oldchrono
Magister Collector
Sin verificar
Lamy Dialog 3... una Muy Agradable sorpresa!
Hola amigos! Quería compartir con ustedes mis impresiones con esta pluma que ha caído en mis manos, como un sorpresivo obsequio.
Debo confesar que no soy demasiado entusiasta con las estilográficas de plumín "escamoteable", como el caso de las Namiki Capless o "Vanishing point" como se las llama en EE-UU (es decir, "Namiki sin capuchón", o de "punta que desaparece")
Estas plumas fuente, tienen su indiscutible practicidad, a la hora de poder ponerlas en uso muy rápidamente, con una sola mano, y presionando su pulsador trasero, como lo hacemos con ciertos bolígrafos.
Cuando debemos detener nuestra escritura, para pensar o prestar atención a quien nos habla, el tapar o destapar un capuchón, puede molestar a algunos, y una pluma de este tipo, puede ser una gran ventaja.
Podemos mantener la pluma cerrada, evitando que la tinta se seque y que presente problemas de arranque al volver a escribir, y además, mantenemos la pluma cerrada para evitar que en caso de una caída accidental, el plumín resulte dañado.
El sistema de apertura de esta pluma Lamy Dialog 3, consiste en girar la parte anterior de la misma unos 180 grados, para que quede lista para usar. Este sistema, requiere del uso de las dos manos, por lo cual, no es tan práctica como una Namiki Capless, que requiere solo una mano, pero igualmente, cumple su función de poder abrir y cerrar muy rápidamente, en las condiciones comentadas anteriormente.
De todas maneras, y a pesar de que tengo un par de Namikis capless, una comprada hace unos quince años, y la otra una Decimo que se pueden ver en las fotos, y alguna que otra pluma más del tipo "safety" como se les decía antes, o sea, de plumínes escamoteables, decía que no soy muy entusiasta, simplemente porque me gustan más y estoy más acostumbrado a las estilográficas convencionales con capuchón de quita y pon.
Debo decir sin embargo, que esta Lamy Dialog 3 me había gustado muchísimo desde que la vi por primera vez, por su diseño sencillo, minimalista, y su preciosa terminación, y además, por ser Lamy, una marca que respeto mucho por la gran calidad de todos sus productos.
El hecho es que, el familiar que me la obsequió, sabía que yo "le tenía ganas" por haber escuchado mis comentarios, y así fue que esta preciosa pluma fuente, cayó finalmente en mis manos.
Primeras impresiones:
La Lamy Dialog 3 ofrece una extraordinaria primera impresión, comenzando por su singular estuche de madera con cierre magnético, y la apariencia que tiene al verla.
Luego está el peso que sentimos en la mano al tomarla, 48 gramos que le dan una gran presencia en la mano. La terminación... impecable. Parece un instrumento de precisión, y sin duda alguna lo es. El acabado de la mía es negro satinado, aunque se la ofrece en color aluminio natural. Tengo mis dudas en cuanto a la duración de este recubrimiento negro de mi pluma, pero eso el tiempo lo dirá.
Como toda decoración, tiene dos líneas plateadas paralelas, que nacen del clip, sobrio y liso.
Cerca del culote, las líneas paralelas encierran la palabra "Lamy" discreta y elegantemente impresa sobre el cuerpo de la pluma.
Las líneas tienen una función decorativa, pero también sirven de "índice" para saber que cuando están alineadas, la pluma se encuentra en su posición de completamente cerrada. Si se avanza un poco más, se comienza a desatornillar, para poder cargarla.
Si se la gira hacia el otro lado, con la intención de abrirla, observamos que una pequeña tapilla metálica pulida brillante que se encuentra en la delantera de la pluma, se abre como si fuese la escotilla de una nave espacial, y comienza a aparecer el plumín, hasta que se completa el giro cuando se escucha un efectivo "click", y el plumín queda completamente afuera, y en posición de escritura.
La pluma mide 14 cms cerrada, y 15,5 cm cuando está con el plumín afuera, lista para usar.
Su diámetro es generoso, con sus 16 mm, y es sumamente cómoda en la mano, aunque para mi gusto un poquitín pesada.
El Plumín:
El plumín es el corazón de toda pluma, y lo que marcará fundamentalmente la satisfacción al escribir con nuestra estilográfica.
En este caso, este plumín fue la mayor y más grata de las sorpresas: lo hallé extraordinariamente suave, muy jugoso, y con una calidad de flex ideal para una pluma de uso diario. Reúne todas las condiciones ideales que a mí me gustan personalmente, y que juntas hacen que escribir con esta pluma sea un verdadero placer.
