rodilla
Milpostista
Sin verificar
Hola amigos:
Recientemente he comprado un reloj que me pareció especial. Un día yendo a ocuparme de unos asuntos profesionales, lo descubrí en el escaparate de un viejo relojero ... y no pude resistirme
Se trata de un MIMO, cuyos vínculos con Girard Perregaux son de sobra conocidos, que yo dataría como de finales de los años 30 (últimamente me atraen sobremanera los relojes de esta época).
Su particularidad es que tiene datario con doble ventana (cada uno de los dígitos cambia de forma independiente); debió ser de los primeros que tuvieron esta "complicación". El cambio de fecha se puede accionar apretando el pulsador situado en la corona.
Tiene una construcción muy esmerada: caja de acero (que me permite aventurar que es anterior a la II Guerra Mundial), con tapa curvada, y cristal mineral, así como una robusta corona estriada y un grosor considerable.
La esfera, color salmón, presenta alguna "picadura", pero es fiel reflejo del estilo decó que imperaba en los años veinte y treinta del siglo pasado.
La correa es la original, fijaos qué bonita hebilla.
Su calibre es, asimismo, de magnífica factura. Mirad el sistema "antichoque" y el generoso rubí que corona el volante.
En fin, que fue amor a primera vista
Disculpad las fotos,
Recientemente he comprado un reloj que me pareció especial. Un día yendo a ocuparme de unos asuntos profesionales, lo descubrí en el escaparate de un viejo relojero ... y no pude resistirme
Se trata de un MIMO, cuyos vínculos con Girard Perregaux son de sobra conocidos, que yo dataría como de finales de los años 30 (últimamente me atraen sobremanera los relojes de esta época).
Su particularidad es que tiene datario con doble ventana (cada uno de los dígitos cambia de forma independiente); debió ser de los primeros que tuvieron esta "complicación". El cambio de fecha se puede accionar apretando el pulsador situado en la corona.
Tiene una construcción muy esmerada: caja de acero (que me permite aventurar que es anterior a la II Guerra Mundial), con tapa curvada, y cristal mineral, así como una robusta corona estriada y un grosor considerable.
La esfera, color salmón, presenta alguna "picadura", pero es fiel reflejo del estilo decó que imperaba en los años veinte y treinta del siglo pasado.
La correa es la original, fijaos qué bonita hebilla.
Su calibre es, asimismo, de magnífica factura. Mirad el sistema "antichoque" y el generoso rubí que corona el volante.
En fin, que fue amor a primera vista
Disculpad las fotos,