rgil
Milpostista
Sin verificar
Este reloj me lo regalaron hace ya bastante tiempo, pero que no he querido usarlo hasta que estuviera limpio y aceitado. Tenia, ademas, mucho interés en conocer su funcionamiento.
Como casi todos sabréis ya, este cronógrafo tiene una peculiaridad importante.
Supongo que en un afán de simplificar la construcción del reloj, carece de una aguja de segundos que funcione de forma permanente.
Solo tiene la aguja de segundos trotadora del crono, que cuando el crono esta en marcha, se mueve y cuando esta parado, la aguja también esta parada.
Como reloj y como crono, es perfectamente operacional y lo único es que, con el crono parado, se echa en falta una aguja que se vea girando. Supongo que es cuestión de costumbre.
A cambio de este detalle, el reloj tiene una arquitectura sumamente sencilla y pienso que quien lo diseñó, puede estar realmente orgulloso de su creación.
La platina es prácticamente igual que la de un Seiko normal, sin crono. Apenas hay modificaciones debidas al mecanismo del cronógrafo.
El numero de piezas es relativamente reducido para ser un cronógrafo, aunque alguna de ellas es bastante compleja.
El resto de las piezas, las que no son especificas del mecanismo cronógrafo, muchas de ellas son iguales o muy parecidas a las de otros movimientos de Seiko, mas sencillos. Algunas de ellas incluso han sido simplificadas.
Este reloj no admite el remonte manual y sus piezas son comunes a otros muchos modelos de Seiko.
La tija tiene tres posiciones, para la puesta en hora y el cambio rápido de la fecha y giro del bisel interno del pulsómetro.
La rueda de centro tiene un pequeño puente para ella sola, como es habitual en la marca.
El resto de la rodadura también es muy similar a otros movimientos Seiko.
Solo la rueda de segundos es muy distinta a lo habitual.
Esta rueda es el quiz de este diseño.
La punta del eje tiene dos lados aplanados, para que la aguja trotadora no pueda resbalar. Este es un detalle muy bueno.
El piñón y la rueda que quedan a la vista en esta imagen son totalmente normales.
El piñón y la rueda se mueven solidarios el uno con el otro y cumplen perfectamente con el trabajo que habitualmente hace una rueda de segundos.
Por el otro lado, el eje tiene un sistema de embrague que permite que el propio eje (y las piezas que quedan por encima, en esta imagen), o bien giren con la rueda, o bien estén detenidos.
Este embrague está formado por la pieza que queda entre las flechas rojas.
Cuando ciertas piezas empujan, igual que lo harían las dos flechas rojas de la imagen, el disco brillante que hay entre ellas se separa de la rueda dentada, pues las paredes de este disco brillante están inclinadas (son tronco-cónicas) para que se produzca este efecto.
Entonces, el conjunto rueda-piñón gira libremente mientras el eje y todas las demás piezas quedan detenidas.
Hay que tener en cuenta que, el conjunto rueda-piñón están siempre girando, pues de lo contrario el reloj se pararía, al igual que en cualquier otro reloj con segundero central.
El truco está en que podemos hacer que el eje también gire, (crono funcionando) o que esté parado (crono detenido).
Está es una idea diabólicamente simple para conseguir un mecanismo cronógrafo.
En contrapartida, esta pieza es bastante compleja. El disco brillante lleva un resorte, remachado por dentro, que lo aprieta contra la rueda.
Por encima del disco brillante lleva la pieza en forma de corazón, llamada cama, que permite poner a cero al eje.
Por encima de la cama está la pieza que empuja a la rueda contadora. En cada giro completo su largo brazo empuja un diente de la rueda contadora.
El tornillo sirve para reglaje, de forma que la rueda contadora se mueva justo cuando cuando la trotadora pasa por las 12.
En la siguiente secuencia de cinco imágenes, el eje está sujeto, por sus caras aplanadas, de forma que no gira.
Vemos que mientras la rueda si que va girando, de una imagen a la siguiente, el resto de las piezas, al igual que el eje, están parados.
Colocamos el barrilete y un gran puente que sujeta todas las piezas, excepto nuestra peculiar rueda de segundos, que queda en el centro, sobresaliendo.
Este puente lleva remachadas un muelle, para fijar la rueda de pilares y dos palancas del sistema crono, la que hace girar a la rueda de pilares y la que empuja al martillo de la puesta a cero. Las tres piezas están muy cerca de la tija.
Un compañero, relojero, de otro foro me indicó hace tiempo que ahora lo correcto es continuar montando el mecanismo normal de reloj, para estar seguro de que funciona bien, antes de montar el sistema crono.
Así que monto el rochete y su trinquete, para que el barrilete tenga fuerza.
También, solo de forma provisional, monto otro puente mas, para que la rueda de segundos+de cronógrafo, tenga el puente que le hace de buje.
Ahora podemos colocar el ancora
En su lugar
Y el volante, cuyo puente se apoya en la pletina por dos lados.
Como es habitual en los anti-choques, los rubíes están fuera y deben de ser aceitados.
Y montados en su lugar
Y lo mismo por el lado de la platina.
