Alfredo, yo no digo que "para lo que ganamos hagamos lo menos posible" lo que digo es que actualmente las empresas se están aprovechando de la necesidad y la ilusión de muchos jóvenes. También es cierto que como ha comentado algún compañero, el tema es muy complejo como para tratarlo en un hilo. Yo tengo 45 años, me pasé 20 años en la misma empresa, trabajé mucho, hasta ser un empleado de confianza, pero los pocos aumentos que recibí fueron tras quejarme por realizar tareas de responsabilidad muy superiores a mi categoría laboral (estar al frente de proyectos con gente a mi cargo).
Hace cuatro años nos subrogan, nos envían a una multinacional en la que hacíamos más horas que un reloj (sin cobrarlas, claro) al final me despiden y ponen en mi lugar una persona que cobra la mitad y yo por suerte encontré otro trabajo con la misma categoría laboral que tenía pero cobro 10.000 € menos.
Con este historial se puede entender que trabajar si, por supuesto, pero no te dejes la vida en ello, porque el tiempo que no dedicas a tu familia y amistades no se recupera (por no hablar de los problemas de estrés que padecí estos últimos cuatro años).
Para una empresa no hay que trabajar mucho, ni a carreras, ni horas extra a mansalva, solo hay que ser constante, fiable, efectivo, con don de gentes, abierto y muy seguro de lo que haces, esas son las claves para mí, de nada sirve ser explosivo un tiempo si después te desinflas y empiezan los problemas, te exigen las carreras de antes y el mismo rendimiento, cada vez te aprietan mas y llega un momento que ya no puede ser, es cuando hay problemas y además serios. La regularidad y constancia siempre triunfa no las carreras.
Una de las claves de un profesional, a mi entender, es estar en una empresa, aprender, sacar el jugo personal que le interesa al profesional, oler los problemas antes de que lleguen y replegarse a tiempo, si luchas, convenio, malos rollos, derechos etc... entras en la dinámica de a ti te jodo mas que tu a mí y tiene las de perder siempre el profesional. Yo, entiendo que antes de llegar a esa dinámica, hay que cambiar de empresa, valorar lo que tienes y lo que puedes ganar, a veces el dinero no lo es todo, es preferible perder dinero de momento en una empresa nueva hasta hacerte con su forma de trabajo que enrocarte en la anterior, eso es de lo que padecemos los españoles, de querer que las empresas sean nuestros padres y que nos deban ayudarnos y tenernos hasta el retiro.
Como todo, las empresas a veces necesitan una buena caída para valorar lo que tenían y lo que perdieron para resurgir de nuevo, si las mantenemos con nuestro sudor y servilismo, ayudamos a su soberbia, a creerse dioses, a pisarnos y patearnos, insultos, malos rollos, ellos engordando de manera despótica y nosotros encajando su hijoputismo, siento la palabra, pero lo he visto así. He visto muchas veces lo mismo, sobre todo en el mundo de la electricidad, he visto florecer algunas y también CAER gracias a su justo premio QUE LAS DEN, pero no he caído con ellas, a veces era donde mas ganaba y sin embargo me he largado antes de que cayeran, mi intuición me lo decía, que empezaban los malos rollos y era el momento de cambiar. El profesional no debe permanecer estático, estás en un sitio y su obligación es de conocer bien el sector, analizarlo y tomar contacto con todos los competidores, llevarse bien con ellos ( Cada uno en su sitio), conocer diferentes patrones, que sepan que andas por hay, que vean tus trabajos y cuando menos lo esperas tienes ya el cambio asegurado, das el paso sin malos rollos o formas y se acabó, en mi caso ha trabajado varias veces para los mismos patrones, he ido y he venido varias veces, todos me querían hacer fijo ( Que se lo metieran por hay, veía como a sus trabajadores no eran tratados como a mí, no tenían el mismo respeto con ellos que conmigo) y nunca acepté.
Conclusión, el día que cambiemos el chip, estaremos mucho mejor por que, recordar, ya no competimos a nivel nacional, sino internacional y la rueda debe arrastrar desde la base de autónomos, pequeñas empresas, grandes empresas y multinacionales españolas para posicionarse lo mejor posible en los mercados internacionales, esa será la garantía de buenos sueldos y una fuerte economía. NOS HABÍAMOS DORMIDO y vivimos por encima de nuestras posibilidades y lo hemos pagado, espero que hayamos aprendido para resurgir de nuevo.