oldchrono
Magister Collector
Sin verificar
EL OLD CHRONO DE OLDCHRONO
¡Hola amigos!
Pensé que era tiempo de presentarles al viejo reloj que figura en mi “avatar” del Foro.
Cuando me suscribí a este querido Foro (decisión de la cual estoy tan feliz de haber tomado ) me puse a pensar en un seudónimo apropiado a las circunstancias.
Como una de las variantes de reloj que más me atraen, son los cronógrafos vintage, pensé que “Old Chrono” (Viejo Cronógrafo) sería un buen nombre que representara mis gustos, y para participar en este foro. Y para la foto del avatar, elegí al viejo cronógrafo que les presento ahora.
Siempre consideré que el cronógrafo es una de las tipologías más interesantes, entre las muchas variantes que ofrecen los relojes.
Ciertamente, un cronógrafo mecánico, es en esta época algo anacrónico.
Los cronógrafos de cuarzo, con lectura digital y con posibilidades de medir tiempos en décimas, centésimas y hasta milésimas de segundo, son los empleados actualmente en los campos científicos, militares o deportivos.
El cronógrafo mecánico, y de pulso, tiene hoy grandes limitaciones, si lo comparamos con los digitales, no en exactitud o en precisión, pero sí en cuanto a la lectura y a las fracciones de tiempo que pueden medirse con ellos.
Para ser francos, creo que un cronógrafo es en realidad, un juguete –un juguete muy caro por cierto- con el que nosotros, los amantes de los relojes jugamos o nos distraemos, observando su trotadora recorriendo el dial, mientras sus sub diales acumulan horas y minutos de manera casi hipnotizante.
¿Cuántos propietarios de cronógrafos emplean sus relojes en tareas más o menos serias de medición del tiempo, o en sus profesiones?
Creo que si nos sinceramos, son muy pocos quienes los emplean para ello.
En lo personal, más allá de medir, con exactitud casi maniática, cuando cocino huevos hervidos durante estrictos tres minutos y 30 segundos, son muy escasas las ocasiones en que lo empleo para medir tiempos por necesidad verdadera, pero sí los activo muchas veces, por el mero placer de observarlo trabajar y acumular los tiempos transcurridos.
Entre los “cronógrafos vintage” creo que nada puede superar la estética de aquellos clásicos fabricados en los años 1940 a 1960´s por Patek Philippe y Rolex.
Tanto sus cajas, como sus diales, son sencillamente, maravillosos.
Obviamente, sus movimientos son fantásticos aunque en el caso de Rolex, esta prestigiosa casa recurría a otras firmas, para la provisión de sus máquinas, mientras que para su línea “normal” empleaba calibres propios.
Lamentablemente, los cronos de estas marcas, adquieren hoy día, valores astronómicos en el mercado del coleccionista, y se alejan por mucho a mis posibilidades de poseer uno.
Por cierto que hubo numerosas otras marcas de la misma época, que produjeron extraordinarios relojes cronógrafos, como Omega, Movado, Longines, Heuer, Breitling, etc..
Estos relojes poseen diseños bellísimos, y sus movimientos no le van en saga. Lógicamente, los cronógrafos de estas marcas también alcanzan hoy día precios muy altos en el mercado, aunque son mucho más accesibles que las dos marcas mencionadas anteriormente.
Para aplacar mi sed por los “old chronos”, y mantenerme dentro de los estrictos límites de mi presupuesto, me ví obligado a investigar un poco, y descubrir (bueno, lo de descubrir es un eufemismo, pues seguramente la mayoría de los que transitan este Foro, ya lo saben desde bastante antes que yo me diera cuenta) que existe un interesante nicho ocupado por ciertas marcas mucho menos conocidas, algunas bautizadas con nombres genéricos como “Chronographe Swisse” o similares, o bien otras marcas de fantasía, y equipados con movimientos Valjoux u otros, y de calidad general muy aceptable.
Lo más importante para mí, es que, además de funcionar razonablemente bien, ofrecen una estética sumamente atractiva, y acorde a la época que hablamos, es decir, años 1950 a 60, realmente encantadores en sus cajas y diales.
Y para redondear el encanto de hallar una pieza de estas, encontramos que sus precios son usualmente, bastante accesibles.
Fue así que he adquirido a través de los años, algunos pocos cronógrafos de esta categoría que, si bien muy lejos de la calidad de materiales, terminación, movimientos, etc, de las marcas de gran prestigio y alta relojería mencionadas anteriormente, funcionan y muy bien, y brindan ese placer especial de ver sus trotadoras y agujas secundarias trabajando sobre diales preciosos, con sus escalas de distintos colores, y con diferentes aplicaciones.
