Voy a explicar cómo fue la historia, ya que yo mismo fui el primer sorprendido.
Yo tocaba en un grupo local de Barna que formamos con mis colegas (guitarra solista), y muy influenciado por el hermano mayor de uno de mis mejores amigos (que ahora es astrofísico). Su hermano era Albert Pont, guitarra de Tigres de Metal, y posteriormente de Manzano, etc., y que hoy en día se sigue ganando la vida con la música. Él me dio mis mejores clases de guitarreo, pero lo que me tenía hipnotizado era su Frankenstrat, que se había hecho él mismo. Y sobre todo cómo la tocaba...
A mis tiernos 18 años me embarqué en una aventura personal: me fui a los USA para estudiar y trabajar, con un contrato de trabajo que conseguí ya desde aquí, pero con lo puesto (en casa no había ni un duro). El programa de trabajo era para dos años y debía recorrer varios estados. En esa época yo iba "heavy metal full equip" (greñas hasta la cintura, tejanos elásticos, buano, ya me entendéis). Naturalmente quería aprovechar para vivir al máximo la escena heavy del momento en todas sus variantes (yo venía de la escuela clásica del hard rock, AC/DC son mis dioses intocables, pero me había metido de lleno en el thrash). Así que intentaba informarme de cualquier sitio en donde hubiera una actuación o un concierto, nada fácil teniendo en cuenta que hablamos de la era pre-internet i pre-móvil. Pero los carteles y las radios funcionaban, y en los '80 el rock mandaba en las ondas.
Así fue como me enteré que en Mayo se iba a celebrar el US Festival en San Bernardino (California) con un montón de bandas, entre ellas Van Halen (ojo al dato, el artífice del festival era nada más y nada menos que Steve Wozniak, el de Apple... !!!). Con un colega heviata que hice allí nos metimos en el coche (en ese mes yo estaba en Reno, a casi 500 millas) y para allá que nos fuimos a disfrutar de tres días de locura. El montaje era sencillamente brutal (aunque yo ya había ido a los tres primeros Monsters of Rock de Donington, que tampoco era moco de pavo) y aunque el festival no era exclusivamente de rock, uno de los días fue nombrado como "Heavy Metal Day", y pesar de que también estaba Ozzy los cabezas de cartel eran Van Halen. La MTV estaba en su momento álgido y había cámaras entrevistando al público... cuando de pronto se ve llegar un helicóptero: eran Van Halen!!
Y entonces se produjo un hecho que aún hoy me parece increíble: la cámara se dirige hacia nosotros, le preguntan a mi colega, me preguntan a mi... y se dan cuenta de que no soy de allí. De pronto me ponen una cinta al cuello y me llevan a otra parte: estaban juntando a gente que no era de USA para ir al backstage. Allí nos reunieron a unos 20 (recuerdo un par de japoneses, un finlandés enorme, una italiana vestida de pija, etc... y este feo que escribe). Yo no me lo podía creer... nos llevaron al backstage y allí estaban esas 4 estrellas, que sólo conocía por fotos y vídeos, y empezaron a hablar con nosotros. Entre que mi inglés era el que era y que llevaba una chupa con unos parches de grupos que ellos ni conocían, Eddie nos llevó al finlandés y a mi aparte y charlamos unos minutos. Yo estaba un poco en shock, pero atiné a hablarle de mi colega guitarrista y que se había hecho una Frankenstrat... y le pide a un roadie que se la traiga. Ese fue el momento soñado: me colgué la Frankenstrat original con Eddie a mi lado!!! Lástima que en aquella época no había moviles con cámaras ni nada, pero lo recuerdo como si fuera ahora. Después nos dejaron estar en las primeras filas, algo que agradeció mi colega tras el cabreo por no ser escogido para el backstage...
En esa estancia de dos años disfruté de varias vivencias de la escena musical, porque eran otros tiempos, sin tanto control ni tanta chorrada. Incluso vi a los Ramones en el extinto CBGB neoyorquino, en una noche que terminó en una espiral alcohólica desenfrenada...
En fin, perdón por la muralla china.