miguelfr
De la casa
Sin verificar
El famoso tic-tac
Hace unos meses me regalaron un despertador mecánico que acepté sin que me hiciera mucha ilusión.
Empece a desmontarlo, abrirlo, aprendí cosas y lo arreglé, luego el cariño que le cogí me llevó a comprar otro similar en una subasta que gane por sorpresa , ya son dos y otro que posiblemente venga pronto.
El caso es que es muy agradecido meter mano a estos calibres grandes, pues no te dejas los ojos y aprendes..lo mismo que en los de pulsera pero con la ventaja del tamaño.
Lo que no sabia es que me iban a llenar la habitación de ruido, no me molesta nada, es más, me recuerda a la infancia, tic tac tic tac tic ..el sonido inunda la habitación, siempre que no pase el de la moto de turno, o que los vecinos empiecen a tirarse los cubiertos.
Y ahora unas fotos de los "niños cantores"
Cuando los escucho pienso en lo pequeñita que es la pieza que choca para producir ese ruido y no puedo dejar de asombrarme, tanto por la resistencia que tiene ( años y años golpeando) como por el volumen de ruido que llega producir cuando la casa está en silencio.
Hace unos meses me regalaron un despertador mecánico que acepté sin que me hiciera mucha ilusión.
Empece a desmontarlo, abrirlo, aprendí cosas y lo arreglé, luego el cariño que le cogí me llevó a comprar otro similar en una subasta que gane por sorpresa , ya son dos y otro que posiblemente venga pronto.
El caso es que es muy agradecido meter mano a estos calibres grandes, pues no te dejas los ojos y aprendes..lo mismo que en los de pulsera pero con la ventaja del tamaño.
Lo que no sabia es que me iban a llenar la habitación de ruido, no me molesta nada, es más, me recuerda a la infancia, tic tac tic tac tic ..el sonido inunda la habitación, siempre que no pase el de la moto de turno, o que los vecinos empiecen a tirarse los cubiertos.
Y ahora unas fotos de los "niños cantores"
Cuando los escucho pienso en lo pequeñita que es la pieza que choca para producir ese ruido y no puedo dejar de asombrarme, tanto por la resistencia que tiene ( años y años golpeando) como por el volumen de ruido que llega producir cuando la casa está en silencio.