oldchrono
Magister Collector
Sin verificar
Hola amigos!!
Tal vez la pregunta parezca algo tonta, pero este fin de semana "largo" me permitió meditar un poco en este asunto.
Es evidente, que el mayor disfrute que nos proporcionan nuestros relojes vintage, lo produce el llevarlos en el pulso, usarlos, y emplearlos a diario, para conocer la hora. Cada mirada echada durante el día a nuestro reloj, se convierte en un instante de placer, y seguramente que son muchas más las instancias en que lo miramos sólo por el placer de contemplarlo, que por necesidad de saber qué hora es.
El cambiar de reloj en forma rotativa, para llevar en la muñeca un ejemplar distinto cada tantos días, es una posibilidad de disfrutar cada una de nuestras piezas.
Sin embargo, en mi caso personal, además de disfrutarlos así, teniendolos en la muñeca, hallo que disfruto de mis relojes de muchas maneras adicionales incrementando el goce que me produce poseerlos.
Así por ejemplo, me gusta abrir los "recipientes" donde los guardo (cajas, estuches, sobres, etc.), ordenándolos, o cambiandolos del ordenamiento en que los habia dejado en mi anterior inspección, poniendolos en marcha en forma periodica, dandoles cuerda, (sin tener que ponerlos en hora necesariamente, a todos ellos).
El simple hecho de poder tener en las manos algunos ejemplares, darles cuerda, acariciarlos un poco de tiempo en tiempo, y la simple contemplación, y hasta escuchar su "tic-toc" (especialmente en esos viejos mecanismos de 18.000 alternancias) es motivo de gran placer para mí.
También me gusta de vez en cuando, tomar alguno en particular, y contemplarlo en detalle con una lupa, descubriendo detalles, comparandolo con ejemplares fotografiados en libros, y leyendo sobre el modelo en cuestión.
Igualmente, llevo un registro donde asiento todos los datos que he podido recabar sobre cada una de mis piezas, incluyendo datos como el número de serie, fecha aproximada de fabricación, fecha de compra, valor pagado por la pieza, etc..
Esta costumbre de llevar un registro de la colección, lo he aprendido de otras actividades de coleccionista que he practicado durante mas de tres décadas, y que me ha proporcionado grandes satisfacciones, y gran placer al releerlas, muchos años después de haber hecho algunas de esas anotaciones.
La información recabada, es además, valiosísima con propósitos de estudio, identificación, etc..
Concluyo comentando, que el hecho de tomar fotografías de distintos ángulos y de acercamiento de los relojes, se ha convertido en un hobby en sí mismo, que ha sido motivo de gran distracción, placer y entretenimiento, y una fuente de descubrimiento de detalles que muchas veces me habían escapado a la mirada directa de una pieza.
Y el poder compartir esas fotos, y algunos textos en este querido Foro, sabiendo que mis sentimientos y pasión, o las "pequeñas locuras" que a veces cometemos para obtener una pieza, son comprendidas y son compartidas con muchos amigos, -a pesar de que algunos puedan encontrarse a muchos kilometros de distancia- es una manera muy feliz y gratificante, de agregar disfrute a cada una de mis piezas.
Dicho esto sobre mi experiencia personal, os invito a escribir vuestros propias experiencias, sobre la manera que disfrutais de vuestros relojes.
Espero con ilusión vuestros relatos!!:
Os envio un afectuoso saludo, Tonin.
Tal vez la pregunta parezca algo tonta, pero este fin de semana "largo" me permitió meditar un poco en este asunto.
Es evidente, que el mayor disfrute que nos proporcionan nuestros relojes vintage, lo produce el llevarlos en el pulso, usarlos, y emplearlos a diario, para conocer la hora. Cada mirada echada durante el día a nuestro reloj, se convierte en un instante de placer, y seguramente que son muchas más las instancias en que lo miramos sólo por el placer de contemplarlo, que por necesidad de saber qué hora es.
El cambiar de reloj en forma rotativa, para llevar en la muñeca un ejemplar distinto cada tantos días, es una posibilidad de disfrutar cada una de nuestras piezas.
Sin embargo, en mi caso personal, además de disfrutarlos así, teniendolos en la muñeca, hallo que disfruto de mis relojes de muchas maneras adicionales incrementando el goce que me produce poseerlos.
Así por ejemplo, me gusta abrir los "recipientes" donde los guardo (cajas, estuches, sobres, etc.), ordenándolos, o cambiandolos del ordenamiento en que los habia dejado en mi anterior inspección, poniendolos en marcha en forma periodica, dandoles cuerda, (sin tener que ponerlos en hora necesariamente, a todos ellos).
El simple hecho de poder tener en las manos algunos ejemplares, darles cuerda, acariciarlos un poco de tiempo en tiempo, y la simple contemplación, y hasta escuchar su "tic-toc" (especialmente en esos viejos mecanismos de 18.000 alternancias) es motivo de gran placer para mí.
También me gusta de vez en cuando, tomar alguno en particular, y contemplarlo en detalle con una lupa, descubriendo detalles, comparandolo con ejemplares fotografiados en libros, y leyendo sobre el modelo en cuestión.
Igualmente, llevo un registro donde asiento todos los datos que he podido recabar sobre cada una de mis piezas, incluyendo datos como el número de serie, fecha aproximada de fabricación, fecha de compra, valor pagado por la pieza, etc..
Esta costumbre de llevar un registro de la colección, lo he aprendido de otras actividades de coleccionista que he practicado durante mas de tres décadas, y que me ha proporcionado grandes satisfacciones, y gran placer al releerlas, muchos años después de haber hecho algunas de esas anotaciones.
La información recabada, es además, valiosísima con propósitos de estudio, identificación, etc..
Concluyo comentando, que el hecho de tomar fotografías de distintos ángulos y de acercamiento de los relojes, se ha convertido en un hobby en sí mismo, que ha sido motivo de gran distracción, placer y entretenimiento, y una fuente de descubrimiento de detalles que muchas veces me habían escapado a la mirada directa de una pieza.
Y el poder compartir esas fotos, y algunos textos en este querido Foro, sabiendo que mis sentimientos y pasión, o las "pequeñas locuras" que a veces cometemos para obtener una pieza, son comprendidas y son compartidas con muchos amigos, -a pesar de que algunos puedan encontrarse a muchos kilometros de distancia- es una manera muy feliz y gratificante, de agregar disfrute a cada una de mis piezas.
Dicho esto sobre mi experiencia personal, os invito a escribir vuestros propias experiencias, sobre la manera que disfrutais de vuestros relojes.
Espero con ilusión vuestros relatos!!:
Os envio un afectuoso saludo, Tonin.
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