Daniel:
La palabra cura, y la palabra mata. Esta es una cita del Talmud, el libro de la ley del pueblo judío. Yo, como psicoanalista, puedo darte fé de eso.
EL daño que puede producir la palabra es tremendo. Y creo que hay que ser muy cuidadoso con ella, si a uno le importa el efecto de lo que dice sobre los demás.
A veces, es posible decir las mismas cosas desde un lugar amable, sin ocultar ni información y haciendo verdadera pedagogía.
Para dar un ejemplo de lo que digo , a propósito de relojes. Yo puedo decir...ese reloj es de pésima calidad....o lo hay mejores. O , para seguir con lo mismo, puedo decir, una manera de mejorar notablemente la calidad de ese relojm es agregarle las piedras que no tuvo en su origen. O decir, es ordinario, porque no tiene piedras...Y así hasta el infinito.
Las palabras, los relojes, las armas...no usar los relojes como armas. Usarlos como lo que son, obejtos curiosos, y la mayoria de las veces, muy hermosos.
Un abrazo.
Richardreler