Tiber
Forer@ Senior
Sin verificar
En esto de la restauración de relojes hay diversas escuelas. La escuela ortodoxa mantinene que la restauración debe llevar el reloj al punto más cercano a su estado original. Pero hay otras escuelas. Hay una escuela aragonesa (con muy pocos miembros, casi una secta), que propugna que no, que la restauración consiste mejorar todo lo posible el estado original del reloj. Aquí presento un caso práctico.
El reloj que se operó era un Schatz Royal Mariner Ship's Bell, un clásico de la relojería (la relojería está llena de clásicos). El estado inicial exterior era directamente lamentable, como si hubiera estado 50 años en un barco encallado en la playa:
El estado interior era para nota. El anticuario al que se lo compré decía escuetamente:
"THE TIMEPIECE IS IN WORKING ORDER BUT THE BELLS WILL NEED ATTENTION"
En mi escaso inglés yo entendí que la parte de tiempo funcionaba, y que la sonería necesitaba algo de atención. Este era el interior:
Visto el panorama, pensé que lo de "working order" igual era en sentido literal, y significaba que estaba listo para ponerse a trabajar. Se cumplió una vieja ley de la relojería, "es un suceso de probabilidad casi cero, encontrar un reloj no nuevo, al que no le haya alguien metido mano". El Caso que nos ocupa era para nota. Hace falta una buena dosis de incompetencia, ignorancia, mala leche o lo que sea......para montar un reloj con las piezas que lleva y no ponerle las tapas de los barriletes. ¡qué tranquilo se quedó el que fuera¡. Misteriosamente, todas las demás piezas estaban.
Y después de un largo, arduo y entretenido proceso este fué el resultado final:
En definitiva, un reloj especial especialmente indicado para los que tienen barco o para los no lo tienen pero se quieren hacer una idea......
Nota final: mi participación en este proyecto va desde conseguir el pecio hasta su desmontaje. La restauración heterodoxa es de otro miembro del grupo.
El reloj que se operó era un Schatz Royal Mariner Ship's Bell, un clásico de la relojería (la relojería está llena de clásicos). El estado inicial exterior era directamente lamentable, como si hubiera estado 50 años en un barco encallado en la playa:
El estado interior era para nota. El anticuario al que se lo compré decía escuetamente:
"THE TIMEPIECE IS IN WORKING ORDER BUT THE BELLS WILL NEED ATTENTION"
En mi escaso inglés yo entendí que la parte de tiempo funcionaba, y que la sonería necesitaba algo de atención. Este era el interior:
Visto el panorama, pensé que lo de "working order" igual era en sentido literal, y significaba que estaba listo para ponerse a trabajar. Se cumplió una vieja ley de la relojería, "es un suceso de probabilidad casi cero, encontrar un reloj no nuevo, al que no le haya alguien metido mano". El Caso que nos ocupa era para nota. Hace falta una buena dosis de incompetencia, ignorancia, mala leche o lo que sea......para montar un reloj con las piezas que lleva y no ponerle las tapas de los barriletes. ¡qué tranquilo se quedó el que fuera¡. Misteriosamente, todas las demás piezas estaban.
Y después de un largo, arduo y entretenido proceso este fué el resultado final:
En definitiva, un reloj especial especialmente indicado para los que tienen barco o para los no lo tienen pero se quieren hacer una idea......
Nota final: mi participación en este proyecto va desde conseguir el pecio hasta su desmontaje. La restauración heterodoxa es de otro miembro del grupo.