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Forer@ Senior
Sin verificar
Esta máquina corresponde a un reloj Neuchateloise o Neuchatelino y tiene más de doscientos años pero se encuentra en un estado excepcional, aunque a falta de una buena limpieza de los restos de aceite seco y posterior engrase. Las fotos están sacadas antes de su limpieza y en alguna pueden verse restos de aceite completamente resecos, que si no se eliminan terminarán perjudicando a los ejes-buchones.
Este reloj tiene las siguientes funciones:
Cuando está funcionando suenan los cuartos para lo que utiliza dos mazas que golpean sobre dos gongs, pero a la hora solo lo hace con una tal como es habitual en estos relojes que no suenan los cuatro cuartos en la hora en punto.
También tiene sonería a la demanda, que se activa estirando hasta que haga tope de una cuerdecita situada en el lateral izquierdo. Primero suena la hora y después los cuartos que correspondan, y lo hace con otras dos mazas diferentes a las anteriores, y para esta función tiene un tren de sonería diferente al anterior.
Y por último también tiene despertador o alarma para lo que tiene otro tren de sonería con la propia maza que golpea sobre campana, y se carga el sistema estirando de la cuerdecita situada en el lateral derecho, y se selecciona la hora a la que se desea que suene con una aguja situada en la esfera. En esta época, e incluso mucho después tal como ocurre en los Morez, para seleccionar la hora del despertador su utilizaba un disco numerado colocado en el eje central donde se indica dentro de cuantas horas queremos que suene, pero en este que os presento se coloca la aguja del despertador directamente en la hora que sonará, tal como ocurre en los despertadores vintage.
Si a esto le añadimos el tren del movimiento, se juntan tal cantidad de piezas que deben coordinarse entre sí para que todo funcione bien, que me resulta imprescindible sacar fotos antes de comenzar a desmontarlo. Aún así, a la hora de montar hay que tener en cuenta no solo donde va cada pieza sino también la posición concreta en la que debe engranar alguna rueda y esto requiere probar e incluso desmontar alguna vez hasta que todo marche bien. Para poder hacer este trabajo es imprescindible comprender qué función tiene cada pieza y cómo la hace.
Una característica curiosa de este reloj es que tiene limitadores de vueltas para el eje de los resortes colocados en el barrilete, lo que permite descargar fácilmente toda la tensión del tren correspondiente pero manteniendo la tensión dentro del barrilete en todo el recorrido que le permite el limitador y el reloj puede funcionar con una fuerza bastante constante.
Como puede verse la calidad del trabajo en cada pieza es muy elevada, todas están pulidas con un brillo espejo, y doscientos años después de su construcción brillan como si estuvieran recién construidas.
En la última foto que corresponde a la tapa de un barrilete se pueden ver inscripciones de relojeros con fechas en las que limpiaron y revisaron este reloj, y la más antigua dice que se limpió el 24 de julio del año 1.839. Nunca se me ha ocurrido poner una inscripción en un reloj, y en este tampoco lo he hecho.
Una característica de los relojes Neuchateloise, tal como he comentado en otro hilo anterior es la gran cantidad de piezas del sistema de sonería situados en el exterior de la platina posterior, y en este caso es especialmente llamativo.
A continuación algunas fotos.
Un saludo.
Esfera con donde se pueden ver las agujas de horas, minutos y despertador.
Máquina vista de frente.
Vista posterior.
Lateral derecho.
Otra vista posterior donde se ven las cinco mazas y se aprecia el brillo de todas las piezas.
El exterior de la platina posterior después de retirar todas las piezas excepto los muelles que las accionan.
Después de retirar la platina posterior. Se aprecian bien los aceites resecos en diferentes partes.
Detalle del limitador situado en el barrilete.
Inscripciones de relojeros que alguna vez hicieron mantenimiento de este reloj.
Este reloj tiene las siguientes funciones:
Cuando está funcionando suenan los cuartos para lo que utiliza dos mazas que golpean sobre dos gongs, pero a la hora solo lo hace con una tal como es habitual en estos relojes que no suenan los cuatro cuartos en la hora en punto.
También tiene sonería a la demanda, que se activa estirando hasta que haga tope de una cuerdecita situada en el lateral izquierdo. Primero suena la hora y después los cuartos que correspondan, y lo hace con otras dos mazas diferentes a las anteriores, y para esta función tiene un tren de sonería diferente al anterior.
Y por último también tiene despertador o alarma para lo que tiene otro tren de sonería con la propia maza que golpea sobre campana, y se carga el sistema estirando de la cuerdecita situada en el lateral derecho, y se selecciona la hora a la que se desea que suene con una aguja situada en la esfera. En esta época, e incluso mucho después tal como ocurre en los Morez, para seleccionar la hora del despertador su utilizaba un disco numerado colocado en el eje central donde se indica dentro de cuantas horas queremos que suene, pero en este que os presento se coloca la aguja del despertador directamente en la hora que sonará, tal como ocurre en los despertadores vintage.
Si a esto le añadimos el tren del movimiento, se juntan tal cantidad de piezas que deben coordinarse entre sí para que todo funcione bien, que me resulta imprescindible sacar fotos antes de comenzar a desmontarlo. Aún así, a la hora de montar hay que tener en cuenta no solo donde va cada pieza sino también la posición concreta en la que debe engranar alguna rueda y esto requiere probar e incluso desmontar alguna vez hasta que todo marche bien. Para poder hacer este trabajo es imprescindible comprender qué función tiene cada pieza y cómo la hace.
Una característica curiosa de este reloj es que tiene limitadores de vueltas para el eje de los resortes colocados en el barrilete, lo que permite descargar fácilmente toda la tensión del tren correspondiente pero manteniendo la tensión dentro del barrilete en todo el recorrido que le permite el limitador y el reloj puede funcionar con una fuerza bastante constante.
Como puede verse la calidad del trabajo en cada pieza es muy elevada, todas están pulidas con un brillo espejo, y doscientos años después de su construcción brillan como si estuvieran recién construidas.
En la última foto que corresponde a la tapa de un barrilete se pueden ver inscripciones de relojeros con fechas en las que limpiaron y revisaron este reloj, y la más antigua dice que se limpió el 24 de julio del año 1.839. Nunca se me ha ocurrido poner una inscripción en un reloj, y en este tampoco lo he hecho.
Una característica de los relojes Neuchateloise, tal como he comentado en otro hilo anterior es la gran cantidad de piezas del sistema de sonería situados en el exterior de la platina posterior, y en este caso es especialmente llamativo.
A continuación algunas fotos.
Un saludo.
Esfera con donde se pueden ver las agujas de horas, minutos y despertador.
Máquina vista de frente.
Vista posterior.
Lateral derecho.
Otra vista posterior donde se ven las cinco mazas y se aprecia el brillo de todas las piezas.
El exterior de la platina posterior después de retirar todas las piezas excepto los muelles que las accionan.
Después de retirar la platina posterior. Se aprecian bien los aceites resecos en diferentes partes.
Detalle del limitador situado en el barrilete.
Inscripciones de relojeros que alguna vez hicieron mantenimiento de este reloj.
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