joler
De la casa
Sin verificar
NOTA: Las fotos tardarán unos minutos en estar disponibles.
Hace un tiempo que no pasaba por este agradable rincón y es que, la promiscuidad relojera me ha llevado a flirtear con otras facetas de nuestra afición llegando incluso, en un arrebato de locura, a comprarme unos relojes made in china nuevecitos y relucientes
Recuperada ya la "normalidad" quiero presentaros un modesto reloj cuya principal virtud es albergar en su interior un poco conocido calibre alemán.
Se trata de un Olora que porta un movimiento Henzi & Pfaff Pforzheim (HPP): manufactura alemana con sede en Pforzheim que fabricó bajo diversas marcas siendo la más conocida Hércules.
Fundada originalmente como Pfaff en los años 20 se dedicó incialmente a ensamblar ebauches suizos hasta que, tras la Segunda Guerra Mundial, la asociación con Robert Henzi dio como fruto la compra de maquinaria Suiza culminando con el desarrollo de un calibre propio en el año 1948.
La época dorada de HPP fueron los años 50 con un importante incremento de las exportaciones sobre todo a USA donde en el año 1957 ya había vendido un millón de piezas bajo sus diferentes marcas: Hércules, HPP, Orfa, HF, Nixe, Sirena y quizás el propio Olora que aquí se muestra.
En 1950 se construyó el primer calibre automático y en 1953 fue el reloj que llevaron los montañeros de la primera expedición que coronó el Nanga Parbar, un ochomil conocido como "la montaña asesina".
Este hecho tuvo un importante efecto publicitario ya que permitió presentar a los relojes Hércules, que contaban con un sistema de protección contra golpes de diseño propio, como especialmente resistentes en situaciones extremas.
A partir de los años 60 la empresa, como muchas otras, entró en declive cerrando finalmente en el año 72.
La pieza que ilustra el hilo es un precioso Olora de 35 milímetros de diámetro sin contar la corona, carga manual y segundero central que late a 1800 alternancias con una reserva de marcha de 34 horas.
El rasgo más característico del movimiento HPP 126 es el puente sobreelevado que alberga la transmisión del segundero central.
Además cuenta con un inusual número de rubíes (21 en total) con contrapiedras repartidas a discrección.
Estéticamente destaca el diseño del dial en tonos crema y gris-azulado que, desgraciadamente, no he sido capaz de captar en todo su esplendor.
Espero que hayáis disfrutado tanto leyendo como yo escribiendo.
Los comentarios y correcciones serán bienvenidos.
Un saludo.
Hace un tiempo que no pasaba por este agradable rincón y es que, la promiscuidad relojera me ha llevado a flirtear con otras facetas de nuestra afición llegando incluso, en un arrebato de locura, a comprarme unos relojes made in china nuevecitos y relucientes
Recuperada ya la "normalidad" quiero presentaros un modesto reloj cuya principal virtud es albergar en su interior un poco conocido calibre alemán.
Se trata de un Olora que porta un movimiento Henzi & Pfaff Pforzheim (HPP): manufactura alemana con sede en Pforzheim que fabricó bajo diversas marcas siendo la más conocida Hércules.
Fundada originalmente como Pfaff en los años 20 se dedicó incialmente a ensamblar ebauches suizos hasta que, tras la Segunda Guerra Mundial, la asociación con Robert Henzi dio como fruto la compra de maquinaria Suiza culminando con el desarrollo de un calibre propio en el año 1948.
La época dorada de HPP fueron los años 50 con un importante incremento de las exportaciones sobre todo a USA donde en el año 1957 ya había vendido un millón de piezas bajo sus diferentes marcas: Hércules, HPP, Orfa, HF, Nixe, Sirena y quizás el propio Olora que aquí se muestra.
En 1950 se construyó el primer calibre automático y en 1953 fue el reloj que llevaron los montañeros de la primera expedición que coronó el Nanga Parbar, un ochomil conocido como "la montaña asesina".
Este hecho tuvo un importante efecto publicitario ya que permitió presentar a los relojes Hércules, que contaban con un sistema de protección contra golpes de diseño propio, como especialmente resistentes en situaciones extremas.
A partir de los años 60 la empresa, como muchas otras, entró en declive cerrando finalmente en el año 72.
La pieza que ilustra el hilo es un precioso Olora de 35 milímetros de diámetro sin contar la corona, carga manual y segundero central que late a 1800 alternancias con una reserva de marcha de 34 horas.
El rasgo más característico del movimiento HPP 126 es el puente sobreelevado que alberga la transmisión del segundero central.
Además cuenta con un inusual número de rubíes (21 en total) con contrapiedras repartidas a discrección.
Estéticamente destaca el diseño del dial en tonos crema y gris-azulado que, desgraciadamente, no he sido capaz de captar en todo su esplendor.
Espero que hayáis disfrutado tanto leyendo como yo escribiendo.
Los comentarios y correcciones serán bienvenidos.
Un saludo.
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