Antolin
Habitual
Sin verificar
En uno de los primeros posts que hice os preguntaba por una pluma que rebuscando por los cajones había encontrado, una Ambassador que tiene un plumín muy afiligranado con el texto "Iridium Point". Podéis verlo aquí.
Pues bien, estando ayer en casa de un amigo me enseña una colección de plumas, unas 15 o 20, todas con el mismo plumín de acero, todas con la inscripción "iridium point" y con diferentes cuerpos. El aspecto no era muy bueno y los plumines eran muy parecidos al mio. Por lo que me dijo procedían de una colección de kiosko o algo así.
La sensación era parecida a los regalos promocionales, que a partir de un modelo base, de muy baja calidad, lo "decoran" a gusto de cada empresa. Lógicamente el diseño es pretencioso, imitando algunas de las plumas serias. Desconocía esto, y me pregunto si con el poco interés de la mayoría de la sociedad , no ya en las plumas, sino en la escritura a mano, tiene sentido ese mercado de sucedáneos incluso para (como decía un famoso humorista) las "gilipolleces del coleccionista".
Este tipo de coleccionismo cuya finalidad es el propio coleccionismo en sí, sin importar los objetos que lo integran, al menos quiere decir que para mucha gente una pluma se asocia a un objeto de valor, lamentablemente separado de su función utilitaria.
¿Pensáis que esto puede ser positivo o no?
Pues bien, estando ayer en casa de un amigo me enseña una colección de plumas, unas 15 o 20, todas con el mismo plumín de acero, todas con la inscripción "iridium point" y con diferentes cuerpos. El aspecto no era muy bueno y los plumines eran muy parecidos al mio. Por lo que me dijo procedían de una colección de kiosko o algo así.
La sensación era parecida a los regalos promocionales, que a partir de un modelo base, de muy baja calidad, lo "decoran" a gusto de cada empresa. Lógicamente el diseño es pretencioso, imitando algunas de las plumas serias. Desconocía esto, y me pregunto si con el poco interés de la mayoría de la sociedad , no ya en las plumas, sino en la escritura a mano, tiene sentido ese mercado de sucedáneos incluso para (como decía un famoso humorista) las "gilipolleces del coleccionista".
Este tipo de coleccionismo cuya finalidad es el propio coleccionismo en sí, sin importar los objetos que lo integran, al menos quiere decir que para mucha gente una pluma se asocia a un objeto de valor, lamentablemente separado de su función utilitaria.
¿Pensáis que esto puede ser positivo o no?
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