AbderramanII
Reina Mora
Sin verificar
Hola amigos, hoy es sábado, pero he tenido un encuentro a mediodía que me ha recordado a los paseos de los jueves que nos regala Eucratides por Santiago, y me he animado a compartirlo. Creo que también le gustará a nuestro querido vilobi, recientemente empadronado en nuestro rinconcito vintage. ¡¡Va por ambos!!
Ha sido una comida en el centro de Bilbao, en la parte superior del Museo de Bellas Artes, el fantástico museo que tenemos desde antes de que llegara el impresionante Guggenheim. La ubicación es fantástica, con las copas de los árboles meciéndose desnudas ante nuestros ojos…
La terraza es fantástica, pero hoy no era el día...
Mis fotos son un horror, lo sé, pero no doy más de mí…. pero bueno, lo que doy, lo comparto.
Un aperitivo de ajoblanco con hígado de bacalao y huevas de salmón con polvo de avellana
Un bocadillo de salmorejo con pan de aceituna negra
Un bocado de perdiz con setas y frutos secos
Unas pochas en vizcaína, increíblemente suaves...
Huevo con frutos del bosque
Pulpo con patata, versión ilustrada
Bacalao con crestas de gallo (el caldo de fondo era espectacular)
Vacío sobre compota de manzana y patata
Cuajado de melaza sobre frío de romero y cristalizados de cacao
En cuanto a vinos, hemos comenzado con un complejo e interesante blanco de Remelluri, criado sobre lías, y hemos seguido con un curioso tinto de Marqués de Cáceres (gran sorpresa)
He obligado a mis acompañantes a que posen con su muñeca. Los relojes, aunque apenas se aprecian, eran un precioso Speedmaster, un delicado Omega Deauville y mi Aero Seven Seas (pendiente de presentación).
Luego han llegado los gintonics y whiskys, y ya hemos perdido el enfoque
Yo he disfrutado mucho, y me ha apetecido compartirlo
El restaurante se llama Arbolagaña (que significa, en euskara, sobre los árboles) y el cocinero es Aitor Basabe
Ha sido una comida en el centro de Bilbao, en la parte superior del Museo de Bellas Artes, el fantástico museo que tenemos desde antes de que llegara el impresionante Guggenheim. La ubicación es fantástica, con las copas de los árboles meciéndose desnudas ante nuestros ojos…
La terraza es fantástica, pero hoy no era el día...
Mis fotos son un horror, lo sé, pero no doy más de mí…. pero bueno, lo que doy, lo comparto.
Un aperitivo de ajoblanco con hígado de bacalao y huevas de salmón con polvo de avellana
Un bocadillo de salmorejo con pan de aceituna negra
Un bocado de perdiz con setas y frutos secos
Unas pochas en vizcaína, increíblemente suaves...
Huevo con frutos del bosque
Pulpo con patata, versión ilustrada
Bacalao con crestas de gallo (el caldo de fondo era espectacular)
Vacío sobre compota de manzana y patata
Cuajado de melaza sobre frío de romero y cristalizados de cacao
En cuanto a vinos, hemos comenzado con un complejo e interesante blanco de Remelluri, criado sobre lías, y hemos seguido con un curioso tinto de Marqués de Cáceres (gran sorpresa)
He obligado a mis acompañantes a que posen con su muñeca. Los relojes, aunque apenas se aprecian, eran un precioso Speedmaster, un delicado Omega Deauville y mi Aero Seven Seas (pendiente de presentación).
Luego han llegado los gintonics y whiskys, y ya hemos perdido el enfoque
Yo he disfrutado mucho, y me ha apetecido compartirlo
El restaurante se llama Arbolagaña (que significa, en euskara, sobre los árboles) y el cocinero es Aitor Basabe
Última edición: