rodri007
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Sin verificar
En las fiestas de Semana Santa de 1992 aterrizé en Estambul, después de más de un año sin poder salir de Siria, por asuntos de "vecindad" en la primera Guerra del Golfo.
Estambul me encantó, el clima estuvo genial y encima iba con una medio-novia, que años después sería mi mujer (la segunda). También iba con una tremenda gana de Fiesta.
Entre otras muchas cosas, era inevitable la visita al Gran Bazar, dónde poco había de interés si vienes de frecuentar los Zocos de Alepo y de Damasco.
Encontré un puesto de relojes, cosa que no me interesaba en absoluto en aquel entonces (con dos Eterna de pilas y un Omega automático que tenía ... estaba más que servido), y me fijé en un Omega dorado de esfera negra y un buen tamaño. La esfera
parecía, y parece, como una calcomanía...(que diría Nando).
No recuerdo lo que me pidieron por el reloj....pasaron 26 años ....pero me pareció muchísimo: la esfera la veía muy cara, la corona no era la suya y estaba muy gastada. Encima había que darle cuerda.
Por más que lo intentamos, y con varias tazas de té por medio,
el reloj negrito se quedó dónde estaba y yo me fuí a un puesto cercano a comprar un bolso de viaje de piel, que fue de lo poco que encontré diferente.
Mientras mi chica "ronroneaba" por los al rededores.
Más tarde, a los postres de un almuerzo en una bonita terraza
junto al Bósforo, mi chica me entregó una bolsita de fieltro.
Dentro estaba el Omega negrito y fuera, frente a mi, sus ojos verdes que brillaban como las esmeraldas del cercano Palacio Tokkapi.
La madre que la parió.... Aquello me dejó un poco grogi y, aunque el reloj no me parecía "trigo limpio" lo adopté de corazón, nunca mejor dicho.
Luego en Damasco, un veterano relojero Armenio nos dijo que el reloj estaba bien, que tenía un calibre Omega 283, que estaba chapado en 80 micrones (???) y que debía de haber sido de "una persona importante" pues tenía grabado un nombre en árabe y en latin, algo normal en la Turquía de ya hace años: Mohamed Mofiz.
La corona dijo el armenio que mejor dejarla, pues aunque "cantaba" bastante, se veía muy antigua, estaba gastada, pero que corría bien (??????).
Y el viaje a Estambul terminó rápido, como casi todo lo que es bonito, y yo volví con un bolso de viaje que aún conservo, un reloj mú raro y un corazón galopando por el Cuerno de Oro.
****************************
Un par de años después , allá por 1994, entra en mi despacho un Ordenanza, al que yo apreciaba mucho en el trabajo, por su lealtad y eficacia.
Me dice...."Sr. Bernardo...se va a casar mi hija pequeña y necesito algo de dinero".
" o.k. no hay problema, cuanto necesitaría".
Se echa mano al bolsillo, saca un reloj Omega un poco extraño, y me dice : "le parece bien 200 dólares" ???.
Le contéste que tendría 200 $ ipso facto, pero que guardase el reloj.
"Al marcharse, me lo regaló el Jefe X...., le tengo a vd. mucho aprecio. Es lo único de valor que tengo y me gustaría que se lo quedase". Y así fue.
200 lereles era entonces el sueldo de dos meses para un sirio, a este buen hombre le ayudaban a casar a su hija y yo tendría de él un bonito recuerdo.
También es grandecito, tiene una esfera "achampanada", imagino que restaurada sabe Dios cuando y con la esfera con menos datos que una liebre.
La corona es original y un calibre
265 en buen estado, del que os pido, por favor, algo de info. La navaja de Don Benito está que no para quieta. Jjjjjjjj
Y colorin colorado...estos cuentos se han acabado. Ya veis que "no todo el monte es orégano" y que de todo hay.... en las viñas de Valdepeñas".
A veces hay detalles que motivan que a algunos de nuestros viejitos le tengamos un cariño muy especial por motivos "del corazón".