Por favor, entiéndase bien, que el plumín no es flexible como los de las antiguas estilográficas, pero es suficientemente flexible como para arrancarle una buena diferenciación de trazos descendentes gruesos, y nos invita a jugar con la pluma.
Estéticamente, el plumín se parece mucho al que equipa a las Lamy Safari en su forma y diseño, pero está realizado en oro 14K rodiado, con una zona color oro amarillo central (siendo los de la Safari de acero). El punto de la mía es "M", aunque en origen se lo ofrece también en otros puntos populares, como el en EF, F, B y Oblicuo.
Sistema de carga:
Esta pluma puede ser cargada por sistema de cartuchos, usando los modelo T10 de Lamy, o bien mediante un convertidor modelo Z26 que se suministra, y que es el sistema que elegí yo naturalmente, pues permite usar cualquiera de mis tintas favoritas, o bien poder experimentar con diversas marcas o colores.
Para ello, se debe desatornillar la parte anterior de la pluma, hacia el lado contrario del de apertura, y una vez desacoplada la parte trasera o cuerpo de metal de esta estilográfica, queda a la vista el sistema del mecanismo, el cual debe ser desatornillado a su vez, para poder proceder a la carga desde un tintero. Si se carga mediante un cartucho, este segundo paso, no es necesario.
El procedimiento es más sencillo ejecutarlo que describirlo por escrito, y es muy rápido y sin ningún inconveniente.
Conclusiones finales:
He estado escribiendo con esta hermosa pluma en los últimos días, y a pesar de que soy un tradicionalista y un nostálgico y por tanto suelo preferir plumas con diseños convencionales, y con capuchón separado, debo reconocer que he quedado encantado con la calidad de escritura de esta pluma. Posee un plumín excepcional, y no dudo en recomendarla.
Es una pluma fuente que invita a escribir con ella, atractiva, diferente, y con una calidad de materiales y terminación, y una calidad de escritura que deja satisfecho a todo usuario de estilográficas, por exigente que sea.
Una nueva muestra de la calidad y excelencia de los productos de la marca LAMY.
Espero que os guste esta estilográfica y esta presentación!
Muy cordialmente, Tonin.
Hola amigos! Quería compartir con ustedes mis impresiones con esta pluma que ha caído en mis manos, como un sorpresivo obsequio.
Debo confesar que no soy demasiado entusiasta con las estilográficas de plumín "escamoteable", como el caso de las Namiki Capless o "Vanishing point" como se las llama en EE-UU (es decir, "Namiki sin capuchón", o de "punta que desaparece")
Estas plumas fuente, tienen su indiscutible practicidad, a la hora de poder ponerlas en uso muy rápidamente, con una sola mano, y presionando su pulsador trasero, como lo hacemos con ciertos bolígrafos.
Cuando debemos detener nuestra escritura, para pensar o prestar atención a quien nos habla, el tapar o destapar un capuchón, puede molestar a algunos, y una pluma de este tipo, puede ser una gran ventaja.
Podemos mantener la pluma cerrada, evitando que la tinta se seque y que presente problemas de arranque al volver a escribir, y además, mantenemos la pluma cerrada para evitar que en caso de una caída accidental, el plumín resulte dañado.
El sistema de apertura de esta pluma Lamy Dialog 3, consiste en girar la parte anterior de la misma unos 180 grados, para que quede lista para usar. Este sistema, requiere del uso de las dos manos, por lo cual, no es tan práctica como una Namiki Capless, que requiere solo una mano, pero igualmente, cumple su función de poder abrir y cerrar muy rápidamente, en las condiciones comentadas anteriormente.
De todas maneras, y a pesar de que tengo un par de Namikis capless, una comprada hace unos quince años, y la otra una Decimo que se pueden ver en las fotos, y alguna que otra pluma más del tipo "safety" como se les decía antes, o sea, de plumínes escamoteables, decía que no soy muy entusiasta, simplemente porque me gustan más y estoy más acostumbrado a las estilográficas convencionales con capuchón de quita y pon.
Debo decir sin embargo, que esta Lamy Dialog 3 me había gustado muchísimo desde que la vi por primera vez, por su diseño sencillo, minimalista, y su preciosa terminación, y además, por ser Lamy, una marca que respeto mucho por la gran calidad de todos sus productos.
