Pues me parece una muy buen pregunta, será un hilo interesante.
Voy a dar mi opinión, lo más justificada posible.
Para mí, reediciones sí.
Si nos damos cuenta, es uno de los pocos mercados que conozco que puedes adquirir un mismo modelo durante un periodo muy extendido de tiempo, a veces veinte o treinta años. Eso para mí es una ventaja buenísima, que no tenemos ni siquiera en los coches, que cambian de modelo antes; por supuesto ni en ropa ni en tecnología, donde si quieres un modelo que te gusta, o lo compras en esta temporada o ya no tienes acceso a él.
Por otra parte, hablamos de un producto muy poco perecedero. Un reloj de los años 70 puede funcionar sin problema desde hoy hasta otros veinte años más, por ejemplo. Eso tampoco lo tenemos en otros productos. Y sigo, existe un mercado de freakis que venden relojes antiguos y es relativamente fácil optar a un modelo descatalogado si nos interesa, también cualidad de este coleccionismo. Con todo esto podríamos decir "reediciones no".
Y ahora viene el "pero". A mí, por ejemplo, me gusta estrenar. Tengo muchos relojes comprados en el FCV en muy buen estado, pero no soy de comprar vintages. Me gusta que, salvo alguna marca de uso, tenga la sensación de comprar un reloj nuevo. Por otra parte, discrepo en que "cualquier tiempo pasado fue mejor" y pienso que la ciencia avanza a diario. Ahora los materiales son mejores y la tecnología más depurada. Un vintage puede ser muy duradero, pero seguro que muchos relojes fabricados ahora hAn corregido "carencias" que hace treinta años teníamos. Seguro que muchos discrepan, pero es mi forma de verlo. Con eso, si puedo optar a una estética que me tiene fascinado y puedo obtenerlo con materiales y calidades de este siglo, seré un posible comprador de una reedición.
Yo, por ejemplo, tengo uno en el que me sobra el plexiglás. Creo que a día de hoy no tiene sentido no ponerle zafiro, sólo por una cuestión romántica. Me encanta que lleve los logos antiguos, el tamaño antiguo, la estética en general pero creo que debería actualizar sus materiales.
Es una opinión como otra cualquiera, porque insisto, el hillo promete.