En el caso específico del Old Chrono de Oldchrono, se trata de un Ardath, una marca poco conocida, aunque he observado en posts anteriores, un delicioso ejemplar de dama, presentado por un estimado colega, que permitía el cambio de sus exteriores y correas, y algun otro interesante ejemplar fue presentado en el abecedario de vintages, junto con datos sobre la historia de la firma.
Este modelo que muestro, habría sido fabricado hacia aproximadamente principios de 1940´s y posee dos sub diales, a las 3 el acumulador de minutos (hasta 45 minutos) y a las 9 el pequeño segundero. En el centro del dial, posee una escala taquimétrica (para medir velocidades) de tipo “caracol”, graduada hasta 360 unidades (Km/h o M/h) mientras que en el borde del dial, ofrece una escala telemétrica (para medir distancias).
La escala de minutos, se advierte sobre un círculo de color marfil, de igual color de la escala central, separada del dial por un “anillo” color plata pulida. La caja es de oro rosa 18K, y posee asas con pasador fijo, por lo cual requiere de unas correas especiales para este tipo de asas.
Las de este reloj, son “custom” de la prestigiosa casa alemana Jurguens, a quien se las encargué epecialmente, del Modelo “DH” (Deutche Heer), en piel de búfalo color chocolate de hermosa textura granulada.
Me gustan estas correas por su buen espesor, y las de esta marca me han resultado siempre excelentes, al igual que el servicio que ofrecen, por lo que me permito recomendarlas sin dudar. (Si estais interesados en explorar esta marca, os doy el link, donde encontraran numerosas variantes de correas de piel, y hasta milanesas que ofrece esta marca:
)
Muestro la máquina, cuyo estado no es un dechado de virtudes, pero que funciona perfectamente, y hace funcionar al relojito muy satisfactoriamente. Seguramente los amigos del Foro sabrán identificar la marca del movimiento.
(Como verán, ya me estoy animando a abrir algunos relojes. Por ahora, sólo los de tapa a presión. Ya veré mas adelante si progreso y asciendo en mi escala de conocimientos básicos, como para animarme a las tapas a rosca.)
Espero que os guste el reloj que me identifica en este querido Foro, y si algún colega, puede aportar algún dato de interés sobre su movimiento, su época de fabricación, y otra información adicional, quedo desde ya sumamente agradecido.
Estoy seguro que los amigos de los vintage son también aficionados a los viejos cronos (el amigo Agustí ya ha mostrado algunos fabulosos ejemplares de su colección), y los invito a mostrar los vuestros en este hilo, a quienes gusten aportar sus fotos.
Les envío un afectuoso saludo, muy cordialmente, Tonin.
¡Hola amigos!
Pensé que era tiempo de presentarles al viejo reloj que figura en mi “avatar” del Foro.
Cuando me suscribí a este querido Foro (decisión de la cual estoy tan feliz de haber tomado ) me puse a pensar en un seudónimo apropiado a las circunstancias.
Como una de las variantes de reloj que más me atraen, son los cronógrafos vintage, pensé que “Old Chrono” (Viejo Cronógrafo) sería un buen nombre que representara mis gustos, y para participar en este foro. Y para la foto del avatar, elegí al viejo cronógrafo que les presento ahora.
Siempre consideré que el cronógrafo es una de las tipologías más interesantes, entre las muchas variantes que ofrecen los relojes.
Ciertamente, un cronógrafo mecánico, es en esta época algo anacrónico.
Los cronógrafos de cuarzo, con lectura digital y con posibilidades de medir tiempos en décimas, centésimas y hasta milésimas de segundo, son los empleados actualmente en los campos científicos, militares o deportivos.
El cronógrafo mecánico, y de pulso, tiene hoy grandes limitaciones, si lo comparamos con los digitales, no en exactitud o en precisión, pero sí en cuanto a la lectura y a las fracciones de tiempo que pueden medirse con ellos.
Para ser francos, creo que un cronógrafo es en realidad, un juguete –un juguete muy caro por cierto- con el que nosotros, los amantes de los relojes jugamos o nos distraemos, observando su trotadora recorriendo el dial, mientras sus sub diales acumulan horas y minutos de manera casi hipnotizante.
¿Cuántos propietarios de cronógrafos emplean sus relojes en tareas más o menos serias de medición del tiempo, o en sus profesiones?
Creo que si nos sinceramos, son muy pocos quienes los emplean para ello.
En lo personal, más allá de medir, con exactitud casi maniática, cuando cocino huevos hervidos durante estrictos tres minutos y 30 segundos, son muy escasas las ocasiones en que lo empleo para medir tiempos por necesidad verdadera, pero sí los activo muchas veces, por el mero placer de observarlo trabajar y acumular los tiempos transcurridos.
Entre los “cronógrafos vintage” creo que nada puede superar la estética de aquellos clásicos fabricados en los años 1940 a 1960´s por Patek Philippe y Rolex.
Tanto sus cajas, como sus diales, son sencillamente, maravillosos.