Ojalá que tod@s pasárais un estupendo fin de semana.
Saludo a Kurt Cobain y a mi tía Felixa.
Estambul me encantó, el clima estuvo genial y encima iba con una medio-novia, que años después sería mi mujer (la segunda). También iba con una tremenda gana de Fiesta.
Entre otras muchas cosas, era inevitable la visita al Gran Bazar, dónde poco había de interés si vienes de frecuentar los Zocos de Alepo y de Damasco.
Encontré un puesto de relojes, cosa que no me interesaba en absoluto en aquel entonces (con dos Eterna de pilas y un Omega automático que tenía ... estaba más que servido), y me fijé en un Omega dorado de esfera negra y un buen tamaño. La esfera
parecía, y parece, como una calcomanía...(que diría Nando).
No recuerdo lo que me pidieron por el reloj....pasaron 26 años ....pero me pareció muchísimo: la esfera la veía muy cara, la corona no era la suya y estaba muy gastada. Encima había que darle cuerda.
Por más que lo intentamos, y con varias tazas de té por medio,
el reloj negrito se quedó dónde estaba y yo me fuí a un puesto cercano a comprar un bolso de viaje de piel, que fue de lo poco que encontré diferente.
Mientras mi chica "ronroneaba" por los al rededores.
Más tarde, a los postres de un almuerzo en una bonita terraza
junto al Bósforo, mi chica me entregó una bolsita de fieltro.
Dentro estaba el Omega negrito y fuera, frente a mi, sus ojos verdes que brillaban como las esmeraldas del cercano Palacio Tokkapi.
La madre que la parió.... Aquello me dejó un poco grogi y, aunque el reloj no me parecía "trigo limpio" lo adopté de corazón, nunca mejor dicho.
Luego en Damasco, un veterano relojero Armenio nos dijo que el reloj estaba bien, que tenía un calibre Omega 283, que estaba chapado en 80 micrones (???) y que debía de haber sido de "una persona importante" pues tenía grabado un nombre en árabe y en latin, algo normal en la Turquía de ya hace años: Mohamed Mofiz.
La corona dijo el armenio que mejor dejarla, pues aunque "cantaba" bastante, se veía muy antigua, estaba gastada, pero que corría bien (??????).
Y el viaje a Estambul terminó rápido, como casi todo lo que es bonito, y yo volví con un bolso de viaje que aún conservo, un reloj mú raro y un corazón galopando por el Cuerno de Oro.
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Un par de años después , allá por 1994, entra en mi despacho un Ordenanza, al que yo apreciaba mucho en el trabajo, por su lealtad y eficacia.
Me dice...."Sr. Bernardo...se va a casar mi hija pequeña y necesito algo de dinero".
" o.k. no hay problema, cuanto necesitaría".
Se echa mano al bolsillo, saca un reloj Omega un poco extraño, y me dice : "le parece bien 200 dólares" ???.
Le contéste que tendría 200 $ ipso facto, pero que guardase el reloj.
"Al marcharse, me lo regaló el Jefe X...., le tengo a vd. mucho aprecio. Es lo único de valor que tengo y me gustaría que se lo quedase". Y así fue.
200 lereles era entonces el sueldo de dos meses para un sirio, a este buen hombre le ayudaban a casar a su hija y yo tendría de él un bonito recuerdo.
También es grandecito, tiene una esfera "achampanada", imagino que restaurada sabe Dios cuando y con la esfera con menos datos que una liebre.
La corona es original y un calibre
265 en buen estado, del que os pido, por favor, algo de info. La navaja de Don Benito está que no para quieta. Jjjjjjjj
Y colorin colorado...estos cuentos se han acabado. Ya veis que "no todo el monte es orégano" y que de todo hay.... en las viñas de Valdepeñas".
A veces hay detalles que motivan que a algunos de nuestros viejitos le tengamos un cariño muy especial por motivos "del corazón".
Ojalá que tod@s pasárais un estupendo fin de semana.
Saludo a Kurt Cobain y a mi tía Felixa.
