rafagil
De la casa
Sin verificar
Escribiré esto a la vista de las peticiones de tasación que podemos encontrar a diario en el foro.
Es norma del foro no tasar relojes. Cuando llegué aquí me pareció una norma bastante molesta. Supongo que como todo el mundo que empieza en una afición entendía que lo primario, lo básico, era saber medianamente qué precios eran los adecuados a cada pieza que me interesaba.
Con el tiempo empecé a ver que, como escribí hace poco en otro post, en un reloj todo se valora. La marca, el modelo, el calibre (o máquina), la rareza, la antigüedad, el estado de conservación, si funciona o no, si está limpio o si requiere limpieza...
Y hay cosas como la simple presentación del reloj que hacen que acabe costando más o menos, independientemente de todos los demás factores por sí mismos.
Pondré un ejemplo. Hay un modelo de Bulova que me interesa y que ando siguiendo desde hace tiempo. Normalmente ese modelo, muy coqueto él, suele ser expuesto con unas buenas fotos, resplandeciente, con la máquina brillando inmaculada. Suele costar entre 150 y 250 euros.
El otro día vi en una conocida página de compraventa (sí, sí, en Ebay) que se vendía uno expuesto con fotos mal enfocadas, mal iluminado, sin correa, sin datos demasiado precisos, pero en buen estado y funcionando. No alcanzó los 40 euros.
¿Qué tasación es la correcta, la de 40, la de 150 o la de 250 euros?
Hay cosas nuevas cuyo precio viene marcado por el fabricante, pero en las demás el asunto depende de la ley de la oferta y la demanda, de la capacidad del vendedor para venderlo y la del comprador para regatearlo.
En las cosas de segunda mano, relojes incluidos, no hay norma que valga. Tasar a alguien un reloj es prácticamente el modo más seguro de ganarse un buen enemigo.
Es norma del foro no tasar relojes. Cuando llegué aquí me pareció una norma bastante molesta. Supongo que como todo el mundo que empieza en una afición entendía que lo primario, lo básico, era saber medianamente qué precios eran los adecuados a cada pieza que me interesaba.
Con el tiempo empecé a ver que, como escribí hace poco en otro post, en un reloj todo se valora. La marca, el modelo, el calibre (o máquina), la rareza, la antigüedad, el estado de conservación, si funciona o no, si está limpio o si requiere limpieza...
Y hay cosas como la simple presentación del reloj que hacen que acabe costando más o menos, independientemente de todos los demás factores por sí mismos.
Pondré un ejemplo. Hay un modelo de Bulova que me interesa y que ando siguiendo desde hace tiempo. Normalmente ese modelo, muy coqueto él, suele ser expuesto con unas buenas fotos, resplandeciente, con la máquina brillando inmaculada. Suele costar entre 150 y 250 euros.
El otro día vi en una conocida página de compraventa (sí, sí, en Ebay) que se vendía uno expuesto con fotos mal enfocadas, mal iluminado, sin correa, sin datos demasiado precisos, pero en buen estado y funcionando. No alcanzó los 40 euros.
¿Qué tasación es la correcta, la de 40, la de 150 o la de 250 euros?
Hay cosas nuevas cuyo precio viene marcado por el fabricante, pero en las demás el asunto depende de la ley de la oferta y la demanda, de la capacidad del vendedor para venderlo y la del comprador para regatearlo.
En las cosas de segunda mano, relojes incluidos, no hay norma que valga. Tasar a alguien un reloj es prácticamente el modo más seguro de ganarse un buen enemigo.