Obviamente, sus movimientos son fantásticos aunque en el caso de Rolex, esta prestigiosa casa recurría a otras firmas, para la provisión de sus máquinas, mientras que para su línea “normal” empleaba calibres propios.
Lamentablemente, los cronos de estas marcas, adquieren hoy día, valores astronómicos en el mercado del coleccionista, y se alejan por mucho a mis posibilidades de poseer uno.
Por cierto que hubo numerosas otras marcas de la misma época, que produjeron extraordinarios relojes cronógrafos, como Omega, Movado, Longines, Heuer, Breitling, etc..
Estos relojes poseen diseños bellísimos, y sus movimientos no le van en saga. Lógicamente, los cronógrafos de estas marcas también alcanzan hoy día precios muy altos en el mercado, aunque son mucho más accesibles que las dos marcas mencionadas anteriormente.
Para aplacar mi sed por los “old chronos”, y mantenerme dentro de los estrictos límites de mi presupuesto, me ví obligado a investigar un poco, y descubrir (bueno, lo de descubrir es un eufemismo, pues seguramente la mayoría de los que transitan este Foro, ya lo saben desde bastante antes que yo me diera cuenta) que existe un interesante nicho ocupado por ciertas marcas mucho menos conocidas, algunas bautizadas con nombres genéricos como “Chronographe Swisse” o similares, o bien otras marcas de fantasía, y equipados con movimientos Valjoux u otros, y de calidad general muy aceptable.
Lo más importante para mí, es que, además de funcionar razonablemente bien, ofrecen una estética sumamente atractiva, y acorde a la época que hablamos, es decir, años 1950 a 60, realmente encantadores en sus cajas y diales.
Y para redondear el encanto de hallar una pieza de estas, encontramos que sus precios son usualmente, bastante accesibles.
Fue así que he adquirido a través de los años, algunos pocos cronógrafos de esta categoría que, si bien muy lejos de la calidad de materiales, terminación, movimientos, etc, de las marcas de gran prestigio y alta relojería mencionadas anteriormente, funcionan y muy bien, y brindan ese placer especial de ver sus trotadoras y agujas secundarias trabajando sobre diales preciosos, con sus escalas de distintos colores, y con diferentes aplicaciones.
En el caso específico del Old Chrono de Oldchrono, se trata de un Ardath, una marca poco conocida, aunque he observado en posts anteriores, un delicioso ejemplar de dama, presentado por un estimado colega, que permitía el cambio de sus exteriores y correas, y algun otro interesante ejemplar fue presentado en el abecedario de vintages, junto con datos sobre la historia de la firma.
Este modelo que muestro, habría sido fabricado hacia aproximadamente principios de 1940´s y posee dos sub diales, a las 3 el acumulador de minutos (hasta 45 minutos) y a las 9 el pequeño segundero. En el centro del dial, posee una escala taquimétrica (para medir velocidades) de tipo “caracol”, graduada hasta 360 unidades (Km/h o M/h) mientras que en el borde del dial, ofrece una escala telemétrica (para medir distancias).
La escala de minutos, se advierte sobre un círculo de color marfil, de igual color de la escala central, separada del dial por un “anillo” color plata pulida. La caja es de oro rosa 18K, y posee asas con pasador fijo, por lo cual requiere de unas correas especiales para este tipo de asas.
Las de este reloj, son “custom” de la prestigiosa casa alemana Jurguens, a quien se las encargué epecialmente, del Modelo “DH” (Deutche Heer), en piel de búfalo color chocolate de hermosa textura granulada.
Me gustan estas correas por su buen espesor, y las de esta marca me han resultado siempre excelentes, al igual que el servicio que ofrecen, por lo que me permito recomendarlas sin dudar. (Si estais interesados en explorar esta marca, os doy el link, donde encontraran numerosas variantes de correas de piel, y hasta milanesas que ofrece esta marca:
Muestro la máquina, cuyo estado no es un dechado de virtudes, pero que funciona perfectamente, y hace funcionar al relojito muy satisfactoriamente. Seguramente los amigos del Foro sabrán identificar la marca del movimiento.
(Como verán, ya me estoy animando a abrir algunos relojes. Por ahora, sólo los de tapa a presión. Ya veré mas adelante si progreso y asciendo en mi escala de conocimientos básicos, como para animarme a las tapas a rosca.)
Espero que os guste el reloj que me identifica en este querido Foro, y si algún colega, puede aportar algún dato de interés sobre su movimiento, su época de fabricación, y otra información adicional, quedo desde ya sumamente agradecido.
Estoy seguro que los amigos de los vintage son también aficionados a los viejos cronos (el amigo Agustí ya ha mostrado algunos fabulosos ejemplares de su colección), y los invito a mostrar los vuestros en este hilo, a quienes gusten aportar sus fotos.
Les envío un afectuoso saludo, muy cordialmente, Tonin.
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