joler
De la casa
Sin verificar
NOTA: las fotos tardarán unos minutos en estar disponibles.
Como aficionados a los relojes la mayoría de nosostros tenemos automáticos, cuarzos, manuales, pulsera. bolsillo...
Sin embargo, no es tan habitual tener un reloj de sol que además funcione y, menos aún que podamos construirlo nosotros mismos.
Lo más sencillo es construir un reloj de pared vertical meridional.
El cuadrante es simétrico y el gnomon (palito que hace de aguja) está sobre el mediodía.
El problema de este tipo de reloj es que , para que sea realmente operativo y no sólo tenga una finalidad decorativa debe estar necesariamente ubicado en una pared que esté orientada al sur.
Si nuestra vivienda carece de una pared, terraza o balcón orientado al sur el reloj sólo valdrá para decorar.
Si lo que queremos es ubicar el reloj en una pared concreta el diseño se hace algo más complejo pero a cambio el reloj será plenamente operativo. Es lo que se llama reloj de sol vertical declinante.
Para ello necesitamos calcular tres datos referentes al lugar donde se instalará el reloj: longitud, latitud y declinación. Aunque esta operación puede solventarse con el nivel de matemáticas de bachillerato, afortunadamente hay varios sitios en Internet que hacen el cálculo por nosotros e incluso nos facilitan un diseño del reloj en formato PDF.
Una vez impreso el PDF, sólo tenemos que doblarlo como indican las instrucciones obteniendo un triángulo que hará de gnomon e irá marcando las horas al proyectar su sombra.
En este caso el cuadrante no es simétrico y será diferente en función de la pared donde se vaya a instalar el reloj de tal manera que cada diseño sólo vale para la pared para la que fue concebido.
Yo he optado por transferir el diseño a un soporte menos perecedero y que aguante la intemperie. aunque lo ideal sería una placa de latón o una losa de pizarra (esta última puede comprarse suelta por un euro la unidad).
En este caso, a modo de prueba, he utilizado una baldosa de vinilo que imita pizarra y debo decir que el resultado ha sido muy satisfactorio.
Unicamente hay que tener en cuenta que el reloj quede perfectamente nivelado a la hora de instalarlo en el muro y que el gnomon esté totalmente perpendicular al plano del cuadrante.
El reloj funciona bastante bien a condición de que haga sol
aunque muestra un retraso de 15 minutos, posiblemente por algún pequeño defecto a la hora de transferir los datos al soporte definitivo, que espero subsanar modificando ligeramente la posición del gnomon.
Utilizando un soporte más noble, añadiendo algo de decoración y alguna frase en latín creo que puede conseguirse un resultado espectacular.
Y con esto me despido
esperando que haya gustado.
Que el otro día en un pueblo
hasta piedras me tiraron.
Como aficionados a los relojes la mayoría de nosostros tenemos automáticos, cuarzos, manuales, pulsera. bolsillo...
Sin embargo, no es tan habitual tener un reloj de sol que además funcione y, menos aún que podamos construirlo nosotros mismos.
Lo más sencillo es construir un reloj de pared vertical meridional.
El cuadrante es simétrico y el gnomon (palito que hace de aguja) está sobre el mediodía.
El problema de este tipo de reloj es que , para que sea realmente operativo y no sólo tenga una finalidad decorativa debe estar necesariamente ubicado en una pared que esté orientada al sur.
Si nuestra vivienda carece de una pared, terraza o balcón orientado al sur el reloj sólo valdrá para decorar.
Si lo que queremos es ubicar el reloj en una pared concreta el diseño se hace algo más complejo pero a cambio el reloj será plenamente operativo. Es lo que se llama reloj de sol vertical declinante.
Para ello necesitamos calcular tres datos referentes al lugar donde se instalará el reloj: longitud, latitud y declinación. Aunque esta operación puede solventarse con el nivel de matemáticas de bachillerato, afortunadamente hay varios sitios en Internet que hacen el cálculo por nosotros e incluso nos facilitan un diseño del reloj en formato PDF.
Una vez impreso el PDF, sólo tenemos que doblarlo como indican las instrucciones obteniendo un triángulo que hará de gnomon e irá marcando las horas al proyectar su sombra.
En este caso el cuadrante no es simétrico y será diferente en función de la pared donde se vaya a instalar el reloj de tal manera que cada diseño sólo vale para la pared para la que fue concebido.
Yo he optado por transferir el diseño a un soporte menos perecedero y que aguante la intemperie. aunque lo ideal sería una placa de latón o una losa de pizarra (esta última puede comprarse suelta por un euro la unidad).
En este caso, a modo de prueba, he utilizado una baldosa de vinilo que imita pizarra y debo decir que el resultado ha sido muy satisfactorio.
Unicamente hay que tener en cuenta que el reloj quede perfectamente nivelado a la hora de instalarlo en el muro y que el gnomon esté totalmente perpendicular al plano del cuadrante.
El reloj funciona bastante bien a condición de que haga sol
Utilizando un soporte más noble, añadiendo algo de decoración y alguna frase en latín creo que puede conseguirse un resultado espectacular.
Y con esto me despido
esperando que haya gustado.
Que el otro día en un pueblo
hasta piedras me tiraron.
Última edición: