Dr. Strange... Agradable sorpresa
Buenas a todos. Ayer hice una escapa al cine a ver la última superproducción de Marvel, Dr. Strange, película que tengo que reconocer me daba un poco de miedo tras ver los primeros trailers que aparecieron, pero las críticas de usuarios y prensa especializada me animaron a darle una oportunidad.
La verdad es que se me hizo corta, desde mi punto de vista siguen manteniendo el listón alto, consiguen meterte en su mundo y querer saber más del personaje, entretenida, muchos toques de humor, acción a raudales, escenas asombrosas con unos efectos al más puro estilo Origen que te suben a una montaña rusa de la que sales con la boca abierta, y un Benedict Cumberbatch que sigue bordando sus papeles. Creo que a los que les gusta este género no se sentirán defraudados.
Pero a lo que iba... el film nos deja además un regalito a todos los amantes del mundo relojil, que aparece a los pocos minutos del comienzo y que nos acompaña a lo largo de la película, protagonizando algunas breves pero emotivas escenas.
Creo que no me meto en spoilers... Muchos sabréis que el personaje de Benedict Cumberbatch, antes de pasar por su particular trance hasta convertirse en el Dr. Strange de capa, perilla, lanzador de hechizos... es un afamado cirujano, con un alto tren de vida y, si me permitis, muy buen gusto.
Y es que...
así se me quedó la cara, mientras la apretaba la mano a mi MDD, cuando observo al personaje que, mientras se prepara para acudir a un evento, abre un cajón, y me encuentro con una colección de relojes montados en sus watch winders... la escena es rápida, y no me dio tiempo a ver de qué modelos se trataban (a ver si pronto podemos conseguir alguna screen...) Pero lo que sí se ve claramente, es como el Doctor elige entre todos un reloj, un precioso Jaeger LeCoultre Master ultra thin perpetual
Da gusto encontrarse con estas perlas en el cine. Espero que también la hayáis disfrutado los que la hayáis visto.