oldchrono
Magister Collector
Sin verificar
Waldman Submarine ... ¿Enfermedad o Vicio?
Hola amigos!
Seguramente le habrá sucedido a muchos de vosotros. Tal vez a la mayoría. Uno pasa caminando por delante de una vitrina de una relojería, y automáticamente se detiene a mirar.
Puede que pasemos delante de ella todos los días, pero siempre nos detenemos con la curiosidad o esperanza de descubrir alguna pieza que nos atraiga lo suficiente como para motivarnos a entrar a la tienda.
Generalmente, la pieza que nos motiva a desear comprarla, está encuadrada dentro de ciertos parámetros: una marca favorita, una tipología que nos atrae especialmente, o un reloj que siempre deseamos tener.
Pero fíjense qué me ocurrió con este Waldman: ciertamente siempre me han gustado los relojes de buceador, pero este, ni es una marca conocida, ni mucho menos un reloj fino, ni está equipado con un movimiento de renombre. Pero fue verlo, y entrar a preguntar por su precio, y al conocerlo tan accesible, fue un sólo impulso llevarlo a casa.
No es afín con ninguna de mis piezas, simplemente me pareció "lindo" o simpático. (Como me dijo un amigo del ambiente: ¿existen relojes feos?)
Sencillo en sus formas clásicas, lindos sus índices de tritum que han amarillado con una bella pátina. Su dial, convencional a un diver, es muy atractivo. El armis, remeda aproximadamente al Jubilee de Rolex, y el relojito, por su tamaño y diseño me recuerda (salvando las distancias) a un Submariner de los años 1960´s.
El relojito, lleva una imagen de un buceador autónomo en su tapa trasera a rosca. Digamos de paso, que no me creo para nada esa inscripción que dice "super waterproof" y asegura que es estanco hasta 200 metros, y que fue "probado al vacío".
Pero tuve un impulso irrefrenable, y me lo coloqué en la muñeca, pague lo que pedían por él, y me lo lleve puesto, a casa.
Impulsado por un movimiento EB-8021N, que según averigüé, no es ningún dechado de virtudes, este pequeño relojillo, se encontraba en estado NOS, y fue fabricado en los años 1970´s.
Cada vez que lo veo, me provoca una sonrisa, y me hace reflexionar si lo nuestro, es una enfermedad o un vicio.
En todo caso, una irremediable condición que nos llena de placer, cada vez que disfrutamos de uno de nuestros relojes, llevándolo en el pulso, o simplemente teniéndolo en la mano, para darle cuerda o admirarlo observando sus diversos detalles.
Les envío mi afectuoso saludo, y deseo de un buen fin de semana!
Muy cordialmente, Tonin.
Hola amigos!
Seguramente le habrá sucedido a muchos de vosotros. Tal vez a la mayoría. Uno pasa caminando por delante de una vitrina de una relojería, y automáticamente se detiene a mirar.
Puede que pasemos delante de ella todos los días, pero siempre nos detenemos con la curiosidad o esperanza de descubrir alguna pieza que nos atraiga lo suficiente como para motivarnos a entrar a la tienda.
Generalmente, la pieza que nos motiva a desear comprarla, está encuadrada dentro de ciertos parámetros: una marca favorita, una tipología que nos atrae especialmente, o un reloj que siempre deseamos tener.
Pero fíjense qué me ocurrió con este Waldman: ciertamente siempre me han gustado los relojes de buceador, pero este, ni es una marca conocida, ni mucho menos un reloj fino, ni está equipado con un movimiento de renombre. Pero fue verlo, y entrar a preguntar por su precio, y al conocerlo tan accesible, fue un sólo impulso llevarlo a casa.
No es afín con ninguna de mis piezas, simplemente me pareció "lindo" o simpático. (Como me dijo un amigo del ambiente: ¿existen relojes feos?)
Sencillo en sus formas clásicas, lindos sus índices de tritum que han amarillado con una bella pátina. Su dial, convencional a un diver, es muy atractivo. El armis, remeda aproximadamente al Jubilee de Rolex, y el relojito, por su tamaño y diseño me recuerda (salvando las distancias) a un Submariner de los años 1960´s.
El relojito, lleva una imagen de un buceador autónomo en su tapa trasera a rosca. Digamos de paso, que no me creo para nada esa inscripción que dice "super waterproof" y asegura que es estanco hasta 200 metros, y que fue "probado al vacío".
Pero tuve un impulso irrefrenable, y me lo coloqué en la muñeca, pague lo que pedían por él, y me lo lleve puesto, a casa.
Impulsado por un movimiento EB-8021N, que según averigüé, no es ningún dechado de virtudes, este pequeño relojillo, se encontraba en estado NOS, y fue fabricado en los años 1970´s.
Cada vez que lo veo, me provoca una sonrisa, y me hace reflexionar si lo nuestro, es una enfermedad o un vicio.
En todo caso, una irremediable condición que nos llena de placer, cada vez que disfrutamos de uno de nuestros relojes, llevándolo en el pulso, o simplemente teniéndolo en la mano, para darle cuerda o admirarlo observando sus diversos detalles.
Les envío mi afectuoso saludo, y deseo de un buen fin de semana!
Muy cordialmente, Tonin.
Última edición:
, un buceador clásico y atemporal. Te entiendo perfectamente, a mi me ocurre lo mismo, casi siempre nos enamoramos de lo primero que vemos, que es la caja-dial y si somos capaces de vislumbrar calibre, historia...etc. pues ya el no va mas. Felicitaciones por la adquisición
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