Pues vamos a ello. Yo es que salgo huyendo de la literatura tipo best-seller, así que lo mismo mis recomendaciones os resultan un poco "fuera de lo habitual", pero tampoco es para tanto.
Primero los de fuera:
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Hijos de la medianoche y
El último suspiro del moro, de Salman Rushdie. Ya se que tira para atrás leer algo de Rushdie con toda la historia de los Versos Satánicos (que tengo pendiente), pero en cuanto cajáis un libro de él, no vais a parar hasta llegar al final. Es ub maestro, uno de los pocos maestros de verdad actuales. Envueltos en algo de realismo mágico, con sentido del humor y dominio cien por cien del lenguaje, mezcla historias de generaciones enteras en las que no hay ningún desperdicio. Ambos libros son excelentes. El primero es quizás el más famoso, pero hay que leer los dos. Sin excusas.
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La mancha humana y
Pastoral americana. Sigo de dos en dos. Si hay otro maestro a la altura de Rushdie es Phillip Roth. Tiene una serie de libros que son obras maestras, y los dos que cito son una muestra perfecta. La mancha humana relata la historia de un profesor universitario envuelto en una absurda acusación de racismo y e3xpulsado de la universidad... cuando él mismo encarna una peculiar historia que no voy a desvelar. Pastoral americana trata de una perfecta familia americana, en la que al hurgar un poco resulta que hay un trasfondo realmente duro y nada perfecto. Una obra dura, porque la realidad no es siempre complaciente.
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Desgracia. J.M.Coetzee. A Coetzee le diero en premio Noble, y leyendo este libro uno comprende el porqué. Lo malo es que yo seguí leyendo otros del mismo qutor, y qunque buenos también, no le llegan a la altura. Un profesor universitario tiene un lío con una alumna, y al tener que dejar la universidad, se va a casa de su hija, en Sudáfrica, donde la sombra del apartheid sigue revoloteando por todos los rincones. También es una novela dura. También es una novela perfecta.
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Chesil Beach, de Ian McEwan. Novelita breve, al principio parece algo intranscendente y ligero, pero que según avanza primero te partes de risa con la situación creada, y luego te estremece por los problemas que crea la incomunicación, los tópicos, la aparente necesidad de estar a la altura de las circunstancias cuando lo que prima son las circunstancias personales. Al final queda la melancolía, y el sentimiento de pensar "pero habría sido tan fácil hacerlo de otra forma...".
Ahora algunos de aquí:
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La saga/fuga de J.B., de Gonzalo Torrente Ballester. Poco valorado y conocido en vida, esta es una de las grandes novelas españolas de todos los tiempos. Se supone que en españa no gusta la novela fantástica, o eso es lo que nos han hecho creer siempre. Pues esta novela etá a la altura de las mejores del realismo mágico hispanoamericano, y sin exagerar no tiene nada que envidiar a "Cien años de soledad". Una ciudad que levita cuando se ensimisma, una saga de varios J.B, un lenguaje inventado que varía en significado según se agrupan o separanb las sílabas, experimentación de cómo escribir una novela. A Torrente Ballester le dijeron que ya estaba acabado, y como respuesta escribió esta monumental obra, que ya era clásica antes de poner el punto final. No os defraudará.
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Sefarad, y
La noche de los tiempos. Antonio Muñoz Molina. Otras dos del mismo escritor. Para mi gusto (totalmente personal), hay tres escritores españoles que perdurarán en el tiempo: Javier Marías, Eduardo Mendoza y Antonio Muñoz Molina. Sefarad es una novela hecha de episodios sobre culturas e individuos perseguidos por diversos motivos. La noche de los tiempos es una magistral novela que aguanta las casi mil páginas (sí, un tocho) sin perder intensidad, gracias al genial estilo del autor. También hay otras novelas más breves en las que iniciarse con Muñoz Molina con igual calidad: "El invierno en Lisboa", "En ausencia de Blanca" (novela breve y redonda), "Beltenebros" o su más famosa novela "El jinete polaco" (que aún tengo pendiente).
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Mañana en la batalla piensa en mí, de Javier Marías. Tengo que decir que este autor puede entusiasmar o hechar para atrás, sin términos medios. Domina la escritura como ningún otro, pero tiene un estilo no muy común entre los escritores españoles, que yo calificaría de "proustiano": largas frases, con muchos meandros y desviaciones, con muchas entradas y salidas hasta llegar al punto final. Una pareja de amantes: ella fallece poco después de hacer el amor, y su pareja debe decidir qué hacer antes de que vuelva el marido. No es una novela de enredo, ni mucho menos. Las novelas de Javier Marías suelen ser a partes iguales una fiesta del lenguaje y un ensayo sobre algún aspecto del ser humano.
(Me parece que me estoy enrollando demasiado, lo siento).
- los libros imprescindibles de Eduardo Mendoza: "
La verdad sobre el caso Savolta" y "
La ciudad de los prodigios". De Eduardo Mendoza siempre se dice que tiene dos tipos de libros: los de literatura con mayúsculas, y los ligeros y graciosos. Estos son de los primeros, los mejores, los imprescindibles. Con el primero entró directamente en el círculo de los grandes escritores españoles; con el segundo cerró la puerta.
Y para acabar, y cambiando de tercio, tres libros de ciencia ficción, para los que os guste el género, o bien simplemente para los que os guste leer buenos libros. Están suficientemente bien escritos como para entrar directamente en la categoría de literatura, sin apellidos ni etiquetas
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Solaris, de Stanislaw Lem. El escritor polaco podría adscribirse a autor de ciencia ficción, de sátira, de novela filosófica... Lo importante en él no es tanto el formato de su escritura, sino el significado de lo que escribe. En Solaris muestra uno de sus grandes temas: la incapacidad de la comunicación entre los seres, aunque estos seres no sean necesariamente humanos. Novela preciosa y triste, destrozada al llevarla al cine. Admite varias relecturas sin perder nada de su interés. (¿no la habéis leído todavía? ¿a qué esperáis???
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Hyperión, de Dan Simmons. Clásico de la ciencia ficción (aunque sea moderno). Siete peregrinos viajan hasta la apertura de las tumbas del tiempo, y en su camino cada uno narra su historia. Sigue la estructura de los Cuentos de Canterbury, aunque la novela en concreto (y la serie en general) es deudora de la obra del poeta John Keats. Aunque es la mejor, no hay que dejar de leer las novelas que forman el ciclo: "La caída de Hyperión", "Endimion" y "El ascenso de Endimion".
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Diáspora, de Greg Egan. Autor de culto (de mi culto particular, al menos). Literatura de ciencia ficción "dura", muy científica y tecnológica. Este autor no duda en emplear argumentos basados en la relatividad, la cuántica o cualquiera de las teorías actuales de la física moderna. En el futuro, la humanidad se ha dividido en dos grandes ramas: los que aún se basan en la biología (más o menos como nosotros), y los que se fundamentan en procesos computacionales (programas informáticos). El primer capítulo relata la venida al mundo de una inteligencia artificial nacida espontáneamente, desde sus primeros brotes, hasta que recibe el reconocimiento de consciente de sí misma, y digna de no ser borrada. Es una maravilla de libro, este autor australiano es digno de tener mucho más reconocimiento del que disfruta actualmente.
Gracias si habéis aguantado leer hasta aquí, y espero que alguna de mis recomendaciones sea de vuestro agrado. Para mí todos han sido libros que me han marcado muy favorablemente, y foemarían parte de cualquier biblioteca itinerante que formara allá donde fuese.
Un saludo.