rgil
Milpostista
Sin verificar
Tercera parte
Nos habíamos quedado aquí
La siguiente pieza que montamos es el martillo.
Esta pieza hace las funciones de la rueda de pilares de un crono mas moderno. Interacciona con muchas otras piezas y por lo tanto su forma debe de ser muy elaborada.
El nombre proviene de que esta es la pieza que “golpea” en las camas, para poner a cero las agujas del cronógrafo.
Las que serían las “cabezas de martillo” (son dos, una para la trotadora y otra para la contadora), pasan por encima de las ruedas, para llegar a, literalmente, golpear en las camas.
En su parte central, está pieza es movida, en los dos sentidos, por las palancas que accionan los pulsadores.
En la siguiente imagen, ya estan colocadas las dos palancas que la mueven (flechas rojas).
En esta imagen, las cabezas de martillo están apoyadas en las camas. En esta posición, el crono está parado y las agujas en el cero.
La palanca que parte desde mas abajo de la corona arranca el cronografo.
La otra palanca, parte desde mas arriba de la corona y tiene dos funciones. La primera vez que se aprieta, para el crono y la segunda, lo ponerlo a cero.
Al accionar la palanca mas larga, la pieza “martillo” se gira ligeramente. Esto, por una parte, libera las camas, permitiendo que las ruedas giren.
Por otra parte, al realizar la pieza “martillo” un pequeño giro, en su parte izquierda, empuja a otras piezas.
Uno de los movimientos que se transmite se logra gracias a la interacción marcada con las flechas rojas. Este hace que se acerque el engranaje móvil a la rueda de la aguja trotadora, para que funcione la rueda contadora.
La otra acción es el embrague de la rueda de la trotadora con la rueda de arrastre , que se hará gracias al movimiento de la parte marcada con el circulo azul y que veremos mas tarde, cuando esté colocada esta pieza.
Estas dos partes de la pieza, que interaccionan, son tornillos excéntricos para poder hacer el reglaje de su interacción.
En total, este reloj tiene 7 tornillos excentricos de reglaje. Esta es una de los motivos por el que se ha impuesto la rueda de pilares en los mecanismos cronógrafo. El reglaje es mucho mas sencillo y rápido de hacer con la rueda de pilares.
Dado que la posición de esta pieza es muy importante para el funcionamiento del crono, se ha colocado un resorte que nos asegura que su posición será muy precisa. El resorte está colocado mas arriba de esta pieza.
Las tres posiciones que puede adoptar el martillo se corresponden con las tres muescas que tiene la misma pieza para que apoye el resorte (flejas rojas)
Al accionar la otra palanca se produce el movimiento contrario, pero secuenciado en dos partes, de forma que la primera parte solo desembraga la rueda de arrastre y por tanto el crono se para, pero las agujas continúan en la misma posición.
En la segunda secuencia del movimiento, al volver a apretar el mismo pulsador, el movimiento llega hasta el final y los martillos golpean las camas haciendo que las agujas vuelvan al cero.
En realidad, las cosas son un poco mas elaboradas, pues hay, por ejemplo, un pequeño resorte que evita que, una vez paradas las agujas, su posición pueda variar debido a una sacudida. Así las agujas permanecen fijas mientras hacemos la lectura.
Continuará...
Nos habíamos quedado aquí
La siguiente pieza que montamos es el martillo.
Esta pieza hace las funciones de la rueda de pilares de un crono mas moderno. Interacciona con muchas otras piezas y por lo tanto su forma debe de ser muy elaborada.
El nombre proviene de que esta es la pieza que “golpea” en las camas, para poner a cero las agujas del cronógrafo.
Las que serían las “cabezas de martillo” (son dos, una para la trotadora y otra para la contadora), pasan por encima de las ruedas, para llegar a, literalmente, golpear en las camas.
En su parte central, está pieza es movida, en los dos sentidos, por las palancas que accionan los pulsadores.
En la siguiente imagen, ya estan colocadas las dos palancas que la mueven (flechas rojas).
En esta imagen, las cabezas de martillo están apoyadas en las camas. En esta posición, el crono está parado y las agujas en el cero.
La palanca que parte desde mas abajo de la corona arranca el cronografo.
La otra palanca, parte desde mas arriba de la corona y tiene dos funciones. La primera vez que se aprieta, para el crono y la segunda, lo ponerlo a cero.
Al accionar la palanca mas larga, la pieza “martillo” se gira ligeramente. Esto, por una parte, libera las camas, permitiendo que las ruedas giren.
Por otra parte, al realizar la pieza “martillo” un pequeño giro, en su parte izquierda, empuja a otras piezas.
Uno de los movimientos que se transmite se logra gracias a la interacción marcada con las flechas rojas. Este hace que se acerque el engranaje móvil a la rueda de la aguja trotadora, para que funcione la rueda contadora.
La otra acción es el embrague de la rueda de la trotadora con la rueda de arrastre , que se hará gracias al movimiento de la parte marcada con el circulo azul y que veremos mas tarde, cuando esté colocada esta pieza.
Estas dos partes de la pieza, que interaccionan, son tornillos excéntricos para poder hacer el reglaje de su interacción.
En total, este reloj tiene 7 tornillos excentricos de reglaje. Esta es una de los motivos por el que se ha impuesto la rueda de pilares en los mecanismos cronógrafo. El reglaje es mucho mas sencillo y rápido de hacer con la rueda de pilares.
Dado que la posición de esta pieza es muy importante para el funcionamiento del crono, se ha colocado un resorte que nos asegura que su posición será muy precisa. El resorte está colocado mas arriba de esta pieza.
Las tres posiciones que puede adoptar el martillo se corresponden con las tres muescas que tiene la misma pieza para que apoye el resorte (flejas rojas)
Al accionar la otra palanca se produce el movimiento contrario, pero secuenciado en dos partes, de forma que la primera parte solo desembraga la rueda de arrastre y por tanto el crono se para, pero las agujas continúan en la misma posición.
En la segunda secuencia del movimiento, al volver a apretar el mismo pulsador, el movimiento llega hasta el final y los martillos golpean las camas haciendo que las agujas vuelvan al cero.
En realidad, las cosas son un poco mas elaboradas, pues hay, por ejemplo, un pequeño resorte que evita que, una vez paradas las agujas, su posición pueda variar debido a una sacudida. Así las agujas permanecen fijas mientras hacemos la lectura.
Continuará...
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