Con todo esto hecho, el volante oscila vivamente
Como siempre, espero que os haya entretenido.
Continuará...
Como casi todos sabréis ya, este cronógrafo tiene una peculiaridad importante.
Supongo que en un afán de simplificar la construcción del reloj, carece de una aguja de segundos que funcione de forma permanente.
Solo tiene la aguja de segundos trotadora del crono, que cuando el crono esta en marcha, se mueve y cuando esta parado, la aguja también esta parada.
Como reloj y como crono, es perfectamente operacional y lo único es que, con el crono parado, se echa en falta una aguja que se vea girando. Supongo que es cuestión de costumbre.
A cambio de este detalle, el reloj tiene una arquitectura sumamente sencilla y pienso que quien lo diseñó, puede estar realmente orgulloso de su creación.
La platina es prácticamente igual que la de un Seiko normal, sin crono. Apenas hay modificaciones debidas al mecanismo del cronógrafo.
El numero de piezas es relativamente reducido para ser un cronógrafo, aunque alguna de ellas es bastante compleja.
El resto de las piezas, las que no son especificas del mecanismo cronógrafo, muchas de ellas son iguales o muy parecidas a las de otros movimientos de Seiko, mas sencillos. Algunas de ellas incluso han sido simplificadas.
Este reloj no admite el remonte manual y sus piezas son comunes a otros muchos modelos de Seiko.
La tija tiene tres posiciones, para la puesta en hora y el cambio rápido de la fecha y giro del bisel interno del pulsómetro.
La rueda de centro tiene un pequeño puente para ella sola, como es habitual en la marca.
El resto de la rodadura también es muy similar a otros movimientos Seiko.
Solo la rueda de segundos es muy distinta a lo habitual.
Esta rueda es el quiz de este diseño.
La punta del eje tiene dos lados aplanados, para que la aguja trotadora no pueda resbalar. Este es un detalle muy bueno.
El piñón y la rueda que quedan a la vista en esta imagen son totalmente normales.
El piñón y la rueda se mueven solidarios el uno con el otro y cumplen perfectamente con el trabajo que habitualmente hace una rueda de segundos.
Por el otro lado, el eje tiene un sistema de embrague que permite que el propio eje (y las piezas que quedan por encima, en esta imagen), o bien giren con la rueda, o bien estén detenidos.
Este embrague está formado por la pieza que queda entre las flechas rojas.
Cuando ciertas piezas empujan, igual que lo harían las dos flechas rojas de la imagen, el disco brillante que hay entre ellas se separa de la rueda dentada, pues las paredes de este disco brillante están inclinadas (son tronco-cónicas) para que se produzca este efecto.
Entonces, el conjunto rueda-piñón gira libremente mientras el eje y todas las demás piezas quedan detenidas.
Hay que tener en cuenta que, el conjunto rueda-piñón están siempre girando, pues de lo contrario el reloj se pararía, al igual que en cualquier otro reloj con segundero central.
El truco está en que podemos hacer que el eje también gire, (crono funcionando) o que esté parado (crono detenido).
Está es una idea diabólicamente simple para conseguir un mecanismo cronógrafo.
En contrapartida, esta pieza es bastante compleja. El disco brillante lleva un resorte, remachado por dentro, que lo aprieta contra la rueda.
Por encima del disco brillante lleva la pieza en forma de corazón, llamada cama, que permite poner a cero al eje.
Por encima de la cama está la pieza que empuja a la rueda contadora. En cada giro completo su largo brazo empuja un diente de la rueda contadora.
El tornillo sirve para reglaje, de forma que la rueda contadora se mueva justo cuando cuando la trotadora pasa por las 12.
En la siguiente secuencia de cinco imágenes, el eje está sujeto, por sus caras aplanadas, de forma que no gira.
Vemos que mientras la rueda si que va girando, de una imagen a la siguiente, el resto de las piezas, al igual que el eje, están parados.
Colocamos el barrilete y un gran puente que sujeta todas las piezas, excepto nuestra peculiar rueda de segundos, que queda en el centro, sobresaliendo.
Este puente lleva remachadas un muelle, para fijar la rueda de pilares y dos palancas del sistema crono, la que hace girar a la rueda de pilares y la que empuja al martillo de la puesta a cero. Las tres piezas están muy cerca de la tija.
Un compañero, relojero, de otro foro me indicó hace tiempo que ahora lo correcto es continuar montando el mecanismo normal de reloj, para estar seguro de que funciona bien, antes de montar el sistema crono.
Así que monto el rochete y su trinquete, para que el barrilete tenga fuerza.
También, solo de forma provisional, monto otro puente mas, para que la rueda de segundos+de cronógrafo, tenga el puente que le hace de buje.
Ahora podemos colocar el ancora
En su lugar
Y el volante, cuyo puente se apoya en la pletina por dos lados.
Como es habitual en los anti-choques, los rubíes están fuera y deben de ser aceitados.
Y montados en su lugar
Y lo mismo por el lado de la platina.
Con todo esto hecho, el volante oscila vivamente
Como siempre, espero que os haya entretenido.
Continuará...
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