El hecho es que, el familiar que me la obsequió, sabía que yo "le tenía ganas" por haber escuchado mis comentarios, y así fue que esta preciosa pluma fuente, cayó finalmente en mis manos.
Primeras impresiones:
La Lamy Dialog 3 ofrece una extraordinaria primera impresión, comenzando por su singular estuche de madera con cierre magnético, y la apariencia que tiene al verla.
Luego está el peso que sentimos en la mano al tomarla, 48 gramos que le dan una gran presencia en la mano. La terminación... impecable. Parece un instrumento de precisión, y sin duda alguna lo es. El acabado de la mía es negro satinado, aunque se la ofrece en color aluminio natural. Tengo mis dudas en cuanto a la duración de este recubrimiento negro de mi pluma, pero eso el tiempo lo dirá.
Como toda decoración, tiene dos líneas plateadas paralelas, que nacen del clip, sobrio y liso.
Cerca del culote, las líneas paralelas encierran la palabra "Lamy" discreta y elegantemente impresa sobre el cuerpo de la pluma.
Las líneas tienen una función decorativa, pero también sirven de "índice" para saber que cuando están alineadas, la pluma se encuentra en su posición de completamente cerrada. Si se avanza un poco más, se comienza a desatornillar, para poder cargarla.
Si se la gira hacia el otro lado, con la intención de abrirla, observamos que una pequeña tapilla metálica pulida brillante que se encuentra en la delantera de la pluma, se abre como si fuese la escotilla de una nave espacial, y comienza a aparecer el plumín, hasta que se completa el giro cuando se escucha un efectivo "click", y el plumín queda completamente afuera, y en posición de escritura.
La pluma mide 14 cms cerrada, y 15,5 cm cuando está con el plumín afuera, lista para usar.
Su diámetro es generoso, con sus 16 mm, y es sumamente cómoda en la mano, aunque para mi gusto un poquitín pesada.
El Plumín:
El plumín es el corazón de toda pluma, y lo que marcará fundamentalmente la satisfacción al escribir con nuestra estilográfica.
En este caso, este plumín fue la mayor y más grata de las sorpresas: lo hallé extraordinariamente suave, muy jugoso, y con una calidad de flex ideal para una pluma de uso diario. Reúne todas las condiciones ideales que a mí me gustan personalmente, y que juntas hacen que escribir con esta pluma sea un verdadero placer.
Por favor, entiéndase bien, que el plumín no es flexible como los de las antiguas estilográficas, pero es suficientemente flexible como para arrancarle una buena diferenciación de trazos descendentes gruesos, y nos invita a jugar con la pluma.
Estéticamente, el plumín se parece mucho al que equipa a las Lamy Safari en su forma y diseño, pero está realizado en oro 14K rodiado, con una zona color oro amarillo central (siendo los de la Safari de acero). El punto de la mía es "M", aunque en origen se lo ofrece también en otros puntos populares, como el en EF, F, B y Oblicuo.
Esta pluma puede ser cargada por sistema de cartuchos, usando los modelo T10 de Lamy, o bien mediante un convertidor modelo Z26 que se suministra, y que es el sistema que elegí yo naturalmente, pues permite usar cualquiera de mis tintas favoritas, o bien poder experimentar con diversas marcas o colores.
Para ello, se debe desatornillar la parte anterior de la pluma, hacia el lado contrario del de apertura, y una vez desacoplada la parte trasera o cuerpo de metal de esta estilográfica, queda a la vista el sistema del mecanismo, el cual debe ser desatornillado a su vez, para poder proceder a la carga desde un tintero. Si se carga mediante un cartucho, este segundo paso, no es necesario.
El procedimiento es más sencillo ejecutarlo que describirlo por escrito, y es muy rápido y sin ningún inconveniente.
Conclusiones finales:
He estado escribiendo con esta hermosa pluma en los últimos días, y a pesar de que soy un tradicionalista y un nostálgico y por tanto suelo preferir plumas con diseños convencionales, y con capuchón separado, debo reconocer que he quedado encantado con la calidad de escritura de esta pluma. Posee un plumín excepcional, y no dudo en recomendarla.
Es una pluma fuente que invita a escribir con ella, atractiva, diferente, y con una calidad de materiales y terminación, y una calidad de escritura que deja satisfecho a todo usuario de estilográficas, por exigente que sea.
Una nueva muestra de la calidad y excelencia de los productos de la marca LAMY.
Muy cordialmente, Tonin.
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