Seguramente en algún hilo estará explicado, si es así ruego disculpéis mi ignorancia, pero no acabo de entender, que para montar la esfera naranja, sea necesario enviarlo al servicio técnico, con el coste y tiempo adicional que eso significa. ¿Porqué no se puede montar la esfera de uno u otro color en el proceso de montaje en la fábrica de origen?. ¿Tan complicado es definir le gusto de cada forero inscrito y dar el número de relojes que tienen que ir con una dotación u otra a la fábrica que se encarga de montarlos?.
Espero que esta duda no moleste a nadie y solamente volver a agradecer el esfuerzo de todas las personas implicadas en el complejo proceso que está teniendo lugar para "dar a luz" nuestro Buzo
, que como todos supongo, estoy impaciente por manosear y disfrutar
.
Hay varias razones por lo que se ha decidido actuar de esta manera. Las detallamos a continuación:
1- Desde un principio se decidió que los 333 relojes vinieran de fábrica exactamente iguales. Fue en el momento en el que se empezó a hablar de las diferentes terminaciones en los calibres cuando se llegó al acuerdo de que todos debían venir montados de igual manera. El ofrecer cambiar la esfera una vez hayan llegado a aquí, y antes de ser enviados, no es para otra cosa que para evitar que el propietario del reloj que quiera la esfera naranja, tenga que recibirlo en su casa y volverlo a enviar al SAT, con la consiguiente pérdida de tiempo, además de tener que pagar los gastos de envío de la ida y la vuelta. De esta manera, sólo lo recibirán unos días más tarde, pero se ahorrarán más tiempo y dinero.
2- Cualquier variación que le pidamos a fábrica sobre el reloj original tiene un sobrecoste. Se decidió que El Buzo viniera con esfera negra, por lo que pedir ciertos relojes vengan con otro color de esfera supondría un incremento. Esto sudedió con el Le Grand, si bien, al tener nosotros un margen comercial, fuimos los que asumimos este gasto y cada persona pudo escoger su color de agujas. Como es lógico pensar, cualquier tipo de personalización incrementa los costes de producción, ya sea en relojería o en cualquier otro sector.
Además, en este caso, al ser una serie limitada y numerada, no sería decir " que monten un 80% con la esfera negra y el 20% con la esfera naranja". Habría que especificar qué números llevan un color y qué números llevan otro, y al ser el montaje de las esferas completamente manual, este proceso conllevaría algún error, tal como pasó con el Le Grand.
3- De nuestra primera experiencia con el Le Grand aprendimos que las personas se equivocan. Muchos de los relojes que venían con las agujas pedidas de un color llegaron equivocados, lo que supuso tener que organizar todo para que nuestro SAT pudiera cambiarlas, algo que supone más tiempo y esfuerzo. Si eso pasó en un proyecto de 100 unidades podemos extrapolarlo a uno de 333 y pensar cómo podría ser. De esta forma, somos nosotros desde aquí los que controlamos que todo quede perfecto.
Agradecemos este tipo de preguntas, ya que así podemos explicar mejor cómo funcionan los engranajes internos y así podéis haceros una mejor idea de la complejidad que tiene la gestión de un proyecto de esta envergadura. Estamos poniendo todas nuestras ganas y saber hacer en que salga todo redondo y, estamos seguros de que así será.
