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El próximo Porsche 911 GT3 y la traición a los principios puristas
Porsche 911 GT3 RS
El título que he dado a esta noticia puede sonar amarillista, pero lo cierto es que de cumplirse estos rumores cada vez más fundados que circulan por Internet muchos puristas echarán las manos a la cabeza. Según informadores privilegiados en foros como Rennlist, el próximo Porsche 911 GT3 podría abandonar el esquema de motor colgado tras el eje trasero en favor de una disposición central, como en el Cayman. Los argumentos esgrimidos son una mejor distribución de pesos y dinámica.
Muy loable, pero entonces ya no sería un 911, sería un Cayman grande. Si hay algo característico en los 911 es la evolución constante del esquema de motor trasero, una configuración arcaica que tiene su origen en el Volkswagen Käfer original y que se ha mantenido vigente hasta la actualidad. Renunciar a esta evolución, aún en un modelo de altas prestaciones, es el equivalente a tirar la toalla. Los cambios ya serían suficientemente traumáticos, pero no terminan aquí.
Porsche 911 GT3 RSR
Según el mismo informe el próximo 911 GT3 sólo estaría disponible con caja de cambios PDK. El abandono de las cajas manuales en el mundo del automóvil es cada vez más patente, en favor de automáticas muy eficientes o cajas de doble embrague. Pero en un vehículo como el GT3, donde lo que importa es el sentimiento y las sensaciones, no me parece lo más adecuado. En todo caso, parece que la versión hardcore GT3 RS sí retendría tres pedales, como toda la vida se ha conducido.
El motor que tendrá este deportivo será un 4.0 bóxer con inyección directa, que aún siendo atmosférico entregaría nada menos que 480 CV de potencia, 120 CV/litro de potencia específica. Nada que objetar aquí. Otra posible decepción para algunos puede ser el KERS. El mecanismo desarrollado por Williams y aplicado al 911 GT3 R Hybrid que compite en la categoría GT no puede ser aplicado a coches de calle por el momento, o al menos, quizá no para el 911 y sí para los 918 Spyder.
El último avance positivo es una reducción adicional de peso de unos 100 kg con respecto al modelo saliente. Sea como sea, los magos de Porsche convertirán a esta máquina en una bestia de devorar asfalto, sólo espero que no a costa de traicionar sus principios, no en un GT3.
Vía: Autoblog
En Diariomotor.
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