¡Buenos días, hoy sí, a todos! por fin sale el sol que la jefa estaba esperando para secar ropa.
Hoy como es domingo siempre hay menos prisas; bueno casi siempre. Por ello me voy a entretener en contar un par de historietas relojeras ya conocidas por los más antiguos del lugar. Pero como por aquí pulula mucho enjambre "león" (dícese de aquel que lee mucho), pues eso:
Iba yo un día en el principio del recorrido por el jueves, Plaza de los Carros por más señas, y me detuve en el puesto de un señor mayor, un viejete, vamos, que hacía algún tiempo que apareció por el mercadillo trayendo algunos cochambrosos y viejunos relojes. Pero solía pedir mucho precio para su valor.
Me llamó la atención poderosamente uno de ellos por su caja, de acero, robusta, contundente en una palabra. Pedí precio y la respuesta no me gustó pese a que no era descabellada del todo; regateé infructuosamente y me marché a seguir el recorrido. Pero durante todo el trayecto mi otro yo me martilleaba constantemente "tenías que habértelo traído, aunque sea para tirar las tripas; esa caja lo vale". Terminé la visita después de bastante tiempo y a la vuelta (unas dos horas después) me pasé por allí con poca confianza en que aún estuviera allí pero con la esperanza de que, como la esfera y marca no eran muy apetecibles, nadie se hubiera fijado, como yo, en la caja.
En esta segunda visita no sólo seguía allí sino que el señor mayor me rebajó unos eurillos. La excusa perfecta para llevármelo. Ni siquiera lo abrí ¿para qué? si mi interés estaba fuera .....
De allí me fuí a la obligada visita al taller de mi amigo Ángel, el relojero, y cuando se lo enseñé, y me paré a abrirlo, me encontré con una magnífica Longines en acero. No entendía de marcas con cierto caché así que su referencia interior no me decía casi nada, únicamente el reloj de arena alado me daba información. Así es que me fui directamente a la consulta del Dr. Ranfft y allí comprobé que, con esa medida, sólo podía meter dos movimientos: 12-68 en sus múltiples variantes y lo mismo con el 27. Ahora de nuevo consulta a los estudiosos de Longines del foro, que habérlos haylos, que me inclinaron primero al 12-68.
Encontré en la bahía este conjunto de movimiento, esfera y agujas en estado prístino. Tanto que hasta llegué a pensar que la esfera habría sido restaurada hacía ya años, por su color; pero no, los mismos estudiosos me confirmaron, casi al 100 x 100, que era original y excelentemente conservada. Igual que el resto del conjunto.
Una vez montado vino la segunda parte: localizarle una correa a mi gusto. Por aquella época yo estaba casi empezando a trastear con los relojes y ni tenía correas ni los precios de las máquinas, seguramente sacadas de cajas de oro que se fundieron, eran tan excesivos como hoy. Empecé a buscar por las distintas relojerías hasta que encontré esta que tiene: justo lo que yo buscaba.
Cuando enseñé el conjunto terminado a mi amigo Ángel me comentó que él conocía a quien distribuía esas correas por Sevilla al que, por cierto, hacía tiempo que no le compraba, así que se puso en contacto con él y me avisó para que yo estuviera en la relojería el día de la visita. El resto ya lo conocéis, son las afamadas correas CC (Casiná Correas) que podéis ver y adquirir en el subforo correspondiente como "correas de piel auténtica". La única diferencia está en que la que compré por ahí me costó el triple de lo que os puede costar a ustedes y, de hecho, les han costado a muchos de los amigos foreros y no tan amigos.
Y bueno, después del rollazo o ladrillo, que también se llama, las fotos:
No tengo fotos de la tapa por el interior pero su referencia es 1836. Este es uno de esos relojes que los puristas no comprarían nunca porque no fue montado por un relojero en Suiza pero ya quisieran muchos de los que sí lo fueron estar como está éste. Y como a mi eso no me preocupa lo más mínimo ....
Ahora veré los que me preceden porque mientras preparaba el "parrafito" habrán aumentado mucho.
Espero no haber aburrido demasiado. Pero si habéis llegado aquí no hay duda: abundan los masócas, je,je,je.
Un saludo desde Sevilla. ¡Casi ná!
PS. La corona no es Longines pero las que tengo de la marca no son propias de este tipo de reloj. Algún día se la cambiaré a alguno de los otros que tienen una de tetilla aunque tampoco tenga la marca.