído en la sala modernista. Su rock filometálico gozó, eso sí, de una sonoridad exquisita, para deleite de unos fans que, al menos en Barcelona, nunca habían visto y oído al neoyorquino en condiciones tan selectas.
Satriani se hizo esperar, porque, a última hora, se sumó al programa un grupo telonero, Bazaar, barcelonés, que ofreció un menú de esencias mediterráneas orientalistas con bailarina incluida. Y, por fin, el
guitar heroe irrumpió al grito de
I just wanna rock, pieza del reciente
Professor Satchafunkilus and the musterion of rock. A partir de ahí, un guión prefijado de digitaciones vertiginosas, escalas, juegos de pedales y canciones instrumentales diseñadas como colchones sobre los que desplegar virtuosismo. Con Joe Satriani, el medio, la guitarra, es el mensaje.
Dominó un registro de hard rock corpulento (
Super colossal) y metal acelerado, a veces cercano al
speed (
Satch boogie), con líneas melódicas que pronto se desdibujaban para abrir paso al solo desbocado. Hubo desvíos funky y una licencia exótica en
Andalusia, con palmas y una guitarra acústica a cargo del abnegado Galen Henson (desde aquí, un homenaje: ser guitarrista del grupo de Satriani debe de ser una de las profesiones más aburridas del mundo). Entre
tours de force como
Time machine y
Surfing with the alien, Satriani alcanzó un clímax compartido con las 2.000 personas que llenaron el Palau. Aparatoso bautismo metálico.
HEAVY METAL
¡Bienvenido Joe Satriani!
Virtuosismo es el que tienen los dedos que hacen magia con la guitarra a altas velocidades. Para los amantes de la música, esa palabra tiene nombre propio: Joe Satriani.
Sus creaciones les gustan a unos pocos fanáticos del jazz, a otros cuantos aficionados al rock y, sin duda, Satriani es referencia obligatoria para los seguidores del heavy metal progresivo.
HEAVY METAL
Joe Satriani en HEAVY METAL
Que se puede decir del mago de la guitarra, que no se haya dicho ya... Quien no lo conoce, este Sr. virtuoso de la guitarra, es uno de esos músico de los cuales sencillamente sin él, el rock simplemente no seria igual. Después de su aparición por el 86, revolucionaria el mundo de la guitarra tal y como se le conocía. Satriani es un guitarrista dotado de una gran sensibilidad, técnica y facultades extraordinarias, maestro de muchos de los mejores guitarristas del mundo metálico actual, como Steve Vai, Kirk Hammett (Metallica), Marty Friedman (Megadeth) o Alex Skolnick (Testament). Cuando escribe sus canciones, hace gala de una inmensa cultura musical, sabe adaptar todo lo que sabe, influencias tanto musicales como personales y los conjuga con sus sentimientos más profundos, nacidos desde el fondo de su alma, eso y el ensamble entre la técnica y el feeling que Satriani solo sabe hacer es quizá una de las claves de su éxito.
Su primer gran disco fue “Surfing with the Alien”. Es imposible negar sentir ese ritmo pegajoso que Satriani solo sabe hacer; podría decir que embruja con su música, porque parece que tiene la facultad de hacer hablar a la guitarra y además tiene la facilidad de penetrar a lo mas profundo de tu ser y hacerte vibrar. Desde ese entonces es uno de los mejores guitarristas del planeta y la verdad hoy por hoy así lo sigo considerando. “Flying In A Blue Dream” su tercer trabajo, fascino a medio mundo con temas como One Big Rush, la mágica Flying In A Blue Dream o la hermosa I Believe, hablan por si mismas.
Otro disco que merece el honor de mencionarse (aunque todos son dignos de mención), fue el sorprendente “The Extremist” que prácticamente despedazo a todos los guitarristas de ese entonces con sus fabulosos punteos y grandes composiciones, ningún otro guitarrista llegaría a compararse con ese disco, que incluso fue nominado como el mejor disco instrumental de ese entonces, llevándose infinidad de premios por parte de la critica. Actualmente sus discos siguen impresionando a todo tipo de gente y se ha consolidado como toda una figura de la guitarra de nuestra era. Definitivamente maestro de maestros. Altamente recomendado.